• El foro de relojes de habla hispana con más tráfico de la Red, donde un reloj es algo más que un objeto que da la hora. Relojes Especiales es el punto de referencia para hablar de relojes de todas las marcas, desde Rolex hasta Seiko, alta relojería, relojes de pulsera y de bolsillo, relojería gruesa y vintages, pero también de estilográficas. Además, disponemos de un foro de compraventa donde podrás encontrar el reloj que buscas al mejor precio. Para poder participar tendrás que registrarte.

    IMPORTANTE: Asegúrate de que tu dirección de email no está en la lista Robinson (no publi), porque si lo está no podremos validar tu alta.

Panerai, otra que se sube al carro...

  • Iniciador del hilo Iniciador del hilo Toful
  • Fecha de inicio Fecha de inicio
Contra el vicio de pedir la virtud de no dar.
 
  • Me gusta
Reacciones: DavidSG
Esto es obra de Darth Vader!!
Sin comentarios

OIP.webp
 
  • Me gusta
Reacciones: caminos
Acabo de ver que Panerai también ha subido precios....al menos el Radiomir Logo, que era el que tenía en mi radar, le han metido otro empujón de 300€.
Se merecerían todas tener un buen descalabro por usureras...
Las subidas indiscriminadas de todas las marcas tendrán graves consecuencias tarde o temprano, subidas de precios para compensar las caídas en ventas y mantenimiento de márgenes, una espiral suicida.
 
Aparte de la especulación, todos los precios han subido. En todos los sectores. Otra cosa es analizar cuál es el coste de producción de un reloj cualquiera y qué márgenes llevan las marcas. Son muy altos. Esto es puro marketing y tontos no son.
 
Después de decir lo que dije, en relación con la ceguera de los consumidores sobre lo que se avecina, que es versión triste de lo peor que imagináis, ahora indico que hay ciertos productos que van a quedar como objetos de museo.
Está claro que los relojeros van a intentar exprimir la vaca. Y que me da igual que sea Panerai, que Swach, que Rolex que Audemars Piguet,, pues todos están en lo mismo.
Todos sabemos que hay objetos escasos que por frecuentes en otros momentos, ahora son vendidos en anticuarios como excepcionales.
Ante este panorama, podemos mirar adelante y pensar que mucho de lo que tenemos, relojes "caros" que requieren un mantenimiento (carísimo, claramente especulativo), no va a ser mantenido por los que nos sigan. Hoy los jóvenes apenas llevan reloj. Y joven es un tipo de 35 años (salvando las realidades, que no dejan de ser excepcionales).
Además, el poder adquisitivo de las familias ha descendido drásticamente. Cierto que un coche de 40.000 Euros es lo que "se compra", y se venden menos que antes. Pero también que yendo a lo práctico, el hijo prefiere el coche al reloj, cuando como está pasando, la alternativa es uno u otro.
Esto supone que poco a poco las grandes marcas se estarán quedando sin clientes. ¡ Quedan muchos! dirán, pero lo cierto es que por muchos que queden, cada vez son menos.
Esto va a conducir a lo mismo que lo sucedido con los bancos. Al final -de un período que los de 35 años vivirán- habrá tres fabricantes de relojes mecánicos, y 60 personas en el mundo que sean capaces de reparar, mantener o fabricar relojes mecánicos. Y los precios, vomitivos, y por ello cada vez más reducida su clientela.
El problema ya no será el precio. Será la inminente extincion de la especie relojeril. Perdida la batalla, los aparatitos electrónicos suplirán toda función.
Solo si esa tormenta solar anunciada, esa lluvia de iones que va a "descuajaringar" toda la electrónica del mundo llega a tiempo, será cuando alguien piense que lo de los libros en papel (que puedan ser leídos sin necesidad de una interface electrónica) o los elementos mecánicos, entre ellos, para medir el tiempo, sea el medio de mantener mínimamente la realidad cultural, económica y lúdica de la vida.
(Como agorero ya veréis que merezco un premio al pesimismo. Pero cerrar los ojos no va a mejorar nada)
 
Virgen santa vamos a vivir la vida a lo loco que nos queda poco para disfrutar de nuestros relojes!

extincion, extinción!
 
