
superguti
De la casa
Sin verificar
Antes de comenzar esta andadura, quiero felicitar a quien corresponda (todos sabemos quién es), por la iniciativa. Me parece una idea francamente bonita y que en algún caso como el mío, ha servido para algo más importante que la propia experiencia, como fue conocer a un compañero del foro @Fínife.
Este reloj, lleva ya tanto vivido, ha sido tan fotografiado (y de qué manera) , que solo voy a añadir mi granito de arena, para que lo disfrutéis en mi querida ciudad.
Al lío…
Primer día: Oviedo
Comenzamos desde la plaza de América, para los “futboleros “ comentar que aquí es donde los aficionados del Real Oviedo vienen a celebrar los “innumerables” éxitos del equipo.
Antiguo orfanato, hoy convertido en el hotel más representativo de la ciudad, muchos lo conoceréis pues aquí se alojan los reyes y galardonados de los premios Príncipe de Asturias (ahora Princesa): hotel de la Reconquista .
Y hablando de los premios Princesa de Asturias, llegamos al teatro Campoamor, donde son entregados.
Aquí disfrutamos la temporada de ópera.
Otra vista más alejada, para que podáis ver mejor el teatro. Al fondo, nuestro particular “empire state building”: el edificio la jirafa.
Basílica de San Juan el Real; ya que estamos en plan “guía turística “ y a modo de anécdota, yo lo cuento… aquí se casó en 1923 un personaje histórico. Quien quiera saber más, que lo busque.
Llegamos hasta el palacio de congresos, proyectado por Santiago Calatrava. Esta obra es sumamente polémica en la ciudad; primero porque se asienta en el terreno que ocupaba el antiguo estadio Carlos Tartiere, segundo por su tamaño, algo desproporcionado y tercero por el coste de tan colosal obra.
Fallos estructurales aparte (el edificio debería abrirse como si de un coche descapotable se tratase) algo que nunca se pudo, a mi me gusta. Debo ser el único…
Plaza de la escandalera: ese enorme culo, que pertenece a la escultura La Maternidad de Botero, trata de no dejaros ver el palacio que alberga el parlamento asturiano.
El parque de San Francisco es, sin duda, el corazón de la ciudad. Ubicado en el centro de la misma , representa algo muy especial para los ovetenses. Todos hemos pasado la infancia en el, nos hemos dado el primer beso en uno de sus bancos y en las fiestas de San Mateo, alguno ha regado de más sus jardines.
… y sentada en uno de sus bancos, la estatua de Mafalda. Obra del escultor argentino Pablo Irrgang, en honor a su creador Quino, premiado en 2014 con el Príncipe de Asturias de comunicación y humanidades. Por cierto, el Yema le queda genial…
Día 2: el Naranco.
Se puede subir andando, se puede subir en bici, yo me subí al coche…
A mitad de camino, ya se tienen unas vistas parciales de la ciudad, muy bonitas. A la derecha podéis distinguir el campo de fútbol (azul) y a la izquierda el antes comentado edificio de Calatrava, aquí llamado, el centollo.
Es imposible no encontrarse un lugar idílico que fotografiar .
Me detengo para que aprecies, el efecto del sol en la esfera.
Santa Maria del Naranco; construida por el rey Ramiro l , siglo lx (creo que el no participó).
Otra, perspectiva. Todavía hoy en día sigue la duda de qué misión cumplía. Parte de un palacio, pabellón de caza e incluso mausoleo funerario para el propio Ramiro l
… el caso es que sobre sus piedras, ha estado nuestro viajero del foro.
Darme un minuto para refrescarme; esto es lo más cerca del agua que ha estado nuestro amigo. 100m, pero la corona es sin roscar.
San Miguel de Lillo.
A escasos 200 m de Santa Maria, comparte época y rey; quizá todo formaba parte del mismo complejo palaciego.
Día 3: el Oviedo antiguo.
Plaza del ayuntamiento. Aquí me casé yo. Si fuera hoy en día, estaríais invitados.
Plaza del Fontan.
Poco que decir. El orgullo de la ciudad. Catedral de San Salvador. Paso obligado del camino De Santiago. De echo, tal es su importancia, que hay un dicho popular:
“Quien va a Santiago y no al Salvador, visita al criado y no al señor”
Si, le falta una torre. Unos dicen que por falta de financiación, pero todos sabemos que coincidió con las fiestas de San Mateo y en la vida, hay prioridades…
Escultura de La Regenta.
Fin de día, se nos cae la noche.
Día 4: calle Gascona.
Decir que es parada obligada, es una obviedad. Es el centro gastronómico de la ciudad, su calle en pendiente es un hervidero de gente que disfruta de un ambiente festivo todos los días del año. Innumerables sidrerías a un lado y otro de la calle en las que disfrutar del ambiente. No os la perdáis.
