A
arlogg
Forer@ Senior
Sin verificar
Interesante hilo...!
Creo que todos estamos familiarizados con lo que algunos sociólogos y economistas llaman "consumo conspicuo" u "ostentoso", según el término acuñado por Veblen. La idea, que imagino que se ha comentado antes en el foro, se resume en lo siguiente (traduciendo la Wikipedia en inglés):
En pocas palabras, "comprar para fardar" y "señalar estatus". Aunque comprendo este impulso, personalmente trato de evitar caer en él (aunque como todos caigo en alguna medida). No me agrada en general, y además, desde un punto de vista meramente estratégico, como medio de "señalización de estatus", es bastante ineficaz. La mayoría de la gente no presta ninguna atención al reloj que llevas. Y los que lo hacen, pocas veces pueden prever la burrada que te has gastado en ello (menos mal! jaja).
Llevo poco en el hobby de los relojes... Personalmente, a la hora de elegir, trato de seguir un criterio algo primitivo, pero honesto: comprar aquellos relojes que en persona me suscitan una reacción emocional de admiración inmediata-un cierto "wow!". Esto es lo que considero clave, y posiblemente el mejor indicador de la satisfacción que me brindará el reloj. No sé de antemano qué reloj va a lograr ese efecto (es parte de la diversión de ir a verlos), y ocurre con marcas y modelos inesperados. Intento guiarme por esas impresiones en persona, valorar la calidad de los materiales y acabados, la estética y el diseño, la ingeniería relojera (aunque sé poquito), la historia del modelo... En cuanto a la marquitis y la ostentación, creo que son simplemente una cosa más de la naturaleza humana, otra tarita... que es mejor tratar de silenciar.
Creo que todos estamos familiarizados con lo que algunos sociólogos y economistas llaman "consumo conspicuo" u "ostentoso", según el término acuñado por Veblen. La idea, que imagino que se ha comentado antes en el foro, se resume en lo siguiente (traduciendo la Wikipedia en inglés):
En 1899, el sociólogo Thorstein Veblen acuñó el término consumo conspicuo para explicar el gasto de dinero y la adquisición de productos de lujo (bienes y servicios) específicamente como una exhibición pública del poder económico -los ingresos y la riqueza acumulada- del comprador. Para el consumidor conspicuo, la exhibición pública de ingresos discrecionales es un medio económico de alcanzar o mantener un determinado estatus social.
En pocas palabras, "comprar para fardar" y "señalar estatus". Aunque comprendo este impulso, personalmente trato de evitar caer en él (aunque como todos caigo en alguna medida). No me agrada en general, y además, desde un punto de vista meramente estratégico, como medio de "señalización de estatus", es bastante ineficaz. La mayoría de la gente no presta ninguna atención al reloj que llevas. Y los que lo hacen, pocas veces pueden prever la burrada que te has gastado en ello (menos mal! jaja).
Llevo poco en el hobby de los relojes... Personalmente, a la hora de elegir, trato de seguir un criterio algo primitivo, pero honesto: comprar aquellos relojes que en persona me suscitan una reacción emocional de admiración inmediata-un cierto "wow!". Esto es lo que considero clave, y posiblemente el mejor indicador de la satisfacción que me brindará el reloj. No sé de antemano qué reloj va a lograr ese efecto (es parte de la diversión de ir a verlos), y ocurre con marcas y modelos inesperados. Intento guiarme por esas impresiones en persona, valorar la calidad de los materiales y acabados, la estética y el diseño, la ingeniería relojera (aunque sé poquito), la historia del modelo... En cuanto a la marquitis y la ostentación, creo que son simplemente una cosa más de la naturaleza humana, otra tarita... que es mejor tratar de silenciar.
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