Después de decir lo que dije, en relación con la ceguera de los consumidores sobre lo que se avecina, que es versión triste de lo peor que imagináis, ahora indico que hay ciertos productos que van a quedar como objetos de museo.
Está claro que los relojeros van a intentar exprimir la vaca. Y que me da igual que sea Panerai, que Swach, que Rolex que Audemars Piguet,, pues todos están en lo mismo.
Todos sabemos que hay objetos escasos que por frecuentes en otros momentos, ahora son vendidos en anticuarios como excepcionales.
Ante este panorama, podemos mirar adelante y pensar que mucho de lo que tenemos, relojes "caros" que requieren un mantenimiento (carísimo, claramente especulativo), no va a ser mantenido por los que nos sigan. Hoy los jóvenes apenas llevan reloj. Y joven es un tipo de 35 años (salvando las realidades, que no dejan de ser excepcionales).
Además, el poder adquisitivo de las familias ha descendido drásticamente. Cierto que un coche de 40.000 Euros es lo que "se compra", y se venden menos que antes. Pero también que yendo a lo práctico, el hijo prefiere el coche al reloj, cuando como está pasando, la alternativa es uno u otro.
Esto supone que poco a poco las grandes marcas se estarán quedando sin clientes. ¡ Quedan muchos! dirán, pero lo cierto es que por muchos que queden, cada vez son menos.
Esto va a conducir a lo mismo que lo sucedido con los bancos. Al final -de un período que los de 35 años vivirán- habrá tres fabricantes de relojes mecánicos, y 60 personas en el mundo que sean capaces de reparar, mantener o fabricar relojes mecánicos. Y los precios, vomitivos, y por ello cada vez más reducida su clientela.
El problema ya no será el precio. Será la inminente extincion de la especie relojeril. Perdida la batalla, los aparatitos electrónicos suplirán toda función.
Solo si esa tormenta solar anunciada, esa lluvia de iones que va a "descuajaringar" toda la electrónica del mundo llega a tiempo, será cuando alguien piense que lo de los libros en papel (que puedan ser leídos sin necesidad de una interface electrónica) o los elementos mecánicos, entre ellos, para medir el tiempo, sea el medio de mantener mínimamente la realidad cultural, económica y lúdica de la vida.
(Como agorero ya veréis que merezco un premio al pesimismo. Pero cerrar los ojos no va a mejorar nada)
Nunca descarto nada de lo que pueda pasar en el futuro y aunque le veo mucha lógica a lo que dices también pienso que,por otra parte, muchos de los que estamos en este foro y muchos otros que habrá que no están en él,vivimos la gran expansión del reloj de cuarzo en detrimento del reloj mecánico(yo en esa época todavía era un niño),ahora los smartwatches y ahí sigue la relojería mecánica más revalorizada y en auge que nunca.
Creo que la fascinación y admiración por el arte de la relojería mecánica que es lo que sentimos la mayoría de aficionados va por otro camino que no es tener un aparato para ver la hora.
Creo que siempre seguirá habiendo a quienes les guste igual que nos gusta a nosotros.En mi caso desde que tengo uso de razón.Sin explicación alguna,simplemente desde siempre ha sido mi gran afición y pasión.Por este motivo me imagino que si me ocurrió a mi de forma innata seguirá ocurriendo en un determinado porcentaje de la población como ocurre con las artes en general que aunque haya excelentes cámaras de fotos seguirán admirando un cuadro o aunque haya máquinas robotizadas para reproducir a la perfección objetos,formas,etc.seguirán admirando una escultura hecha por un artista.
Un saludo.
 
  • Me gusta
Reacciones: Alejandro Gerardo
En economía está estudiado el llamado "efecto Giffen" que se produce en economías paupérrimas. Cuando un amplio sector pobre de la población se alimenta de lo básico (patatas, nabos) que adereza con otros productos, salsas, frutas, verduras, carnes, y se produce un aumento de precio de lo básico, el efecto Giffen dice que el aumento de precio en los productos básicos subirá la demanda, porque en ese caso el consumidor pobre de recursos preferirá comprar más productos básicos que le satisfagan, que tener necesidades que los aderezos no llegan a cubrir.
En productos de lujo se produce un efecto similar que no está apadrinado por aquel economista.
La ley de la demanda en principio se cruza con la de la oferta. Sin embargo, en productos de lujo, está demostrado que la élite prefiere comprar productos más caros que le identifiquen como parte de un grupo "superior", y el interés de la compra aumenta cuando el precio aumenta, de forma independiente al valor esencial.

En estos momentos en los que se pretende limitar derechos de los ciudadanos (leed sobre el Foro de Davos y la Agenda 2030... y no es conspiración, está escrito) veréis lo chungo que va a ser vivir para ciertas masas de personas, limitadas por cultura, limitadas por acceso al trabajo, limitadas por capacidad intelectual por no desarrollarla, y limitadas por condenarlas a la inmovilidad (y cuidado con el cierre de barrios, que llegará); viviendo de subvenciones y adscritos a la tierra. Como en la edad media. Y lo peor, aplaudiendo con las orejas por la generosidad de quien les subvenciona hasta la pobreza extrema.

