En todo lo que compres, es bueno pensar. Imagina que te llegan así de golpe los 170 millones de Euros de la euromillón. Evidente, es que, sea cual sea tu situación actual, esa liquidez no es fácil que la hubieras tenido hasta ahora. Ni con patrimonios que multipliquen esa cifra.
Y por tanto, así en cuenta corriente, te puedes permitir -en esta conjetura- comprar lo que quieras. Cierto.
Pero, vale la pena -incluso en esa locura- hacer una reflexión. ¿Me gusta para hoy, o me gusta para siempre? ¿Si compro 19 relojes el mismo día, los disfrutaría? ¿Conduciría con gusto los 11 coches que me compraré hoy? ¿Se quedará alguno sin estrenar, porque realmente por ser capricho, se va a quedar ahí sin encontrar el momento para iniciar su uso?
Entonces, -es mi reflexión- creo que aunque puedas comprar seis casas en seis ciudades del mundo, es razonable que vivas con amigos y con familia en uno o dos lugares; quizás tres por razón de temporalidad -nieve-playa-vida habitual. ¿Y las otras tres? ¿No es mejor una suite y cuando te vas ya no gastas nada?
etc.
Por ello, creo que la distancia entre compras debe intentar limitar las compras compulsivas. Disfrutar incluso poniendose un poco el freno es más "completo".
Pero claro, esa es mi opinión -sin leer otras respuestas, pues prefiero contestar por mí mismo. Habrá otras, seguro interesntes.