Ignorando la ignorancia supina, la imprudencia y temeridad inherente, yendo ya a lo que diferencia un vintage, cuyo término me desagrada enormemente, pero que no hemos conseguido acuñar uno adecuado en nuestra lengua, que ciertamente no es, por cierto, "mierda".
Intentaremos compartir y aportar.
Creo que la esencia del vintage, es aquello que vale la pena conservar, frente a lo viejo, que puede no tener interés alguno. Por norma general, y en mundo relojero no es excepción, se requiere: años, calidad y una cierta exclusividad. Entendida esta en sentido amplio, que incluye logro, aportación al avance relojero.
Dentro de los ignorantes están los que identifican un reloj vintage con algo accesible por su precio, sin mirar más allá. No obstante no pocos ejemplares vintage resultan tan caros o más que un reloj nuevo y tienen la ventaja de que su precio está ya estabilizado. Y si son, verdaderamente, vintage va a más y no a menos como un simple reloj usado.
NO se trata de un reloj de segunda mano, si no de un ejemplar que el paso de los años ha "consagrado" como de valor, un pedazo de la historia relojera. Pongo por ejemplo un caso tan simple como un IWC Mark XI Cal. 89 (primeras unidades año 1947). Un ejemplar de calibre manual sin datario con caja de pequeño tamaño para la moda de hoy (36 mm de acero), en óptimas condiciones puede alcanzar los 7.000,00.-€, pudiéndose encontrar a 4.000,00.-€. Su reproducción más reciente de segunda mano, el IWC mark XVI en óptimas condiciones, no alcanza los 2.000 euros, pudiéndose encontrar a 1.500,00.-€.
Pongo de ejemplo el XVI, dejando el XVII por imaginar que habrá pocos ejemplares usados a la venta, ciertamente de estética más flieger que Piloto. Pero si vamos al XV, más fidedigno al original (a pesar del datario), podemos bajar mínimamente el precio. Y no entro ya a cotejar el calibre del original y de dichas reproducciones.
Obviamente, que hay mucha baratija que la gente confunde con vintage, reloj viejo, esencialmente setentero, que poco o nulo interés tiene y que, aún cuando le llamemos vintage, no lo será en puridad. Y que dentro de los vintage como dentro de los USADOS, hay diferentes gamas y precios.
Por cierto, que clásico, se aplica a aquello que es considerado como modelo digno de imitación o reproducción. Fue utilizado en origen en referencia a la antigüedad clásica (grecorromana). Pero es utilizado actualmente para hablar de situaciones que siguen los parámetros de la tradición y reproducen un modelo original, genuino.
En el ejemplo puesto: Clásico el Mark XI, reproducción de un modelo clásico, estética clásica: el Mark XVI.
Que conste, que encuentro un reloj hermosísimo el Mark XVI (y toda la familia), no quisiera ofender a nadie, simplemente lo he puesto de ejemplo. Y que esta es mi personal opinión que puede no ser la acertada. Disculpas pues, si alguien puede sentirse molesto.
No sé si el jefe de D. Dani, el que no distingue un Hublot auténtico de uno falso. Su maestro, el que mira simplemente el cierre y no sabe del brillo de una falsificación de un original, estará o no de acuerdo, pero este es mi parecer. Con la que yo, mi jefe, asiento.
Saludos cordiales y un fuerte abrazo.