Así que es lógico que ahora es cuando a la vista de todo esto, se pretende hacer caja. Siempre habrá quien compre y pague de más. Siempre esto supondrá para alguno estar arriba cuando lo anunciado (que nadie ha leído, que nadie se cree) se produzca. Lo lamento por los más jóvenes. Los que hemos ido a comprar el pan con seis años, en bicicleta para volver a comer, en moto sin casco, al monte que nos daba la gana, a navegar sin radio, etc., duraremos menos aquí, o por lo menos habremos bailado.

Después de decir lo que dije, en relación con la ceguera de los consumidores sobre lo que se avecina, que es versión triste de lo peor que imagináis, ahora indico que hay ciertos productos que van a quedar como objetos de museo.
Está claro que los relojeros van a intentar exprimir la vaca. Y que me da igual que sea Panerai, que Swach, que Rolex que Audemars Piguet,, pues todos están en lo mismo.
Todos sabemos que hay objetos escasos que por frecuentes en otros momentos, ahora son vendidos en anticuarios como excepcionales.
Ante este panorama, podemos mirar adelante y pensar que mucho de lo que tenemos, relojes "caros" que requieren un mantenimiento (carísimo, claramente especulativo), no va a ser mantenido por los que nos sigan. Hoy los jóvenes apenas llevan reloj. Y joven es un tipo de 35 años (salvando las realidades, que no dejan de ser excepcionales).
Además, el poder adquisitivo de las familias ha descendido drásticamente. Cierto que un coche de 40.000 Euros es lo que "se compra", y se venden menos que antes. Pero también que yendo a lo práctico, el hijo prefiere el coche al reloj, cuando como está pasando, la alternativa es uno u otro.
Esto supone que poco a poco las grandes marcas se estarán quedando sin clientes. ¡ Quedan muchos! dirán, pero lo cierto es que por muchos que queden, cada vez son menos.
Esto va a conducir a lo mismo que lo sucedido con los bancos. Al final -de un período que los de 35 años vivirán- habrá tres fabricantes de relojes mecánicos, y 60 personas en el mundo que sean capaces de reparar, mantener o fabricar relojes mecánicos. Y los precios, vomitivos, y por ello cada vez más reducida su clientela.
El problema ya no será el precio. Será la inminente extincion de la especie relojeril. Perdida la batalla, los aparatitos electrónicos suplirán toda función.
Solo si esa tormenta solar anunciada, esa lluvia de iones que va a "descuajaringar" toda la electrónica del mundo llega a tiempo, será cuando alguien piense que lo de los libros en papel (que puedan ser leídos sin necesidad de una interface electrónica) o los elementos mecánicos, entre ellos, para medir el tiempo, sea el medio de mantener mínimamente la realidad cultural, económica y lúdica de la vida.
(Como agorero ya veréis que merezco un premio al pesimismo. Pero cerrar los ojos no va a mejorar nada)

¡Madre del amor hermoso!, qué futuro nos describes compañero. Y lo peor del caso es que lleva toda la pinta de cumplirse en su mayoría.
En mi caso, y por razones de edad, me pueden quedar con mucha suerte 20 años en el convento. Y los quiero pasar de la mejor manera posible, sin renunciar a nada que pueda pagar sin comprometer el normal funcionamiento de mi economía domestica.

Como dice un viejo dicho: El que se muere, y deja dinero en herencia, es que no ha hecho bien las cuentas.
 
  • Me gusta
Reacciones: jmnav, Korben y Alejandro Gerardo
“Ante la bondad/vicio de pedir esta la virtud del no dar”
Pero ellos saben que a dia de hoy tiene un nicho de mercado que aun puede con esos precios, que pasara el dia de mañana ?? 🤷🏼‍♂️ Pero mientras tanto !! €€€
 
