Jai
Milpostista
Sin verificar
Mi querido Luis, aqui te cuento la historia que me pedias en el post de presentacion. A toro pasado,y por escrito perdera parte de su gracia, pero mas o menos fue asi:
Este reloj me cautivo desde la primera vez que lo tuve en mis manos, hace ya algun tiempo en Wempe, si mal no recuerdo. Pero no me decidi a adquirirlo nunca, a pesar de las veces que me he quedado embobado viendolo en algun escaparate en algunas de las provincias de esta nuestra querida tierra. Aqui una foto junto al Glycine de Efra.
La semana pasada, Efra, Ethan y yo quedamos a comer. Durante la comida se hablo principalmente de relojes, como no podia ser de otra manera. Y mira tu por donde, estuve dando la lata toda la comida con el dichoso reloj.
Total, que a eso de las cuatro y media, nos decidimos a llamar a Pedro Izquierdo para ir a verle un rato. Dicho y hecho, a las cinco y media estabamos alli, como un reloj.
Tras un ratito hablando, Pedro me dice: "Te voy a sacar un reloj". "Cual?", pregunte yo. Un Rolex. Al principio me quede frio, seria un Sub o un Date, pense.
Pero cuando abri la caja, me quede en shock. No me lo podia creer. "Pero Pedro, como me haces esto?"; "no me jodas"; y demas improperios...
El reloj estaba nuevo, con los plasticos, a estrenar. Pedro lo habia comprado, pero nunca se lo habia puesto. Y en ese momento, me dijo: "Te lo vendo". Bueno, me temblaban las piernas. No podia hacerlo, pero Pedro me convencio. No pude negarme. Y me lo lleve.
Las sensaciones eran de alegria, de remordimiento.....Bueno, supongo que todos las conoceis. Me duraron dos dias.
Total, que cuando ya nos ibamos Efra me dijo: "Sabes una cosa?: Que no vas a ser el unico que se vaya con remordimientos hoy a casa". Y se llevo su Glycine. Pero esta historia prefiero que la cuente el.
Cuando nos ibamos en el coche, tanto Ethan como Efra me espetaban: "Joder, macho, que envidia. Todo el hablando de lo que te gusta ese reloj, y de repente, por designios del destino, sin poder siquiera imaginarlo, lo tienes ahora en tu muñeca". Y asi fue. Cosas del destino.
Asi que ya sabeis: Si teneis un reloj soñado, id a ver a Pedro. Nunca se sabe, quizas salgais de alli con el.
Ahora solo puedo decir: "Gracias Pedro".
Y algo muy especial fue compartir esos momentos con Efra y Ethan, dos personas muy especiales para mi tambien.
Un fuerte abrazo.
Este reloj me cautivo desde la primera vez que lo tuve en mis manos, hace ya algun tiempo en Wempe, si mal no recuerdo. Pero no me decidi a adquirirlo nunca, a pesar de las veces que me he quedado embobado viendolo en algun escaparate en algunas de las provincias de esta nuestra querida tierra. Aqui una foto junto al Glycine de Efra.
La semana pasada, Efra, Ethan y yo quedamos a comer. Durante la comida se hablo principalmente de relojes, como no podia ser de otra manera. Y mira tu por donde, estuve dando la lata toda la comida con el dichoso reloj.
Total, que a eso de las cuatro y media, nos decidimos a llamar a Pedro Izquierdo para ir a verle un rato. Dicho y hecho, a las cinco y media estabamos alli, como un reloj.
Tras un ratito hablando, Pedro me dice: "Te voy a sacar un reloj". "Cual?", pregunte yo. Un Rolex. Al principio me quede frio, seria un Sub o un Date, pense.
Pero cuando abri la caja, me quede en shock. No me lo podia creer. "Pero Pedro, como me haces esto?"; "no me jodas"; y demas improperios...
El reloj estaba nuevo, con los plasticos, a estrenar. Pedro lo habia comprado, pero nunca se lo habia puesto. Y en ese momento, me dijo: "Te lo vendo". Bueno, me temblaban las piernas. No podia hacerlo, pero Pedro me convencio. No pude negarme. Y me lo lleve.
Las sensaciones eran de alegria, de remordimiento.....Bueno, supongo que todos las conoceis. Me duraron dos dias.
Total, que cuando ya nos ibamos Efra me dijo: "Sabes una cosa?: Que no vas a ser el unico que se vaya con remordimientos hoy a casa". Y se llevo su Glycine. Pero esta historia prefiero que la cuente el.
Cuando nos ibamos en el coche, tanto Ethan como Efra me espetaban: "Joder, macho, que envidia. Todo el hablando de lo que te gusta ese reloj, y de repente, por designios del destino, sin poder siquiera imaginarlo, lo tienes ahora en tu muñeca". Y asi fue. Cosas del destino.
Asi que ya sabeis: Si teneis un reloj soñado, id a ver a Pedro. Nunca se sabe, quizas salgais de alli con el.
Ahora solo puedo decir: "Gracias Pedro".
Y algo muy especial fue compartir esos momentos con Efra y Ethan, dos personas muy especiales para mi tambien.
Un fuerte abrazo.