Un buen momento para que inviertan en bolsa... ¡Nuestros hijos!
21/09/2011 | 08:05
Uno, que es padre de dos criaturas de cuatro y un año, de vez en cuando le da vueltas al
futuro de sus hijos. Y, dentro de ese futuro, también al "financiero".
Entre lo que ahorramos específicamente para ellos y algún aguinaldo navideño que otra, acabas reuniendo un dinero al que buscas el mejor acomodo, de manera que
les sea útil para cuando sean adultos... Vamos, siempre que no haya necesidades perentorias antes para la familia que te lleven a usarlo como último recurso, como le suele suceder a Homer Simpson. Es decir,
en un plazo mínimo de 20 años.
Tradicionalmente, por los casos que conozco a mi alrededor, muchos padres y madres se decantan en estos casos por los
activos más conservadores: la libreta de ahorro o la cuenta corriente para niños. Y en algunos casos, el criterio por elegir es "
y, si es posible, les den algún interés". Las propias entidades financieras han creado históricamente productos de este tipo, que
si bien pueden fomentar el ahorro, no constituyen, en modo alguno, la mejor inversión.
Esto contiene, desde mi humilde punto de vista, al menos tres
errores, que cito de mayor a menor:
1)
Pensar que los bancos hacen regalos. Sólo hay que tener un poco de conciencia crítica para darse de cuenta de que no nos las regalan, nos
las venden. Sólo que "los pagamos" ingresando menos intereses, por ejemplo.
2)
Elegir un producto a largo plazo en base a un incentivo a corto, lo mismo que ocurre con las pensiones.
3) Y más discutible.
Proyectar la "seguridad" con la que nosotros miramos a nuestros hijos a "su" dinero.
Me detengo especialmente en este último. No pueden ser iguales nuestros
objetivos de inversión a 20 años cuando ya tenemos una "edad cierta", como decía Gomaespuma, y somos padres, que cuando somos un bebé.
Para nosotros, puede ser empezar a
pensar en la jubilación, a cómo mantener nuestro nivel de vida al retirarnos, mientras podemos seguir alimentando a los
peques por el camino. Necesitamos cierta seguridad, según vamos avanzando en edad, precisamos
"asegurar" una parte creciente de nuestros ahorros.
¿Pero con 1 año y sin necesidad de tocarlo hasta los 20? Cuanto más conservador, más oportunidades pierdes. Uno entiende que a unos padres ahora mismo le pueda dar miedo destinar el ahorro de sus hijos pequeños a la bolsa. Con la que está cayendo... A ver si se va a quedar sin nada. Pero la historia, incluso la historia más cruel, apunta en dirección contraria.
Pensemos por un momento que esta crisis es tan grave como la iniciada tras el crash del 29 y hagámoslo de la mano de
. Pensemos que estamos en 1932, que
la aparente recuperación económica se ha esfumado, que estamos al principio de una gran depresión económica... Que el futuro sólo parece negro. Imaginemos con nuestra máquina del tiempo que
la bolsa ha vuelto a desplomarse tras un par de años de recuperación. ¿Miedo, no?
Pues bien, los americanos que lo pusieron entonces en el Dow Jones, el dinero de sus hijos, 20 años después lo habían tripliciado, más o menos, dependiendo del nivel de entrada... incluso con la Segunda Guerra Mundial por el camino.
Vale, Vicente, pero imaginemos que te equivocas y entras demasiado pronto. A la mitad del desplome entre los años 1929 y 1933, por ejemplo. Pues bien, en ese caso la inversión incluso arrojó un saldo positivo. Según el estudio de Jeremi Siegel,
, en ninguno,
tras ajustar incluso por inflación, la inversión en bolsa en EEUU perdió dinero en plazos de 20 años a lo largo de su historia, aunque sí a 5 y 10 años.
Los más
pesimistas, sin embargo, también tienen un "caso histórico" al que agarrarse: que esta crisis sea
más parecida a la japonesa que incluso a la peor de occidente, que estemos ante una
espiral deflacionista, en la que los mercados se mantengan deprimidos y 20 años después sigan marcando nuevos mínimos.
Sólo en ese caso, la cuenta corriente o el dinero bajo el colchón sería la mejor opción. ¿Pero si la cartera la hacemos diversificada geográficamente? Parece imposible que las economías de todas las bolsas mundiales
vivan un periodo deflacionista a la vez, ¿no? Y tenemos a casi todas las bolsas mundiales, incluidas las emergentes, muy lejos de máximos. En el caso de China, todavía con un desplome superior al 50% desde su punto más alto en 2007.
Además, casi en
cualquier escenario distinto a una deflación habrá sucedido lo contrario: el dinero que estés ahorrando para tus hijos, con mínimos intereses,
se lo comerá en buena parte la inflación... Por no pensar en una posible hiperinflación tras el oceano de dinero gratis que han creado los bancos centrales para intentar resucitar la economía.
¿Y si aún así resulta que
entras en máximos del año, como podría haber ocurrido entrando a principios de mayo de este año? También hay fórmulas para tener un
precio de entrada más ponderado, como el reparto de la misma cantidad en distintos momentos. Lo que los estadounidenses llaman
dollar cost averaging. Es decir, en vez de 12.000 euros en un momento dado, 1.000 euros cada mes.
Esto reduce la volatilidad y el miedo a entrar... aunque lógicamente también la rentabilidad en el caso de que hubieras conseguido entrar con los 12.000 en el punto más bajo. Avanzando en la escala de sofisticación, hay fórmulas para
rebalancear la cartera automáticamente a lo largo del tiempo en función de objetivos prefijados o de valoraciones de mercado. Pero esto queda para otro día.
En cualquier caso, lo importante aquí es saber que, cuando estás eligiendo un camino u otro,
estás tomando una decisión y apostando por un futuro financiero o por otro. Yo, como no podía ser de otra manera después de este post, el dinero de mis hijos
sí lo estoy llevando a la bolsa. Ya me lo agradecerán... Por lo menos, más de lo que me agradecen ahora la toalla para el bebé que te "regalan" por abrirle una cuenta en el banco.
fuente ... expansion.com