Nunca descarto nada de lo que pueda pasar en el futuro y aunque le veo mucha lógica a lo que dices también pienso que,por otra parte, muchos de los que estamos en este foro y muchos otros que habrá que no están en él,vivimos la gran expansión del reloj de cuarzo en detrimento del reloj mecánico(yo en esa época todavía era un niño),ahora los smartwatches y ahí sigue la relojería mecánica más revalorizada y en auge que nunca.
Creo que la fascinación y admiración por el arte de la relojería mecánica que es lo que sentimos la mayoría de aficionados va por otro camino que no es tener un aparato para ver la hora.
Creo que siempre seguirá habiendo a quienes les guste igual que nos gusta a nosotros.En mi caso desde que tengo uso de razón.Sin explicación alguna,simplemente desde siempre ha sido mi gran afición y pasión.Por este motivo me imagino que si me ocurrió a mi de forma innata seguirá ocurriendo en un determinado porcentaje de la población como ocurre con las artes en general que aunque haya excelentes cámaras de fotos seguirán admirando un cuadro o aunque haya máquinas robotizadas para reproducir a la perfección objetos,formas,etc.seguirán admirando una escultura hecha por un artista.
Un saludo.
GGFF, estoy de acuerdo contigo, pero...
No puedes dejar aparte el hecho de que hay profesiones "artísticas" o "manuales" que se han perdido absolutamente. Hoy es muy difícil encontrar quien haga rejilla para asientos (salvo la de plástico estampada en un molde) de médula de rattan (En España, por ejemplo los que quedan llevan lo menos 6 décadas en sus riñones. O sea, a extinguir). Imposible un colchonero (uno de esos que deshacía los bolos de lana para confort de los usuarios de aquellos colchones, sin duda "mejorados" con los fabricados con derivados del petróleo, pero, por tanto, ya desaparecidos). Es casi imposible comprar o encargar un mueble tallado, salvo que sea mediante molduras de madera artificial. Y eso son profesiones para las que hace falta solo dos manos y unas herramientas. Infraestructura paupérrima, si me lo permitís. Y se están extinguiendo.

Pero cuando de lo que se trata es de desarrollar todo un planteamiento industrial que además es artístico (relojes "de los buenos") solo soportan el coste las ventas; menos ventas mayor coste por reloj. Y esto es una escalada que solo en un momento rompe la línea de cruce de oferta y demanda; la demanda no existe a ese precio, y la oferta no puede bajar el precio, se produce el crac. Y esto es economía. Y eso va a echar abajo la industria del reloj mecánico. Además (leed la agenda 2030, los planes del club Bildelberg pasados a los gobiernos, y del foro de Davos, y resulta inexorable: Todos pobres en 10 años, y quedan 8; y es mundial, no es en España) está escrito y se está cumpliendo. Incluso la pandemia, casualmente expresada como un hecho casual y futuro pero eslabón necesario para desarrollar esos planes. Al tiempo.

Y de ahí a que los relojeros viejos se jubilen y haya cuatro indocumentados que "se han sacado el título" (y si es como ahora se promete, regalado, no os digo) pero no han metido mano ni una vez en un reloj que no sea el de prácticas, va un paso. Y con ello lo que inevitablemente se anuncia.

Que los relojeros de prestigio lo saben... ¡Tooooma si lo saben! Y que al final solo quedarán los relojes mecánicos fabricados, ensamblados y montados a máquina, también, y que no se repararán (¿quién sabrá cómo?)... también.

Lo demás, no es "agorerismo", pues es ver que hay profesiones en decadencia, que no se enseñan, que se aprenden "en casa" y que hay hijos que prefieren ser médicos que campaneros, por más que su padre lo fuera, igual que su abuelo, su bisabuelo, su tatarabuelo... pues es la realidad que lleva a la desaparición. -Hay varias sentencias que prohiben el sonido de las campanas si "molestan", (cuestión subjetiva; baste odiar la iglesia para que uno diga sentirse molesto) ¿Para qué fabricar una más?- Como tantas cosas. Y hoy por más que digan, no tiene "nadie*" ganas más que de fiesta y tiempo libre.

Espero estar equivocadísimo. Pero, cuando tiene cuatro patas, te quiere mucho, te lame cuando estás triste, te mira con ojazos, y te lame y te hace fiestas cuando llegas a casa incluso cuando vuelves de pedir sal a los vecinos, y además ladra, aunque no lo llames de ese modo, seguramente es un perro. Y es que cambiar el nombre de las cosas no cambia su esencia.
* (entiéndase, salvo excepciones)
 
  • Me gusta
Reacciones: minimartinet y Powerman
Hola Gerardo,leeré los documentos que comentas porque no tendría sentido darte una respuesta sin tener la misma información que tú.
Muy interesante tu aporte.
Un saludo.
 