Un culin por aquí…
Otro culin por allá
Ya no se, ni cuantos van…
No os voy a decir todo lo que aquí se puede comer. Solo comentaros que el famoso cachopo que tan de moda está ahora, es para nosotros uno más entre los innumerables platos que conforman nuestra gastronomía. La fabada, el pote, las fabes con almejas, los chuletones, el pescado, el marisco… aquí se come mucho. Pero mucho. No lo habéis entendido bien: MUCHO. Y muy buen…
Y por supuesto los quesos. Asturias es la región con más variedad de quesos de Europa. Si, en esto ganamos a Suiza. Al Yema esto le ha hecho gracia.
Día 5: el resumen.
Ya en casa, tranquilo, sosegado, voy a comentaros brevemente mis impresiones. No voy a profundizar demasiado, porque después de tanto viaje y análisis de compañeros previos, tampoco voy a descubrir nada.
Lo primero que notas nada más cogerlo es su peso. Esto no sé si es bueno o malo, a mí no me molesta porque yo soy del “norte”, pero ojo, se nota.
Otra cosa curiosa es que la esfera me parece algo pequeña, sin embargo el reloj no lo es .
Eso sí , todo el protagonismo del reloj se lo lleva el color de la esfera.
Por cierto, que “jodido” es de fotografiar. De verdad, que lo he intentado hacer bien, pero…
Sin duda, si debemos compararlo, todos tenemos en mente el PRX; aquí con el 34mm de mi mujer.
Aquí, en muñeca.
El armis en comparación con el Tissot se ve mucho más “fuerte” como si uno fuera de acero de Bilbao y el otro de latón.
Aquí, por miedo a que tanto viaje le produjera “morriña” , le dejé reposar sobre una dama francesa.
Vamos, que me costó un huevo tanto equilibrio y tenía que meteros la foto como fuera!!! (Votar si los que creáis que se merece la taza de RE)
Y dejó esta última foto para el final, porque para mí representa el verdadero espíritu de este reloj. Más que un GADA,tan en uso ahora , yo lo encajaría más como ejemplo de reloj “urbano”; creo que es donde mejor se mueve. En una oficina, en esa salida con los amigos, en una cena formal, tomando unos gin tonics…
En fin, un reloj divertido, distinto por su tono poco habitual y muy ponible para el día a día.
No lo llevaría al campo y quizá tampoco el día de mi boda (por lo menos en ese color), pero sin duda si a un club londinense, a una coctelería de la gran vía madrileña o a un café parisino.
Quiero despedirme dando las gracias a @Goldoff por haberme dado la oportunidad y la confianza en alojar a nuestro viajero estos días. Y a todos por haber llegado hasta aquí.
Buen viaje!!!
Este reloj, lleva ya tanto vivido, ha sido tan fotografiado (y de qué manera) , que solo voy a añadir mi granito de arena, para que lo disfrutéis en mi querida ciudad.
Al lío…
Primer día: Oviedo
Comenzamos desde la plaza de América, para los “futboleros “ comentar que aquí es donde los aficionados del Real Oviedo vienen a celebrar los “innumerables” éxitos del equipo.
Antiguo orfanato, hoy convertido en el hotel más representativo de la ciudad, muchos lo conoceréis pues aquí se alojan los reyes y galardonados de los premios Príncipe de Asturias (ahora Princesa): hotel de la Reconquista .
Y hablando de los premios Princesa de Asturias, llegamos al teatro Campoamor, donde son entregados.
Aquí disfrutamos la temporada de ópera.
Otra vista más alejada, para que podáis ver mejor el teatro. Al fondo, nuestro particular “empire state building”: el edificio la jirafa.
Basílica de San Juan el Real; ya que estamos en plan “guía turística “ y a modo de anécdota, yo lo cuento… aquí se casó en 1923 un personaje histórico. Quien quiera saber más, que lo busque.
Llegamos hasta el palacio de congresos, proyectado por Santiago Calatrava. Esta obra es sumamente polémica en la ciudad; primero porque se asienta en el terreno que ocupaba el antiguo estadio Carlos Tartiere, segundo por su tamaño, algo desproporcionado y tercero por el coste de tan colosal obra.
Fallos estructurales aparte (el edificio debería abrirse como si de un coche descapotable se tratase) algo que nunca se pudo, a mi me gusta. Debo ser el único…
Plaza de la escandalera: ese enorme culo, que pertenece a la escultura La Maternidad de Botero, trata de no dejaros ver el palacio que alberga el parlamento asturiano.
El parque de San Francisco es, sin duda, el corazón de la ciudad. Ubicado en el centro de la misma , representa algo muy especial para los ovetenses. Todos hemos pasado la infancia en el, nos hemos dado el primer beso en uno de sus bancos y en las fiestas de San Mateo, alguno ha regado de más sus jardines.
… y sentada en uno de sus bancos, la estatua de Mafalda. Obra del escultor argentino Pablo Irrgang, en honor a su creador Quino, premiado en 2014 con el Príncipe de Asturias de comunicación y humanidades. Por cierto, el Yema le queda genial…
Día 2: el Naranco.
