Buen hombre, el tener un peazo reloj, y entenderlo, supone precisamente, que quieres más, y entenderlos, y cambiarlos según el día, y según tu estado de ánimo, y según la coyuntura, y según el entorno, etc.
En este momento, para mi boda llevaría un Seiko Premier Automatic, un Tissot LeLocle o algo similar. Es lo que opino hoy.
Pero para diario, un Chrono, como un Seiko Sportura, Tissot PRS516, un Longines Conquest, Breitling, etc.
Jamás llevaría un Rolex por el hecho de serlo. Me rebelo contra una de las mejores marcas del mundo. Sin embargo si me encantaría el IWC Portuguese, en oro blanco o acero, con agujas e índices azules. Y respecto a Patek, Breguet, Jaeger LeCoultre, etc., no los tengo porque para ello mi renta debería permitirme comprar al menos 10 de ellos al mes. Cuando eso ocurra, quizás me compre uno. De momento estoy por un Jaeger LeCoultre Master Compressor.
Pero "el definitivo", JAMÁS. Recuerda lo siguiente: si me dices que si me fuera a una isla desierta y sólo me pudiera llevar un reloj, probablemente te diría un Longines Hydroconquest, o un Omega Seamaster, pero coño, has dicho una isla.
Si dijeras "algo" de ir a Marte o más lejos, ni me lo pienso: un Seiko Sportura Chronograph Perpetual Kinetik, lógicamente para que siga funcionando cuando me despierte al llegar.
Y si me preguntas un reloj para la guerra o para deportes de riesgo, un G-Shock. Si lo de la guerra es nuclear, un automático, para evitar que acabe frito por el efecto ionizante de las explosiones nucleares.
CONCLUSIÓN: no se puede tener un solo reloj: uno no sabe nunca cuándo va a casarse, naufragar, ir a Marte, a la guerra, al Everest, o va a ver de cerca una explosión nuclear. Necesitas un maletín de relojes, por si acaso.