  • Me gusta
Reacciones: Alejandro Gerardo
GGFF, estoy de acuerdo contigo, pero...
No puedes dejar aparte el hecho de que hay profesiones "artísticas" o "manuales" que se han perdido absolutamente. Hoy es muy difícil encontrar quien haga rejilla para asientos (salvo la de plástico estampada en un molde) de médula de rattan (En España, por ejemplo los que quedan llevan lo menos 6 décadas en sus riñones. O sea, a extinguir). Imposible un colchonero (uno de esos que deshacía los bolos de lana para confort de los usuarios de aquellos colchones, sin duda "mejorados" con los fabricados con derivados del petróleo, pero, por tanto, ya desaparecidos). Es casi imposible comprar o encargar un mueble tallado, salvo que sea mediante molduras de madera artificial. Y eso son profesiones para las que hace falta solo dos manos y unas herramientas. Infraestructura paupérrima, si me lo permitís. Y se están extinguiendo.

Pero cuando de lo que se trata es de desarrollar todo un planteamiento industrial que además es artístico (relojes "de los buenos") solo soportan el coste las ventas; menos ventas mayor coste por reloj. Y esto es una escalada que solo en un momento rompe la línea de cruce de oferta y demanda; la demanda no existe a ese precio, y la oferta no puede bajar el precio, se produce el crac. Y esto es economía. Y eso va a echar abajo la industria del reloj mecánico. Además (leed la agenda 2030, los planes del club Bildelberg pasados a los gobiernos, y del foro de Davos, y resulta inexorable: Todos pobres en 10 años, y quedan 8; y es mundial, no es en España) está escrito y se está cumpliendo. Incluso la pandemia, casualmente expresada como un hecho casual y futuro pero eslabón necesario para desarrollar esos planes. Al tiempo.

Y de ahí a que los relojeros viejos se jubilen y haya cuatro indocumentados que "se han sacado el título" (y si es como ahora se promete, regalado, no os digo) pero no han metido mano ni una vez en un reloj que no sea el de prácticas, va un paso. Y con ello lo que inevitablemente se anuncia.

Que los relojeros de prestigio lo saben... ¡Tooooma si lo saben! Y que al final solo quedarán los relojes mecánicos fabricados, ensamblados y montados a máquina, también, y que no se repararán (¿quién sabrá cómo?)... también.

Lo demás, no es "agorerismo", pues es ver que hay profesiones en decadencia, que no se enseñan, que se aprenden "en casa" y que hay hijos que prefieren ser médicos que campaneros, por más que su padre lo fuera, igual que su abuelo, su bisabuelo, su tatarabuelo... pues es la realidad que lleva a la desaparición. -Hay varias sentencias que prohiben el sonido de las campanas si "molestan", (cuestión subjetiva; baste odiar la iglesia para que uno diga sentirse molesto) ¿Para qué fabricar una más?- Como tantas cosas. Y hoy por más que digan, no tiene "nadie*" ganas más que de fiesta y tiempo libre.

Espero estar equivocadísimo. Pero, cuando tiene cuatro patas, te quiere mucho, te lame cuando estás triste, te mira con ojazos, y te lame y te hace fiestas cuando llegas a casa incluso cuando vuelves de pedir sal a los vecinos, y además ladra, aunque no lo llames de ese modo, seguramente es un perro. Y es que cambiar el nombre de las cosas no cambia su esencia.
* (entiéndase, salvo excepciones)
Perdón,Alejandro Gerardo.Se me olvidó y sólo puse tu segundo nombre.
 
  • Me gusta
Reacciones: Alejandro Gerardo
En economía está estudiado el llamado "efecto Giffen" que se produce en economías paupérrimas. Cuando un amplio sector pobre de la población se alimenta de lo básico (patatas, nabos) que adereza con otros productos, salsas, frutas, verduras, carnes, y se produce un aumento de precio de lo básico, el efecto Giffen dice que el aumento de precio en los productos básicos subirá la demanda, porque en ese caso el consumidor pobre de recursos preferirá comprar más productos básicos que le satisfagan, que tener necesidades que los aderezos no llegan a cubrir.
En productos de lujo se produce un efecto similar que no está apadrinado por aquel economista.
La ley de la demanda en principio se cruza con la de la oferta. Sin embargo, en productos de lujo, está demostrado que la élite prefiere comprar productos más caros que le identifiquen como parte de un grupo "superior", y el interés de la compra aumenta cuando el precio aumenta, de forma independiente al valor esencial.

En estos momentos en los que se pretende limitar derechos de los ciudadanos (leed sobre el Foro de Davos y la Agenda 2030... y no es conspiración, está escrito) veréis lo chungo que va a ser vivir para ciertas masas de personas, limitadas por cultura, limitadas por acceso al trabajo, limitadas por capacidad intelectual por no desarrollarla, y limitadas por condenarlas a la inmovilidad (y cuidado con el cierre de barrios, que llegará); viviendo de subvenciones y adscritos a la tierra. Como en la edad media. Y lo peor, aplaudiendo con las orejas por la generosidad de quien les subvenciona hasta la pobreza extrema.

