Ciclocampista
Habitual
Sin verificar
¿Y si os digo que todas las coronas roscadas tienen posición flojucha como los Vostok, pero que no la ves?
Esto va en realidad del diseño y desarrollo del reloj de submarinista, que es de nuestros temas favoritos. Como ya sabemos, una de las soluciones para lograr la estanqueidad fue la corona roscada. La corona roscada creaba un problema: no se podía usar una tija fijada a la corona, había que hacer una que se soltase de la corona en la posición roscada y cerrada.
¿Por qué? Piensa en las posiciones de la corona en un reloj: 1 neutra o dar cuerda; 2 ajustar fecha; 3 ajustar hora.
¿Cuál era el problema? Pues que con una corona roscada en la posición desenroscada ya estamos en la posición 1 y por tanto no podemos meter más la tija en el movimiento. Por eso, para poder roscar la corona, hubo que encontrar un sistema que evitase que la tija tuviera que moverse más hacia dentro. ¿Cómo se solucionó esto? Se hizo un mini embrague, un sistema de corona y tija más complicado, con más piezas y un muelle, que permiten que la tija pierda el contacto con la corona en la posición de cierre.
Con una corona roscada, cuando roscas la corona no estás metiendo la tija una posición más adentro, sino que esta permanece en la posición 1. Lo que sucede es que comprimes un muelle y la tija se desembraga y queda libre dentro de la corona. Con este sistema tenemos una nueva posición de la corona, la posición cero con la tija desembragada: 0 tija desembragada, 1 neutra o dar cuerda, 2 ajuste de fecha y 3 ajuste de hora.
Lo más fácil es verlo en una animación con un SKX que tomo prestada de Mark de Long Island Watch (para mí el mejor youtuber sobre relojes cuando toca explicaciones técnicas).
¿Qué hicieron en Vostok? Pues lo mismo, en una versión más barata y sencilla de construir. En los Vostok, la pieza que engrana está en la misma corona y el embrague somos nosotros, eliminando piezas, complicaciones y gastos. En esta foto podéis verlo claramente.
Por eso las coronas Vostok están flojas: necesitan que nosotros tiremos un poquito y mantengamos la tensión para que la tija embrague con la corona y podamos acceder al ajuste del movimiento. Una pequeña molestia para el humano, un coste menos para el Amphibia.
Aquí tenemos unas animaciones muy claras. La primera, con la tija no engranada, con esa apariencia de corona floja para quien no conoce el sistema:
Engrane de las piezas al tirar de la corona ligeramente.
Funcionamiento normal de la tija con la corona engranada.
(Fuente de los gifs).
Las coronas roscadas Vostok hacen lo que todas las demás y creo que es un mito algo que se dice a menudo para defender su diseño: que sean de esa manera como un sistema antichoque que evita que los golpes a la corona se transmitan a la tija. En todo caso, si es cierta la ventaja, todos los demás relojes con corona roscada la tienen también, ya que todas en la posición roscada quedan desconectadas de la tija.
El Vostok Amphibia es un reloj muy bien diseñado que reúne varias soluciones ingeniosas a los problemas que plantea un reloj de submarinismo. Es un ejemplo del ingenio ruso, parecido al de la famosa anécdota (falsa) sobre su simple lápiz frente al bolígrafo espacial presurizado americano. Bien podemos usarlo para ilustrar el dicho: “Un ingeniero es quien hace con un dólar lo que un tonto con dos”.
Frente a las soluciones por fuerza bruta que usan la mayoría de sus homólogos, no solo con la corona los ingenieros de Vostok adaptaron y buscaron salidas más sencillas y baratas a los problemas de la presión y la sumergibilidad. El cristal (en vez hacerlo muy grueso para poder contrarrestar la presión) aprovecha la deformabilidad del plexiglás para mejorar la estanqueidad: cuanta más presión, más se aplana y ajusta contra sus bordes, la propia presión lo sella más. Y lo mismo sucede con su tapa trasera que, en vez de cerrarse por rosca sobre una junta como un tapón, es sujeta por un anillo roscado independiente; así se obtienen dos ventajas: a) que a mayor presión más sellada resulta la tapa contra el sello de goma, más ancho que una junta común y b) que no se estropee este sello al abrir y cerrar el reloj, pues la tapa no gira sobre él desgastándolo, lo que evita tener que cambiarlo al manipularlo. Viene a ser una especie de sistema compressor ruso.
(Fuente).
Apreciemos la ingeniería del Vostok Amphibia, un fósil vintage en movimiento. Y tan asequible que permite que cualquiera pueda llevar un reloj de submarinista resistente a 200 metros. O esa es la cifra oficial, porque llevado al límite ha aguantado los 500 (el reloj empieza a fallar sobre los 70-75 bares y colapsa a los 82-83 bares).