Se puede subir andando, se puede subir en bici, yo me subí al coche…
A mitad de camino, ya se tienen unas vistas parciales de la ciudad, muy bonitas. A la derecha podéis distinguir el campo de fútbol (azul) y a la izquierda el antes comentado edificio de Calatrava, aquí llamado, el centollo.
Es imposible no encontrarse un lugar idílico que fotografiar .
Me detengo para que aprecies, el efecto del sol en la esfera.
Santa Maria del Naranco; construida por el rey Ramiro l , siglo lx (creo que el no participó).
Otra, perspectiva. Todavía hoy en día sigue la duda de qué misión cumplía. Parte de un palacio, pabellón de caza e incluso mausoleo funerario para el propio Ramiro l
… el caso es que sobre sus piedras, ha estado nuestro viajero del foro.
Darme un minuto para refrescarme; esto es lo más cerca del agua que ha estado nuestro amigo. 100m, pero la corona es sin roscar.
San Miguel de Lillo.
A escasos 200 m de Santa Maria, comparte época y rey; quizá todo formaba parte del mismo complejo palaciego.
Día 3: el Oviedo antiguo.
Plaza del ayuntamiento. Aquí me casé yo. Si fuera hoy en día, estaríais invitados.
Plaza del Fontan.
Poco que decir. El orgullo de la ciudad. Catedral de San Salvador. Paso obligado del camino De Santiago. De echo, tal es su importancia, que hay un dicho popular:
“Quien va a Santiago y no al Salvador, visita al criado y no al señor”
Si, le falta una torre. Unos dicen que por falta de financiación, pero todos sabemos que coincidió con las fiestas de San Mateo y en la vida, hay prioridades…
Escultura de La Regenta.
Fin de día, se nos cae la noche.
Día 4: calle Gascona.
Decir que es parada obligada, es una obviedad. Es el centro gastronómico de la ciudad, su calle en pendiente es un hervidero de gente que disfruta de un ambiente festivo todos los días del año. Innumerables sidrerías a un lado y otro de la calle en las que disfrutar del ambiente. No os la perdáis.
Un culin por aquí…
Otro culin por allá
Ya no se, ni cuantos van…
No os voy a decir todo lo que aquí se puede comer. Solo comentaros que el famoso cachopo que tan de moda está ahora, es para nosotros uno más entre los innumerables platos que conforman nuestra gastronomía. La fabada, el pote, las fabes con almejas, los chuletones, el pescado, el marisco… aquí se come mucho. Pero mucho. No lo habéis entendido bien: MUCHO. Y muy buen…
Y por supuesto los quesos. Asturias es la región con más variedad de quesos de Europa. Si, en esto ganamos a Suiza. Al Yema esto le ha hecho gracia.
Día 5: el resumen.
Ya en casa, tranquilo, sosegado, voy a comentaros brevemente mis impresiones. No voy a profundizar demasiado, porque después de tanto viaje y análisis de compañeros previos, tampoco voy a descubrir nada.
Lo primero que notas nada más cogerlo es su peso. Esto no sé si es bueno o malo, a mí no me molesta porque yo soy del “norte”, pero ojo, se nota.
Otra cosa curiosa es que la esfera me parece algo pequeña, sin embargo el reloj no lo es .
Eso sí , todo el protagonismo del reloj se lo lleva el color de la esfera.
Por cierto, que “jodido” es de fotografiar. De verdad, que lo he intentado hacer bien, pero…
Sin duda, si debemos compararlo, todos tenemos en mente el PRX; aquí con el 34mm de mi mujer.
Aquí, en muñeca.
El armis en comparación con el Tissot se ve mucho más “fuerte” como si uno fuera de acero de Bilbao y el otro de latón.
Aquí, por miedo a que tanto viaje le produjera “morriña” , le dejé reposar sobre una dama francesa.
Vamos, que me costó un huevo tanto equilibrio y tenía que meteros la foto como fuera!!! (Votar si los que creáis que se merece la taza de RE)
Y dejó esta última foto para el final, porque para mí representa el verdadero espíritu de este reloj. Más que un GADA,tan en uso ahora , yo lo encajaría más como ejemplo de reloj “urbano”; creo que es donde mejor se mueve. En una oficina, en esa salida con los amigos, en una cena formal, tomando unos gin tonics…
En fin, un reloj divertido, distinto por su tono poco habitual y muy ponible para el día a día.
No lo llevaría al campo y quizá tampoco el día de mi boda (por lo menos en ese color), pero sin duda si a un club londinense, a una coctelería de la gran vía madrileña o a un café parisino.
Quiero despedirme dando las gracias a @Goldoff por haberme dado la oportunidad y la confianza en alojar a nuestro viajero estos días. Y a todos por haber llegado hasta aquí.
Buen viaje!!!
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