Así que es lógico que ahora es cuando a la vista de todo esto, se pretende hacer caja. Siempre habrá quien compre y pague de más. Siempre esto supondrá para alguno estar arriba cuando lo anunciado (que nadie ha leído, que nadie se cree) se produzca. Lo lamento por los más jóvenes. Los que hemos ido a comprar el pan con seis años, en bicicleta para volver a comer, en moto sin casco, al monte que nos daba la gana, a navegar sin radio, etc., duraremos menos aquí, o por lo menos habremos bailado.

"no tendrás nada... y serás FELIZ..." (Xi Jinping dixit) :whist::

Saludos!
 
  • Me gusta
Reacciones: Korben y Alejandro Gerardo
Poco a poco el sector del lujo lo que intenta es que solo unos pocos puedan disfrutar de él.El que se compra un reloj de más de 6k,no le gustará que cualquiera lo lleve en su muñeca,solo la élite y eso es lo que se paga y lo que algún público demanda.Ni la marca,ni los calibres,etc.Lo que se paga es que solo unos pocos lo tengan,como los coches de edición limitada,Ferrari,porche etc.
 
Con todo lo que se habla de que los jóvenes no están interesados en relojes, que los SmartWatch son el presente y el futuro, que lo analógico no vende...y los relojes disparados. Es algo que no entiendo mucho...
 
Creo que en vez de titularlo "se sube al carro" tendrías que indicar "pierden la cabeza" porque con lo que está cayendo y subir precios.....En fin, para gustos...Colores.
 
Con todo lo que se habla de que los jóvenes no están interesados en relojes, que los SmartWatch son el presente y el futuro, que lo analógico no vende...y los relojes disparados. Es algo que no entiendo mucho...

¿Como relojes, o como objetos de especulación? Cabe la sospecha de que esos jóvenes que han intentado "trapichear" con el moonswatch son los mismos que también lo hacen con las zapatillas de tal o cuál marca, las criptomonedas o los NFT... o caen en el juego o la delincuencia.

A la postre, el "instinto de pelotazo" de una juventud que no ve futuro por "los caminos tradicionales" y tratan de salvar su situación de un solo golpe. Alguien decía que la Historia se repite dos veces, la primera como una gran tragedia y la segunda como una miserable farsa... quizá los epítetos cambien, pero en esto veo reminiscencias de la cultura del pelotazo de los años 80, pero en plan cutre (o a la deseperada).
 
  • Me gusta
Reacciones: zulito
Tranquilidad en las masas , siempre nos quedará Lanscotte
 
Por lo visto vender relojes de lujo no genera el beneficio esperado (añadese aquí el porcentaje anual de crecimiento esperado). ¿Cómo conseguir crecer entonces? Pidiendo más a los compradores justificando encarecimientos de materias primas, exclusividad, lujo etc.... En resumidas cuentas, unos pocos pagan las pérdidas globales. Y esto seguirá así hasta cuando quieras.
Despierta.
 
Quisiera hacer dos comentarios sobre este hilo, ambos totalmente subjetivos y, por tanto, sin valor especial, dado que no soy especialista en el asunto: uno referido a la marca Panerai y otro al futuro de la relojería en general.

En relación a Panerai, aunque es una marca que tiene unos relojes muy identificativos de la marca, grandes y con un aspecto inconfundible, ha cometido varios errores que han lastrado la marca claramente. El primero fue el engaño -en toda regla- de la edición especial con motivo de la inauguración de la Boutique en Nueva York (edición Brooklin, creo) en la que metieron en el reloj un Unitas de la peor calidad cuando ellos indicaban que en su interior había un mecanismo trabajado, modificado, etc. Recientemente, al afirmar que el calibre de uno de sus relojes era de manufactura, cuando en realidad era un simple ETA. Ello fue ampliamente comentado por Perezcope y ha tenido una repercusión mundial. Aun así, parece que Panerai puede permitirse el lujo de subir los precios, por tanto, deduzco que las cosas no le van mal. Yo tengo un Panerai desde hace años, y me gusta. Lo conservo.

