Respeto a los que les gusten más los mecánicos y a los "cuarcistas" acérrimos, porque a mí me gustan todos y comprendo el gusto por ambos tipos. Pero por supuesto que todos son relojes, tanto mecánicos como de cuarzo, y como tales fueron concebidos, diseñados y fabricados para dar la hora como función fundamental y razón de ser, a parte de otras indicaciones en general relacionadas con el paso del tiempo. Otra cosa es un smartwatch, que sin despreciarlos tampoco, no los veo como relojes, creo que son otro tipo de aparato.
Lo de despreciar los relojes por ser de cuarzo, lo de la "vida" con el "tic tac" y "el alma" y todo eso, lo de que un reloj de cuarzo no es un reloj porque no tiene ese "alma"...todo eso me parece muy simplista y desfasado.
El tic tac no se oye siquiera en la mayoría de los relojes automáticos que solemos usar, a no ser que te los metas en la oreja estando en silencio. El de los vintage mecánicos de cuerda manual, tipo AS-1130, sí se oye más, o el de los Hmt, pero en muchísimos automáticos no oye el tic tac ni un buho. Que al mecánico se le mueven piezas (tiene "vida"...) y al cuarzo no...tampoco es cierto, muchos cuarzos tienen tantas piezas dentro que si le enseño despieces de cuarzos a muchos detractores de los mismos, se asombrarían de la de ruedas, muelles, palancas y rubís (sí, rubís) que puede llevar según qué cuarzo; y si se mira de cerca, incluso con un macro, el bailecillo de cristal líquido que se produce en un digital al avanzar los segundos...qué bonito, vaya que si hay "vida" en esas pantallas. El sonido...bueno, hay cuarzos en los que el avance de cada segundo se oye a distancia (con mi Swatch Blustery crono me molesta a veces el sonido del segundero en la mesilla por la noche), pero lo mejor son los "bips" horarios. Esos avisos que nuestros queridos cuarzos digitales nos dan gentilmente cada hora, tan serviciales ellos, encima tienen distinta voz según el reloj. Casi siempre tengo algunos cuarzos digitales en distintas habitaciones, mientras estoy en el estudio, el salón o la cocina, y al oir desde lejos los avisos horarios, reconozco a muchos de ellos por el sonido. Es muy distinto el sonido de un Casio Marlin de los 80, del de un Protrek PRT-10 o del de un F-91 (muy chillón)...Es muy gracioso saber que el del pitido ha sido por ejemplo el Marlin H-101 de 1980, que además te da otro aviso distinto en las medias horas, y tiene una voz diferente, con una suavidad metálica, elegante, cálida, preciosa, y fuerte para sus años. Me encanta esa sensación de conocerlos por su voz...¿que no tienen vida los bichillos? Y ya para colmo están los relojes de cuarzo como el G-Shock GW-M5610 o cualquier otro solar y "radioaficionado", como me gusta llamarle: cada viernes por la noche le llevo al dormitorio donde mejor coge la radiofrecuencia, para que pueda jugar a su juego favorito de radioaficionado...de vez en cuando le saco a la ventana para que tome el sol, que le sienta muy bien...Además, cuando se queda un rato con poca luz y tranquilo, se amodorra y se acaba durmiendo, hasta que algo le despierta...¿QUE NO TIENEN "VIDA"? A ver si van a tener más vida que ningún otro reloj...En los mecánicos es bonito ver moverse el volante (cuando se ve), se puede hacer una analogía con un corazón, con los latidos, y es bonito que los automáticos se empiecen a mover ellos solos al ponértelos; también me gusta mucho dar cuerda a mis relojes manuales. Pero los cuarzos vaya si tienen sus atractivos, y si unos tienen "vida", los otros también a su manera. Que si se acaba la pila se paran...También se paran los mecánicos, y no me refiero solo a cuando se quedan sin cuerda, sino que a veces se paran y como no los lleves a un relojero a revisar, no vuelves a verlos andar.
A parte, yo que soy un gran amante de la relojería mecánica (una de mis marcas favoritas es Orient y tengo varios, marca muy especializada en relojes mecánicos de toda la vida), adoro los Blancpain, Breguet, Vacheron Constantin y demás, pero muchos de los relojes que tengo, algunos entre mis favoritos, los he buscado precisamente por su calibre...de cuarzo. Sí, entre los relojistas y entendidos de todo el mundo, además de amantes de los mecánicos, también hay muchos amantes de calibres de cuarzo concretos...El que busca un Seiko 7A28 o un Citizen 3510, busca ese reloj por su calibre, y ese calibre es el responsable de que ese reloj sea un clásico y sea buscado por muchos relojistas. De hecho, si a mis Citizen 3510 (Miyota 3S10) me dicen que les quitan el calibre y les meten dentro uno mecánico, dejan de ser el 3S10 y ya no me interesan...Lo digo porque, muchas veces, al enseñar un reloj de esos, un Seiko 7A38 por ejemplo, sale a vces uno de los tópicos, "es bonito, qué pena que sea un cuarzo". No hombre, si el reloj es un clásico apreciado precisamente por su calibre. El Citizen Calibre 2100, un Casio módulo 248, son buscados por tener una máquina dentro especialmente atractiva, prestigiosa, interesante...y en esos modelos, cualquier cosa que llevasen dentro que fuese distinta, los estropearía. Así que sí, los cuarzos también pueden tener vida, ser prestigiosos, ser interesantes, ser buscados, ser clásicos. Que ya llevan mucho en el mercado y a lo largo de las décadas han ido surgiendo cuarzos maravillosos...Otra cosa es que no te interesen y no los conozcas...Aún hay muuucha gente, incluso en los foros, donde se supone que entendemos de relojes, que le hablas de cuarzos con rubís o con ajuste de la marcha y se quedan traspuestos...creen que un reloj de cuarzo es "un micro chip con dos ruedas de plástico y un cable"...Madre mía.
¿La firma con la frase del relojero sevillano?, pues no me molesta ni aunque esté remarcada en negrita. Solo es una opinión que ya se ve que no comparto, y que veo bastante simplista, radical y desfasada, pero al fin y al cabo una opinión, y además es la frase del relojero como dices, no tuya, y es verdad que puede resultar hasta graciosa. Sí creo con todo el respeto que a mí me gustan los relojes más que a ese relojero aunque no me gane la vida con ellos, lo que no es tan raro, en todas las profesiones puede pasar. También es posible que el hombre no hablase del todo en serio, que estuviese exagerando...