Marca suiza desde su origen y muy valorada en los mercados de Asia, Oriente Medio y, ya metidos en Europa, sus mercados estrella son Suiza, Alemania, Suecia y Finlandia.
Podemos denominarla -utilizando términos más propios de la música o del cina- una marca "de culto", por lo que ya han comentado algunos compañeros: a quien le gusta, le entra por el ojo desde el primer momento y es forofo de la misma; y, a quien no le gusta, ya le puedes dar los argumentos que quieras, que no le entra y no le entra.
Su filosofía apuesta por dos aspectos esenciales para Rado: materiales perdurables (especialmente en lo que se refiere a irrayabilidad) y diseño atemporal, al margen de las tendencias de cada momento (por eso a muchos no les gustan) pero que, por el mismo motivo, no pasan de moda. Es lógico: si hago un reloj que no está diseñado conforme a la moda del momento, no puede pasar de moda.