Recapitulando un poco, entre todos hemos aportado muchísima información sobre el concepto "swiss made", de la histórica relación Suiza-Hong Kong, de la externalización de la producción suiza en Asia, así como la cara más oscura de esta producción en Asia. Han salido marcas, grupos relojeros, unos transparentes, otros no.
Ahora me gustaría, si fuese posible, que el que lo desee expresase sus conclusiones, a modo de final y que estas fuesen respetadas y no rebatidas en este hilo; pues se trata de poner un punto y final (si nadie no va a aportar más información relevante sobre este tema) sólo con las opiniones y lo que hemos sacado en claro.
Si os parece bien, empiezo yo mismo:
A partir de ahora voy a ver con otros ojos un reloj "swiss made";Sea de la gama que sea y del precio que sea, no por su calidad que espero siga siendo tan exquisita como hasta ahora, sino por su engañosa procedencia de fabricación. La laxitud de la legislación suiza, creo que a la larga va a ir en contra de la propia industria suiza, como está sucediendo con la aparición de fakes que ningún profano y pocos aficionados puede ya diferenciar del original y que se distribuyen por internet, donde la garantía la ofrece el vendedor y no el fabricante. Otro problema que puede tener la industria suiza y que puede dilatar más si cabe esta situación real, es la adquisición y/o las grandes aportaciones de capital chino en marcas o grupos relojeros y ya no hablamos del "low cost" sino del segmento de lujo. También es importante para mi conocer que hay marcas suizas que aparentemente son muy transparentes y como ya mencioné en otro post, Rolex es una de las que se lleva la palma, ojalá sigan con su buen hacer. También me ha quedado bien claro que "made in China" ha dejado de ser sinónimo de baja calidad y que pueden fabricar bien y mucho. Sinónimo de ello es la aparición multitud de micromarcas europeas que tanto apreciamos aquí en este foro. Agradezco a Lisema y a super8 el enseñarnos el "lado oscuro" de nuestros "objetos de deseo" creo que es una importante perspectiva que nunca debemos olvidar y que desgraciadamente está bien presente en nuestra afición que tanto nos apasiona.
Ahora os toca a vosotros

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