Lucky
Habitual
Sin verificar
Muy buenas compañeros. Después de tener el placer hace tiempo en un par de hilos de comentaros mis primeras experiencias relojeras con mis hijos, quería actualizarlas, pero no me deja en los hilos originales, así que he decidido abrir uno nuevo, sabiendo lo que nos gusta a todos saber de estos detalles, aunque sean pequeños. Para no contar la historia de nuevo, os pongo los enlaces de los dos hilos:
Me gustaría tener un reloj...
El juego de los relojes...
El caso es que mis hijos ya llevan más de un año con sus piezas en la muñeca, que no se las quitan. Pero éste fin de semana pasado surgió espontáneamente una conversación relojera, esperando en la cola de un restaurante para comer.
Y no se por qué, el mayor de repente me dice: Papá, como me gusta llevar éste reloj, como te agradezco que me lo regalaras. Y el peque contesta: Y yo el mio. Es que no nos gustan nada los smartwatches, a ninguno de los dos (se ve que ya lo habían hablado entre ellos). Llevar éstos relojes es algo muy especial, es una pasada papá. Y el peque ratifica: Es que no me lo quito para nada.
Y yo les contesté que pocos jóvenes llevan relojes en su muñeca hoy en día, y que solo por el hecho de disfrutar llevándolos ya tenían que sentirse muy especiales, sobre todo porque lo habían hecho por su propia iniciativa. Chicos, sois una especie en extinción, disfrutarlo!
En fin, es una chorrada, pero sabiendo como son los adolescentes, que cambian de parecer constantemente, que me certifiquen de nuevo los dos que les fascina llevar sus relojes después de más de un año, me hace pensar que ya es para siempre. No os parece?
Y lo quería compartir con vosotros, compañeros. Dos jóvenes que se adhieren a nuestra causa, mis dos enanos, como mola!
Me gustaría tener un reloj...
El juego de los relojes...
El caso es que mis hijos ya llevan más de un año con sus piezas en la muñeca, que no se las quitan. Pero éste fin de semana pasado surgió espontáneamente una conversación relojera, esperando en la cola de un restaurante para comer.
Y no se por qué, el mayor de repente me dice: Papá, como me gusta llevar éste reloj, como te agradezco que me lo regalaras. Y el peque contesta: Y yo el mio. Es que no nos gustan nada los smartwatches, a ninguno de los dos (se ve que ya lo habían hablado entre ellos). Llevar éstos relojes es algo muy especial, es una pasada papá. Y el peque ratifica: Es que no me lo quito para nada.
Y yo les contesté que pocos jóvenes llevan relojes en su muñeca hoy en día, y que solo por el hecho de disfrutar llevándolos ya tenían que sentirse muy especiales, sobre todo porque lo habían hecho por su propia iniciativa. Chicos, sois una especie en extinción, disfrutarlo!
En fin, es una chorrada, pero sabiendo como son los adolescentes, que cambian de parecer constantemente, que me certifiquen de nuevo los dos que les fascina llevar sus relojes después de más de un año, me hace pensar que ya es para siempre. No os parece?
Y lo quería compartir con vosotros, compañeros. Dos jóvenes que se adhieren a nuestra causa, mis dos enanos, como mola!
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