Pjmunaras
Forer@ Senior
Sin verificar
Lanzo una ligera reflexión que, al menos al que escribe estas líneas y por el momento, es la que le mueve en la elección de nuevas piezas.
Asumir los relojes más como un complemento para un outfit concreto que como un objeto plenamente independiente que deba ser llevado per se, y me explico someramente.
Bien es cierto que ya no es tanto así, pero históricamente; en nuestro país en concreto y en Europa en general; el único elemento de gusto netamente personal con la moda que se permitía un hombre era la elección de la corbata, como bien nos demostró en su día el peculiar Sr. Carrascal en sus informativos.
A esa pequeña concesión que nos permitíamos, se han ido añadiendo otros ítems; como los calcetines cada vez más curiosos y variopintos; y curiosamente se ha caído en gran parte el que originalmente dábamos por sentado, la ya citada corbata, cada vez más en desuso incluso entre los que gustan de vestir americana, como es mi caso y entiendo que el de muchos otros.
Y en esta más reciente concepción de la moda masculina, donde la combinación de colores está cada vez más pensada y medida y ya no se limita a la cada vez más extinta corbata ó a los meros calcetines, es cuando veo que la elección del reloj en función del outfit elegido cobra fuerza.
Mi caja ha pasado en poco tiempo de ser inexistente, a rebosar de relojes de diverso pelaje, a verse reducida a una curiosa mínima expresión y, ahora, a enfocarse en este punto de vista: la compra de relojes con una relación calidad-precio razonable como objetos que suman a un outfit previamente definido.
De esta forma, las dos adquisiciones del mes en curso han sido un Oris Big Crown Pointer Date Bronze 40mm. Limited con esfera en verde botella mate y un Longines Spirit 40mm. con armis con esfera azul ( con algo de "rayos de sol" ), y el motivo de su compra y de la elección de su diámetro fue más por ser pensados como complementos perfectos para dos-tres outfits ya predefinidos que como piezas en sí mismas per se, lo cual no quita que no sean buenas piezas dentro de un orden.
La próxima adquisición que tengo pensada está en la misma línea, con una esfera de un color que no tengo en la caja, de una reconocida marca que no tengo en la caja y con un tamaño contenido que hace que encaje con diversos outfits ya pre-establecidos en mi vestidor.
Obviamente, el reloj debe gustarme estéticamente, debe ser de una marca de cierta calidad y que no sea redundante en la caja ( intento no repetir marcas en la caja, manía sin sentido alguno pero así es ), debe tener un tamaño apropiado no sólo para mi muñeca de 18,50 cm. si no para el outfit para el cual está pensado, debe tener un servicio técnico de fácil acceso y es preferente para mi el probármelo en directo ( unas cuantas compras on line me han demostrado que no hay nada como vérselo puesto para desenamorarse ó para terminarse de enamorar de una pieza ), pidiendo que me lo traigan si esto es posible.
Y esta es mi reflexión, les dejo un par de malas fotos de los nuevos retoños.
Un saludo y disculpen la "chapa".
Asumir los relojes más como un complemento para un outfit concreto que como un objeto plenamente independiente que deba ser llevado per se, y me explico someramente.
Bien es cierto que ya no es tanto así, pero históricamente; en nuestro país en concreto y en Europa en general; el único elemento de gusto netamente personal con la moda que se permitía un hombre era la elección de la corbata, como bien nos demostró en su día el peculiar Sr. Carrascal en sus informativos.
A esa pequeña concesión que nos permitíamos, se han ido añadiendo otros ítems; como los calcetines cada vez más curiosos y variopintos; y curiosamente se ha caído en gran parte el que originalmente dábamos por sentado, la ya citada corbata, cada vez más en desuso incluso entre los que gustan de vestir americana, como es mi caso y entiendo que el de muchos otros.
Y en esta más reciente concepción de la moda masculina, donde la combinación de colores está cada vez más pensada y medida y ya no se limita a la cada vez más extinta corbata ó a los meros calcetines, es cuando veo que la elección del reloj en función del outfit elegido cobra fuerza.
Mi caja ha pasado en poco tiempo de ser inexistente, a rebosar de relojes de diverso pelaje, a verse reducida a una curiosa mínima expresión y, ahora, a enfocarse en este punto de vista: la compra de relojes con una relación calidad-precio razonable como objetos que suman a un outfit previamente definido.
De esta forma, las dos adquisiciones del mes en curso han sido un Oris Big Crown Pointer Date Bronze 40mm. Limited con esfera en verde botella mate y un Longines Spirit 40mm. con armis con esfera azul ( con algo de "rayos de sol" ), y el motivo de su compra y de la elección de su diámetro fue más por ser pensados como complementos perfectos para dos-tres outfits ya predefinidos que como piezas en sí mismas per se, lo cual no quita que no sean buenas piezas dentro de un orden.
La próxima adquisición que tengo pensada está en la misma línea, con una esfera de un color que no tengo en la caja, de una reconocida marca que no tengo en la caja y con un tamaño contenido que hace que encaje con diversos outfits ya pre-establecidos en mi vestidor.
Obviamente, el reloj debe gustarme estéticamente, debe ser de una marca de cierta calidad y que no sea redundante en la caja ( intento no repetir marcas en la caja, manía sin sentido alguno pero así es ), debe tener un tamaño apropiado no sólo para mi muñeca de 18,50 cm. si no para el outfit para el cual está pensado, debe tener un servicio técnico de fácil acceso y es preferente para mi el probármelo en directo ( unas cuantas compras on line me han demostrado que no hay nada como vérselo puesto para desenamorarse ó para terminarse de enamorar de una pieza ), pidiendo que me lo traigan si esto es posible.
Y esta es mi reflexión, les dejo un par de malas fotos de los nuevos retoños.
Un saludo y disculpen la "chapa".