W
waltham
Forer@ Senior
Sin verificar
Muy buenos días querid@s amig@s, quería hacer este hilo desde hace un tiempo para presentar al consentido de la colección, se trata de mi Omega Seamaster chronometre officially certified de 1950, este reloj se a ganado un lugar especial en mi corazón y no por el hecho de ser un Seamaster con certificado de cronómetro, si no porque "el esperó por mi", y ya les voy a decir porque digo que esperó por mi. Les narro la historia rápidamente: el reloj lo adquirí en uno de los lugares mas recónditos de Caracas, un lugar con lo que menos esperabas era encontrar un omega. Cuando lo vi por primera vez lo sostuve en mis manos y no sabia lo que había encontrado, ya que era muy joven he inexperto en el tema, lo único que sabia es que era Omega y omega es buena marca me dije, me dirijo hacia el vendedor y le pregunto que precio tiene el reloj, el vendedor lo ve y me dice rápidamente, "ese no esta en venta" con una voz gruñona y de mal humor, yo rápidamente lo devolví a su sitio que era una vitrina llena de polvo y porquería, y cuando digo porquería es literalmente porquería, en fin me voy de la tienda y pasa un buen tiempo para volver a ir. Aproximadamente 2 años después vuelvo a la tienda y no me lo van a creer pero el reloj estaba en el mismo lugar en donde lo había dejado, en aquella vitrina llena de polvo y porquería, rápidamente lo saco y esta vez mas ilustrado en el tema leo la esfera y me digo, esto me lo tengo que llevar si o si, vuelvo a preguntarle al vendedor cuanto vale el reloj y esta vez rápidamente me dice un precio, por cierto irrisorio, en eso mi corazón se frena por un instante y cuando me di cuenta el reloj era mio. El me espero en esa vitrina como un viejo amigo espera a otro, y ahora es el consentido con un lugar de honor en la colección y en mi corazón. Pero como no todo puede ser perfecto en la vida el reloj tiene un detalle, el espiral del volante tiene un pequeño defecto que hace que el reloj vaya muy rápido, no me extrañaría que a lo largo de su vida algún chapuzo lo tocara y bueno...
Es el consentido al cual no puedo consentir, ya que en el país no hay quien lo pueda arreglar, todos los maestros relojeros han fallecido y no se tiene una generación de relevo, así que ahí está el, paciente hasta que pueda volver a lucir en una muñeca. Mientras tanto lo saco de su estuche y se codea con sus compañeros, por cierto el estuche fue proporcionado por el queridísimo amigo Aristides al cual le agradeceré de por vida por ese magnifico regalo que le va como anillo al dedo.
Sin mas que añadir les presento al consentido
Es el consentido al cual no puedo consentir, ya que en el país no hay quien lo pueda arreglar, todos los maestros relojeros han fallecido y no se tiene una generación de relevo, así que ahí está el, paciente hasta que pueda volver a lucir en una muñeca. Mientras tanto lo saco de su estuche y se codea con sus compañeros, por cierto el estuche fue proporcionado por el queridísimo amigo Aristides al cual le agradeceré de por vida por ese magnifico regalo que le va como anillo al dedo.
Sin mas que añadir les presento al consentido
Un escaso y fantástico calibre, la rotunda caja de mis favoritas, una bellísima y magníficamente conservada esfera bitono ¡¡y además complementos intangibles!! Esa historia de espera de dos años es increiblemente encantadora y el exquisito complemento de su estuche de mano de un querido amigo el remate que lo redondea extraordinariamente 
