Muy buenas a todo el mundo.
Estos son capullos de los gusanos de seda que pasaron por tu frigorífico con todo éxito vital ¿No?.
Por hablar un poco de la industria de la seda, he de decir que estos capullos no servirían para hacer tejidos, ya que al salir la mariposa rompe el hilo.
El capullo de seda está formado desde principio a fin por un único hilo. Así que tan pronto como los gusanos han construido el capullo, se recolectan y los cuecen en agua, lo cual mata al gusano y disuelve los adhesivos que van junto al hilo.
Después enganchan un extremo del hilo a una máquina, en los tiempos antiguos parecida a una rueca, que los deshilacha y bobina.
Tijereta común (Forficula auricularia). Su orden es el de los dermápteros.
Curioso nombre para describir sus alas, que viene de la fina piel que se nos desprende a los humanos cuando nos quemamos por el sol.
Son pocas especies, se conocen algo más de mil.
Mira que tengo tijeretas disponibles por mi entorno.
No las he sacado por no ser capaz de hacer una foto que me guste.
Y tus fotos, como siempre, son para esperar a que las pongas, me encantan.
Es un animal tan común e inofensivo que me extraña que no haya salido antes.
Tiene cierta fama de que se mete en los oídos para joderte el tímpano. De hecho los ingleses y los franceses lo llaman bicho de oído, earwig en un caso, y perce-oreille en el otro. Pero para que eso ocurra habría que dormir en graneros y pajares como en la edad media, de dónde provendrían esos nombres comunes. Y aún así es más fácil que se te meta una pequeña araña o polilla.
Comen pétalos, carroña, materia vegetal en descomposición y otros artrópodos, pero tienen que ser mucho más pequeños que ellas.
Son muy beneficiosas.
Por lo que veo son todas hembras. Las pinzas del final de su abdomen son cercos. En el caso de los machos esas pinzas tienen una mayor forma de gancho.
Se ve claramente que las usan ambos sexos como advertencia ante enemigos al alzarlas cuando se las molesta, pero no tienen ninguna capacidad de perforar la piel humana, ni de inocular ningún veneno.
La función primordial de los cercos en estas especies es ayudar a la copulación, y en muchos casos también al plegado de las alas bajo los
miniélitros, que llegan a tener más de cuarenta pliegues, como se ve en la siguiente imagen.
Ésto sí que es origami.