Rowan Atkinson (Mr. Bean) estrella su McLaren F1, pero sale sano y salvo.
La imagen no se corresponde con el accidente
El popular actor y amante de los coches, Rowan Atkinson, que además apareció hace pocas semanas en Top Gear, y conocido por su papel de Mr. Bean, así como por tener en su garaje un McLaren F1, sufrió ayer por la tarde noche, sobre las 19:30, un tremendo accidente con dicho coche.
Tras el impacto, además, el coche prendió fuego, pero afortunadamente, Atkinson pudo salir de él por su propio pie (el McLaren F1 es uno de los coches de calle más seguros jamás fabricados). Parece ser que la máquina ha quedado seriamente dañada, pero dada la implicación de la marca y del propietario por mantener el legado, apostamos a que tratará de repararlo, o reconstruirlo (no es su primer accidente con "la máquina").
Atkinson, como te comentamos, sólo sufre de dolor en un hombro, al parecer, y acudió al hospital en ambulancia para ser "revisado". Nos alegramos de que haya salido airoso de la situación, y le deseamos lo mejor, pues los coches se pueden reparar o reemplazas, las personas no.
La imagen no se corresponde con el accidente
El popular actor y amante de los coches, Rowan Atkinson, que además apareció hace pocas semanas en Top Gear, y conocido por su papel de Mr. Bean, así como por tener en su garaje un McLaren F1, sufrió ayer por la tarde noche, sobre las 19:30, un tremendo accidente con dicho coche.
Tras el impacto, además, el coche prendió fuego, pero afortunadamente, Atkinson pudo salir de él por su propio pie (el McLaren F1 es uno de los coches de calle más seguros jamás fabricados). Parece ser que la máquina ha quedado seriamente dañada, pero dada la implicación de la marca y del propietario por mantener el legado, apostamos a que tratará de repararlo, o reconstruirlo (no es su primer accidente con "la máquina").
Atkinson, como te comentamos, sólo sufre de dolor en un hombro, al parecer, y acudió al hospital en ambulancia para ser "revisado". Nos alegramos de que haya salido airoso de la situación, y le deseamos lo mejor, pues los coches se pueden reparar o reemplazas, las personas no.