(Fuente).
Esto va en realidad del diseño y desarrollo del reloj de submarinista, que es de nuestros temas favoritos. Como ya sabemos, una de las soluciones para lograr la estanqueidad fue la corona roscada. La corona roscada creaba un problema: no se podía usar una tija fijada a la corona, había que hacer una que se soltase de la corona en la posición roscada y cerrada.
¿Por qué? Piensa en las posiciones de la corona en un reloj: 1 neutra o dar cuerda; 2 ajustar fecha; 3 ajustar hora.
¿Cuál era el problema? Pues que con una corona roscada en la posición desenroscada ya estamos en la posición 1 y por tanto no podemos meter más la tija en el movimiento. Por eso, para poder roscar la corona, hubo que encontrar un sistema que evitase que la tija tuviera que moverse más hacia dentro. ¿Cómo se solucionó esto? Se hizo un mini embrague, un sistema de corona y tija más complicado, con más piezas y un muelle, que permiten que la tija pierda el contacto con la corona en la posición de cierre.
Con una corona roscada, cuando roscas la corona no estás metiendo la tija una posición más adentro, sino que esta permanece en la posición 1. Lo que sucede es que comprimes un muelle y la tija se desembraga y queda libre dentro de la corona. Con este sistema tenemos una nueva posición de la corona, la posición cero con la tija desembragada: 0 tija desembragada, 1 neutra o dar cuerda, 2 ajuste de fecha y 3 ajuste de hora.
Lo más fácil es verlo en una animación con un SKX que tomo prestada de Mark de Long Island Watch (para mí el mejor youtuber sobre relojes cuando toca explicaciones técnicas).
¿Qué hicieron en Vostok? Pues lo mismo, en una versión más barata y sencilla de construir. En los Vostok, la pieza que engrana está en la misma corona y el embrague somos nosotros, eliminando piezas, complicaciones y gastos. En esta foto podéis verlo claramente.
Por eso las coronas Vostok están flojas: necesitan que nosotros tiremos un poquito y mantengamos la tensión para que la tija embrague con la corona y podamos acceder al ajuste del movimiento. Una pequeña molestia para el humano, un coste menos para el Amphibia.
Aquí tenemos unas animaciones muy claras. La primera, con la tija no engranada, con esa apariencia de corona floja para quien no conoce el sistema:
Engrane de las piezas al tirar de la corona ligeramente.
Funcionamiento normal de la tija con la corona engranada.
(Fuente de los gifs).
Las coronas roscadas Vostok hacen lo que todas las demás y creo que es un mito algo que se dice a menudo para defender su diseño: que sean de esa manera como un sistema antichoque que evita que los golpes a la corona se transmitan a la tija. En todo caso, si es cierta la ventaja, todos los demás relojes con corona roscada la tienen también, ya que todas en la posición roscada quedan desconectadas de la tija.
El Vostok Amphibia es un reloj muy bien diseñado que reúne varias soluciones ingeniosas a los problemas que plantea un reloj de submarinismo. Es un ejemplo del ingenio ruso, parecido al de la famosa anécdota (falsa) sobre su simple lápiz frente al bolígrafo espacial presurizado americano. Bien podemos usarlo para ilustrar el dicho: “Un ingeniero es quien hace con un dólar lo que un tonto con dos”.
Frente a las soluciones por fuerza bruta que usan la mayoría de sus homólogos, no solo con la corona los ingenieros de Vostok adaptaron y buscaron salidas más sencillas y baratas a los problemas de la presión y la sumergibilidad. El cristal (en vez hacerlo muy grueso para poder contrarrestar la presión) aprovecha la deformabilidad del plexiglás para mejorar la estanqueidad: cuanta más presión, más se aplana y ajusta contra sus bordes, la propia presión lo sella más. Y lo mismo sucede con su tapa trasera que, en vez de cerrarse por rosca sobre una junta como un tapón, es sujeta por un anillo roscado independiente; así se obtienen dos ventajas: a) que a mayor presión más sellada resulta la tapa contra el sello de goma, más ancho que una junta común y b) que no se estropee este sello al abrir y cerrar el reloj, pues la tapa no gira sobre él desgastándolo, lo que evita tener que cambiarlo al manipularlo. Viene a ser una especie de sistema compressor ruso.
(Fuente).
Apreciemos la ingeniería del Vostok Amphibia, un fósil vintage en movimiento. Y tan asequible que permite que cualquiera pueda llevar un reloj de submarinista resistente a 200 metros. O esa es la cifra oficial, porque llevado al límite ha aguantado los 500 (el reloj empieza a fallar sobre los 70-75 bares y colapsa a los 82-83 bares).