En cuanto al futuro de la relojería mecánica de calidad, coincido casi plenamente con lo expuesto por el compañero Alejandro Gerardo -y otros que han intervenido en el debate- en el sentido de que va a ser algo minoritario, por ser un producto muy caro (tanto la compra del reloj como su posterior mantenimiento, que no se va a poder permitir la mayoría) como por la falta de interés de las nuevas generaciones en la materia. Sin embargo, creo que este declive de la relojería tradicional va a ser más patente y acusado en países como España (como ya lo es en los países de América latina) y en otros países en los cuales la pobreza acecha a gran parte de la población, debido a la desaparición casi total de la clase media. Aquí quedará el lumpen proletario, compartiendo vivienda, desplazándose en patinete, con lo justo para vivir, y las clases acomodadas -de distinto nivel-. Estos últimos podrán seguir comprando Rolex, PP y lo que les guste. Los primeros, ni se lo van a plantear. No podrán, aunque quieran. Más que nunca el reloj "de lujo" será algo minoritario y marginal. Eso en España.

No obstante, en países europeos consolidados, en Canadá, en Australia, en Japón, en ciertos estados de EEUU, en el Reino Unido, en todos estos países en los que haya una economía sólida y unos gobernantes serios seguirá habiendo una clase media que querrá acceder a productos de calidad, limitados, caros, aspiracionales, como pueden ser los relojes. También a los jóvenes de estos países, porque será un signo de distinción y de buen gusto. En el resto del mundo, un reloj de calidad en la muñeca será cosa del pasado. Pienso yo.

Un saludo.
 
  • Me gusta
Reacciones: citrustrek
GGFF, estoy de acuerdo contigo, pero...
No puedes dejar aparte el hecho de que hay profesiones "artísticas" o "manuales" que se han perdido absolutamente. Hoy es muy difícil encontrar quien haga rejilla para asientos (salvo la de plástico estampada en un molde) de médula de rattan (En España, por ejemplo los que quedan llevan lo menos 6 décadas en sus riñones. O sea, a extinguir). Imposible un colchonero (uno de esos que deshacía los bolos de lana para confort de los usuarios de aquellos colchones, sin duda "mejorados" con los fabricados con derivados del petróleo, pero, por tanto, ya desaparecidos). Es casi imposible comprar o encargar un mueble tallado, salvo que sea mediante molduras de madera artificial. Y eso son profesiones para las que hace falta solo dos manos y unas herramientas. Infraestructura paupérrima, si me lo permitís. Y se están extinguiendo.

Pero cuando de lo que se trata es de desarrollar todo un planteamiento industrial que además es artístico (relojes "de los buenos") solo soportan el coste las ventas; menos ventas mayor coste por reloj. Y esto es una escalada que solo en un momento rompe la línea de cruce de oferta y demanda; la demanda no existe a ese precio, y la oferta no puede bajar el precio, se produce el crac. Y esto es economía. Y eso va a echar abajo la industria del reloj mecánico. Además (leed la agenda 2030, los planes del club Bildelberg pasados a los gobiernos, y del foro de Davos, y resulta inexorable: Todos pobres en 10 años, y quedan 8; y es mundial, no es en España) está escrito y se está cumpliendo. Incluso la pandemia, casualmente expresada como un hecho casual y futuro pero eslabón necesario para desarrollar esos planes. Al tiempo.

Y de ahí a que los relojeros viejos se jubilen y haya cuatro indocumentados que "se han sacado el título" (y si es como ahora se promete, regalado, no os digo) pero no han metido mano ni una vez en un reloj que no sea el de prácticas, va un paso. Y con ello lo que inevitablemente se anuncia.

Que los relojeros de prestigio lo saben... ¡Tooooma si lo saben! Y que al final solo quedarán los relojes mecánicos fabricados, ensamblados y montados a máquina, también, y que no se repararán (¿quién sabrá cómo?)... también.

Lo demás, no es "agorerismo", pues es ver que hay profesiones en decadencia, que no se enseñan, que se aprenden "en casa" y que hay hijos que prefieren ser médicos que campaneros, por más que su padre lo fuera, igual que su abuelo, su bisabuelo, su tatarabuelo... pues es la realidad que lleva a la desaparición. -Hay varias sentencias que prohiben el sonido de las campanas si "molestan", (cuestión subjetiva; baste odiar la iglesia para que uno diga sentirse molesto) ¿Para qué fabricar una más?- Como tantas cosas. Y hoy por más que digan, no tiene "nadie*" ganas más que de fiesta y tiempo libre.

Espero estar equivocadísimo. Pero, cuando tiene cuatro patas, te quiere mucho, te lame cuando estás triste, te mira con ojazos, y te lame y te hace fiestas cuando llegas a casa incluso cuando vuelves de pedir sal a los vecinos, y además ladra, aunque no lo llames de ese modo, seguramente es un perro. Y es que cambiar el nombre de las cosas no cambia su esencia.
* (entiéndase, salvo excepciones)
Suena a distopia absoluta, pero de la forma que lo planteas tiene toda la lógica, por lo menos a mí también me lo parece.
 
