Lo que uno tiene que encontrar es la manera de hacer las cosas y de vivir que le haga feliz.
(Y es aplicable a todo, incluso con las cosas que no queremos hacer).
Lo que hay que asumir es que, en cualquier ámbito de la vida, vas a encontrar escalones que no vas a poder subir. Es natural. No somos lo mejor ni lo más en todo… (con toda seguridad en nada, hablando se mí).
Siempre va a haber “algo más”, de lo que ya tienes, personal o material… y que exista y no se pueda acceder no puede/debe generar frustración.
Existe el síndrome del “mono loco”, que va saltando de rama en rama buscando la mejor para quedarse en ella y ser feliz, y no se da cuenta de que todas las ramas son parecidas y que podría haberse quedado en la primera.
Por eso, no debemos supeditaron condicionar nuestra felicidad a la consecución de algo.
Porque siempre habrá algo más por conseguir (cuando tenga trabajo estable seré feliz, cuando, tenga pareja, cuando tenga el Rolex..)
Porque habrá cosas que no consigamos…
Y porque, hablando de relojes, cuando tengas tu grial, si lo consigues, pasarán unos días-semanas-meses… y luego dirás. “Vale muy bien, ¿y ahora qué?” . Eso último tenlo seguro.
Si disfrutas con tus “varios” relojes, pues sigue. Si quieres probar y tener menos pero mejores, prueba…
Las tiendas, los negocios…, muchas veces hacen su -legítimo- dinero ofreciendo cosas que no necesitamos, para satisfacer necesidades que no tenemos…. Y en el -triste- caso de algunos, lo hacen pagando con dinero que tampoco tienen y para impresionar a gente a la que se la suda…
Perdón por el tocho.
RESUMEN?
Sé feliz tú. Siempre habrá un reloj mejor y ningún reloj te hará feliz.
Y te compres lo que te compres llegará un día en el que dirás… “bueno, y?”