JoHN
Antiguos Moderadores
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Hace unos años un foro en internet era lo más parecido a una red social tal como las conocemos ahora. Los que nos movíamos en ellos éramos personas bastante normales, quizás algo frikis según el foro, con diferentes aficiones y con diferentes personalidades. Mejores o peores personas con pocas diferencias en los diferentes ámbitos.
Hoy, las redes sociales han convertido a los foros en algo secundario. El aparentar ha hecho que las personas puedan ser mejores y peores al mismo tiempo en el ámbito analógico o el digital. Hoy hay postureo por doquier y quienes tenemos contacto con la adolescencia sabemos que esa necesidad de sentirse integrados en un grupo lleva a hacer cosas en el ámbito digital que no se harían en el analógico. Y está generando problemas personales muy graves.
Me puedo equivocar, pero me aventuro a decir que hoy hay mucho memo digital. Mentecatos maleducados creados por la esclavitud a la que la industria los arrastra.
Hace 10 años uno enviaba un privado en esta bendita casa y tenía muchos números de que la respuesta fuera cordial, correcta y educada. A veces en cantidades industriales.
Hoy, quizás por mala suerte, pero también por circunstancias sociales, por el crecimiento desbordante de gente o vaya usted a saber por cuantas razones, cuando envío un mensaje siempre tengo la sensación de peligro de poder recibir un exabrupto, una mala respuesta, algo escueto y desagradable, una intención de discusión beligerante o la más absoluta ignorancia y silencio (no) escrito. Hasta en abierto.
Y todo este rollo off topic de relojes pero in topic foreril, viene porque hoy he sentido plena reconciliación con la esperanza de que todo no haya cambiado tanto. He hablado con alguien que ya hace tiempo que es un amigo del foro, con alguien que lo es desde hace cosa de un año y con alguien nuevo que he conocido de cerca (digitalmente) hoy. Un compañero de foro con el que nunca había hablado directamente. Y ambos demuestran una calidad humana, una educación y un saber estar que hacen sentir a uno la necesidad de esforzarse para estar a la altura.
Esto no va de relojes, va de personas. Sin las personas, los relojes y el foro serían algo sin importancia alguna.
Olvidad la calidad de los relojes. Dejadla en un plano secundario. Comprad lo que os guste, independientemente de su calidad. Si os lo podéis permitir, adelante con lo que sea. Pero si no, estar en esta comunidad y conocer a buena gente, os hará disfrutar de cualquier reloj.
No hay que sentar cátedra sobre relojes, marcas o mecanismos. Son cosas. Y las cosas ayudan cuando el resto, la salud y las personas te hacen feliz. Hay que sentar cátedra en la calidad humana. En la educación. Esa educación que los políticos se pasan por el forro mientras se encargan de demostrarlo con sus formas de hacer y sus actitudes propias de gente que no ha sido bien educada.
Importa el tiempo. Importa tenerlo. Importa como lo pasemos. Los relojes importan, pero poco.
Hoy, las redes sociales han convertido a los foros en algo secundario. El aparentar ha hecho que las personas puedan ser mejores y peores al mismo tiempo en el ámbito analógico o el digital. Hoy hay postureo por doquier y quienes tenemos contacto con la adolescencia sabemos que esa necesidad de sentirse integrados en un grupo lleva a hacer cosas en el ámbito digital que no se harían en el analógico. Y está generando problemas personales muy graves.
Me puedo equivocar, pero me aventuro a decir que hoy hay mucho memo digital. Mentecatos maleducados creados por la esclavitud a la que la industria los arrastra.
Hace 10 años uno enviaba un privado en esta bendita casa y tenía muchos números de que la respuesta fuera cordial, correcta y educada. A veces en cantidades industriales.
Hoy, quizás por mala suerte, pero también por circunstancias sociales, por el crecimiento desbordante de gente o vaya usted a saber por cuantas razones, cuando envío un mensaje siempre tengo la sensación de peligro de poder recibir un exabrupto, una mala respuesta, algo escueto y desagradable, una intención de discusión beligerante o la más absoluta ignorancia y silencio (no) escrito. Hasta en abierto.
Y todo este rollo off topic de relojes pero in topic foreril, viene porque hoy he sentido plena reconciliación con la esperanza de que todo no haya cambiado tanto. He hablado con alguien que ya hace tiempo que es un amigo del foro, con alguien que lo es desde hace cosa de un año y con alguien nuevo que he conocido de cerca (digitalmente) hoy. Un compañero de foro con el que nunca había hablado directamente. Y ambos demuestran una calidad humana, una educación y un saber estar que hacen sentir a uno la necesidad de esforzarse para estar a la altura.
Esto no va de relojes, va de personas. Sin las personas, los relojes y el foro serían algo sin importancia alguna.
Olvidad la calidad de los relojes. Dejadla en un plano secundario. Comprad lo que os guste, independientemente de su calidad. Si os lo podéis permitir, adelante con lo que sea. Pero si no, estar en esta comunidad y conocer a buena gente, os hará disfrutar de cualquier reloj.
No hay que sentar cátedra sobre relojes, marcas o mecanismos. Son cosas. Y las cosas ayudan cuando el resto, la salud y las personas te hacen feliz. Hay que sentar cátedra en la calidad humana. En la educación. Esa educación que los políticos se pasan por el forro mientras se encargan de demostrarlo con sus formas de hacer y sus actitudes propias de gente que no ha sido bien educada.
Importa el tiempo. Importa tenerlo. Importa como lo pasemos. Los relojes importan, pero poco.
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