¿Como relojes, o como objetos de especulación? Cabe la sospecha de que esos jóvenes que han intentado "trapichear" con el moonswatch son los mismos que también lo hacen con las zapatillas de tal o cuál marca, las criptomonedas o los NFT... o caen en el juego o la delincuencia.

A la postre, el "instinto de pelotazo" de una juventud que no ve futuro por "los caminos tradicionales" y tratan de salvar su situación de un solo golpe. Alguien decía que la Historia se repite dos veces, la primera como una gran tragedia y la segunda como una miserable farsa... quizá los epítetos cambien, pero en esto veo reminiscencias de la cultura del pelotazo de los años 80, pero en plan cutre (o a la deseperada).
Te ha faltado añadir que fuman, beben y se drogan. Churras con merinas, como se suele decir.

Seguro que esos jóvenes a los que haces referencia especulan con relojes de lujo, seguro.

Por lo visto vender relojes de lujo no genera el beneficio esperado (añadese aquí el porcentaje anual de crecimiento esperado). ¿Cómo conseguir crecer entonces? Pidiendo más a los compradores justificando encarecimientos de materias primas, exclusividad, lujo etc.... En resumidas cuentas, unos pocos pagan las pérdidas globales. Y esto seguirá así hasta cuando quieras.
Despierta.

Y seguís alguno con lo mismo. Me cuesta la lata de atún un 50% más que precovid y ahora la industria del lujo sube precios para compensar las pérdidas globales. ¿Es lujo de lo que hablamos no?

Quisiera hacer dos comentarios sobre este hilo, ambos totalmente subjetivos y, por tanto, sin valor especial, dado que no soy especialista en el asunto: uno referido a la marca Panerai y otro al futuro de la relojería en general.

En relación a Panerai, aunque es una marca que tiene unos relojes muy identificativos de la marca, grandes y con un aspecto inconfundible, ha cometido varios errores que han lastrado la marca claramente. El primero fue el engaño -en toda regla- de la edición especial con motivo de la inauguración de la Boutique en Nueva York (edición Brooklin, creo) en la que metieron en el reloj un Unitas de la peor calidad cuando ellos indicaban que en su interior había un mecanismo trabajado, modificado, etc. Recientemente, al afirmar que el calibre de uno de sus relojes era de manufactura, cuando en realidad era un simple ETA. Ello fue ampliamente comentado por Perezcope y ha tenido una repercusión mundial. Aun así, parece que Panerai puede permitirse el lujo de subir los precios, por tanto, deduzco que las cosas no le van mal. Yo tengo un Panerai desde hace años, y me gusta. Lo conservo.

En cuanto al futuro de la relojería mecánica de calidad, coincido casi plenamente con lo expuesto por el compañero Alejandro Gerardo -y otros que han intervenido en el debate- en el sentido de que va a ser algo minoritario, por ser un producto muy caro (tanto la compra del reloj como su posterior mantenimiento, que no se va a poder permitir la mayoría) como por la falta de interés de las nuevas generaciones en la materia. Sin embargo, creo que este declive de la relojería tradicional va a ser más patente y acusado en países como España (como ya lo es en los países de América latina) y en otros países en los cuales la pobreza acecha a gran parte de la población, debido a la desaparición casi total de la clase media. Aquí quedará el lumpen proletario, compartiendo vivienda, desplazándose en patinete, con lo justo para vivir, y las clases acomodadas -de distinto nivel-. Estos últimos podrán seguir comprando Rolex, PP y lo que les guste. Los primeros, ni se lo van a plantear. No podrán, aunque quieran. Más que nunca el reloj "de lujo" será algo minoritario y marginal. Eso en España.

No obstante, en países europeos consolidados, en Canadá, en Australia, en Japón, en ciertos estados de EEUU, en el Reino Unido, en todos estos países en los que haya una economía sólida y unos gobernantes serios seguirá habiendo una clase media que querrá acceder a productos de calidad, limitados, caros, aspiracionales, como pueden ser los relojes. También a los jóvenes de estos países, porque será un signo de distinción y de buen gusto. En el resto del mundo, un reloj de calidad en la muñeca será cosa del pasado. Pienso yo.

Un saludo.

Completamente de acuerdo con el segundo punto. A menudo se nos olvida que las realidades son distintas dependiendo del lugar del mundo desde dónde se vivan. Ya te digo yo que en mi ciudad de acogida, la demanda de relojes de este tipo ha bajado 0 por la subidas y mucho tendrán que subir para ver que a las joyerías no entra nadie.
 
Atrás
Arriba Pie