A todo esto, y sabiendo que no viene mucho a cuento, releyéndome otra vez el hilo y los últimos mensajes, no he podido evitar tener una extraña sensación... el recuerdo de una mujer que se me deshizo en agradecimientos el otro día porque le habíamos regalado un calefactor de 35 euros. Su casa no tiene calefacción...
Me perdonen el corte de rollo algo demagógico, pero siendo las fechas que son -y aunque yo lo máximo que me he gastado hasta ahora en un sólo reloj son 950 euros- he sentido la necesidad de poner por un momento los pies en el suelo.
Dicho esto, creo que la cosa se está enquistando. Yo sí veo algo de publicidad engañosa, pero la habitual, la misma con la que te venden máquinas de abdominales en la teletienda. Cada vez tiendo más a pensar que alguien que se puede gastar 70.000 euros en un reloj debería ir más sobre seguro o si es una apuesta de riesgo, aceptar elegantemente las consecuencias. O sea, mitad de culpa para cada uno y cerremos el debate este que os ha entretenido el día de Reyes.
Y sobre todo deseemos que Juan Sinmiedo no tenga una urgencia en Ibiza que requiera cirugía digestiva...
Y finalmente, sobre la compra, como decía James Bond, el Bond del Pulsar PS1, "en el riesgo está el placer"
