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Hola a todos. Ante todo, quiero disculparme si algún forero (relojero) se siente ofendido por mis comentarios, pero creo sinceramente que es muy justo mi malestar y supongo que mi opinión será compartida por muchos otros foreros (coleccionistas).
Tampoco quiero que penséis que entro en este foro por primera vez y "a saco", me pongo a cuestionar la profesionalidad de algún forero que pueda sentirse aludido. Soy miembro de este foro desde hace muchos años, y aunque solo intervengo de forma ocasional, sigo con mucho interés aquellos hilos que me interesan. No me siento cómodo en el anonimato, pero es la única forma de que no se me discrimine por este comentario, son muchos años de prestigio en este foro, que no me gustaría perder.
Bueno, inicio el debate. Colecciono relojes vintage, sobre todo despertadores, algunos de ellos, con un valor muy alto. Supongo que para la mayoría de los foreros es conocido el hecho al que me refiero en el título. En ocasiones me he llegado a encontrar hasta cuatro referencias diferentes, todas ellas grabadas a punzón y sin el menor respeto a la estética. La gran mayoría en zonas donde es fácil detectarlas sin desmontar nada del reloj.
Me recuerda a lo que hacen los perros en cada árbol, o los niñatos con los sprays de pintura en cada esquina. No quiero pensar que esta práctica profesional tenga un objetivo similar, el de marcar el territorio de cara a otros congéneres. Tampoco entiendo como el dueño del reloj de la época, consentía tal atrocidad, ¿Acaso el relojero actuaba como una especie de “brujo de la tribu” al que todo se le consiente y nada se le cuestiona?
Cómo se sentiría hace 60 años el dueño de un despertador Jaeger o Angelus, si cada vez que había de darle cuerda a su despertador (aunque fuera cada 8 días) se encontraba con dichas marcas entre las llaves y botones. Supongo que se sentía como mi vecino, cada vez que abre la puerta de su garaje y se encuentra el garabato de pintura del niñato. Con la diferencia que mi vecino no conoce al niñato y el dueño del reloj, no solo conoce al relojero, sino que además le pagó por ello.
Qué pensarías si un dentista, después de haceros un implante, os tatuara un numerajo de esos en la mejilla.
Saludos.
Tampoco quiero que penséis que entro en este foro por primera vez y "a saco", me pongo a cuestionar la profesionalidad de algún forero que pueda sentirse aludido. Soy miembro de este foro desde hace muchos años, y aunque solo intervengo de forma ocasional, sigo con mucho interés aquellos hilos que me interesan. No me siento cómodo en el anonimato, pero es la única forma de que no se me discrimine por este comentario, son muchos años de prestigio en este foro, que no me gustaría perder.
Bueno, inicio el debate. Colecciono relojes vintage, sobre todo despertadores, algunos de ellos, con un valor muy alto. Supongo que para la mayoría de los foreros es conocido el hecho al que me refiero en el título. En ocasiones me he llegado a encontrar hasta cuatro referencias diferentes, todas ellas grabadas a punzón y sin el menor respeto a la estética. La gran mayoría en zonas donde es fácil detectarlas sin desmontar nada del reloj.
Me recuerda a lo que hacen los perros en cada árbol, o los niñatos con los sprays de pintura en cada esquina. No quiero pensar que esta práctica profesional tenga un objetivo similar, el de marcar el territorio de cara a otros congéneres. Tampoco entiendo como el dueño del reloj de la época, consentía tal atrocidad, ¿Acaso el relojero actuaba como una especie de “brujo de la tribu” al que todo se le consiente y nada se le cuestiona?
Cómo se sentiría hace 60 años el dueño de un despertador Jaeger o Angelus, si cada vez que había de darle cuerda a su despertador (aunque fuera cada 8 días) se encontraba con dichas marcas entre las llaves y botones. Supongo que se sentía como mi vecino, cada vez que abre la puerta de su garaje y se encuentra el garabato de pintura del niñato. Con la diferencia que mi vecino no conoce al niñato y el dueño del reloj, no solo conoce al relojero, sino que además le pagó por ello.
Qué pensarías si un dentista, después de haceros un implante, os tatuara un numerajo de esos en la mejilla.
Saludos.