Complicado tema, geniales las aportaciones de los compañeros.
Tengo un perfil bastante compulsivo en general, en mi vida, pero lo sé y eso me hace poner alguna barrera de autocontrol.
Imagino que paso por una relojería, y veo, Omega al 40% (ojalá), mi cerebro empieza a enviarme señales tipo:
"A este precio el delito es no comprarlo"
"Si no te gusta lo revendes y hasta le ganas"
"Es una oportunidad, sacas estas 2 piezas para compensar una parte"
La cosa es tener una excusa o excusas para comprarlo, pero cuando soporto el momento inicial, llego a casa y leo sobre el reloj, y lo quiero, y lo deseo, pero se va desvaneciendo, y pasados unos días me doy cuenta de que no lo necesito, que no es tan especial como pensé en el momento de pegar mi nariz a la vitrina...
Me pasa en todos los campos, me he mudado 7 veces en 5 años, cambio de moto (scooters pequeñas), compro ropa, organizo viajes... Todo dentro del espectro de gasto que puedo asumir, y sin arriesgar nada. Pero siempre imagino la novedad mucho más apasionante de lo que luego suele ser... Pero adoro las novedades, joder.
Creo que mi mujer, como en muchos otros campos de mi vida, me ayuda a frenar los impulsos relojeros.