
miquel99
De la casa
Sin verificar
Tengo que reconocer, que esta conversación entre Alicia y el Conejo Blanco, la he tomada prestada de un artículo que trataba sobre el tipo de relojes que me gustaría enseñaros hoy y mi nueva adquisición adelantándome a Papá Noel...
Pero, como puede un reloj enseñarnos la duración de un segundo exacto? Fácil, pensarán muchos, con esto!
Perfecto, un reloj a cuarzo, equipa un motor a pasos que hace que la segundera salte cada segundo exacto, pero casi 300 años antes ya se habían inventado otras soluciones mecánicas. Se trata de la complicación "Dead Beat seconds".
Una complicación, que ya a finales del XIX se había quedado obsoleta, con la aparición de los cronógrafos, pero que en su época servía para cronometrar con precisión, intervalos cortos de tiempo. Veamos de manera muy superficial su historia...
Los segundos muertos tienen su origen en 1675.
La invención de los segundos muertos se atribuye al astrónomo británico Richard Towneley, que diseñó un escape de péndulo sin retroceso para mejorar la estimación de tiempo en estudios astronómicos que se realizaban en el Greenwich Observatory. El relojero Thomas Tompion construyó dos relojes astronómicos con este diseño. Su discípulo George Graham, el afamado relojero británico, incorporó la complicación a sus reguladores a principios del s. XVIII y se podría argumentar que popularizó esta presentación para los relojes de pared.
¿Pero cómo migró esta complicación a los relojes de bolsillo?
Cuando los únicos relojes que había eran de pared, era perfectamente factible que sus movimientos oscilaran dos veces por segundo, es decir a 0,5 Hz. Esos relojes evidentemente podían dar cabida a un péndulo de un metro de largo (de hecho, 0,994 m es la medida requerida) para obtener este ritmo. Como podréis imaginar, instalar un péndulo de estas dimensiones en un reloj de bolsillo no es factible, pero por fortuna el volante ya había sido inventado sobre 1670. Quién lo invento primero, Christiaan Huygens o Robert Hooke, ha sido objeto de mucha investigación.
watchesbysjx.com
La oscilación del volante se debe a energía almacenada en el muelle real. Esta energía, no la gravedad, es la que impulsa las oscilaciones. Éstas, a su vez, transmiten energía a través del escape para regular el ritmo del calibre. En el escape suizo más común esto ocurre dos veces por oscilación, el reconocible “tic” y el “tac” de los relojes mecánicos. Por lo general, los volantes oscilan a un ritmo mucho mayor del deseado para poder mostrar los segundos muertos. Físicamente es imposible reducir su ritmo de oscilación sin aumentar su tamaño, masa e inercia. De hecho, deberían ser más grandes que los calibres para oscilar al ritmo deseado.
El siguiente gran salto tecnológico se debe a un invento del relojero suizo Jean-Moïse Pouzait. Su movimiento incorporaba un segundo muelle real con un tren de engranajes secundario que permitiría detener y arrancar el segundero independientemente del mecanismo principal. Su reloj también incorporaba un pequeño segundero (conocido como “trotteuse” en francés) a las 6 h que latía a la misma frecuencia que el volante principal. Sin embargo, el reloj también contaba con un segundero central más grande que daba un salto cada segundo y podía detenerse utilizando una palanca para luego soltarse. De nuevo, un precursor del cronógrafo.
A partir de este momento, fabricantes como Breguet, Lepine, Leroy fueron implementando diferentes soluciones técnicas, para realizar esta complicación y adaptarla a diferentes tipos de escapes, hasta el más conocido actualmente de áncora. Permitidme un apunte, si rastreáis el mercado, veréis que hay muchos vendedores que ofertan relojes con segundero central y escape duplex (generalmente realizados para el mercado chino) que tienen la apariencia de ser un "segundos muertos", pero que realmente no llevan esta complicación, así que cuidado...
¿Pero en que consiste esta cara y ahora inútil complicación?
En este artículo, podemos ver la implementación más parecida que he encontrado y que se ajustaría perfectamente a mi reloj.
watch-movements.eu
En el círculo azul se ve el piñón de la rueda de escape . Engrana con la cuarta rueda del tren de engranajes normal, que en este caso no tiene segundero. En el óvalo azul hay un pequeño flirt , que parece un látigo. Así se ve desde un lado:
Este Flirt, puede girar en círculo hacia la derecha hasta que se enganche en el piñón de la rueda de escape . Después de exactamente un segundo, el accionamiento de la rueda de escape ha girado un diente y libera nuevamente al pequeño flirt. El flirt gira nuevamente 360° en un círculo y libera las ruedas, lo que garantiza que el segundero salte exactamente un segundo más. La siguiente imagen lo muestra nuevamente de manera esquemática:
En la siguiente imagen, podemos observar donde se aloja el pequeño coqueteo mientras se apoya contra el piñón de la rueda de escape, por lo que el segundo saltador se detiene en este momento.
El piñón del pequeño coqueteo (marcado en azul) engrana el tren de engranajes del segundero saltante en el punto marcado en azul.
¿Por qué la rueda de escape gira exactamente de manera que el pequeño coqueteo se libera exactamente cada segundo?
El volante del mecanismo tiene 18.000 pulsaciones por hora , lo que corresponde a 5 pulsaciones por segundo . Cada pulsación hace avanzar la rueda de escape medio diente . Por lo tanto, la rueda de escape gira 2,5 dientes por segundo . La rueda de escape tiene 15 dientes , su piñón , en el que engrana el pequeño coqueteo, tiene 6 dientes . La rotación de 2,5 dientes de la rueda de escape corresponde, por tanto, a la rotación de un diente de su piñón (15 / 2,5 = 6). En consecuencia, el piñón de la rueda de escape avanza un diente exactamente cada segundo.
Puede parecer bastante complicado, pero realmente es muy ingenioso, quizás si lo vemos funcionar de manera gráfica, será más sencillo de comprender. Este vídeo de Lange, con su patente para sus relojes de bolsillo y de pulsera, se basa en el mismo principio.
Pero volvamos a nuestro protagonista.
Como podemos apreciar, equipa dos muelles reales, siendo el trinquete más pequeño, para la segundera central. Su volante es bi-metálico, contrapesado y ajustado a temperatura. El áncora es bigotuda y está situada tangencialmente en referencia a la rueda de escape. El conteo de joyas debe de ser de 23 rubís y por su accionamiento por llave, podemos inferir su fabricación entre 1840/60. Desconozco quien pudo ser el fabricante de este ebauche, aunque su origen debe ser suizo.
La segundera central, que ya hemos visto que es independiente al mecanismo del reloj, se acciona o se para a voluntad mediante un botón situado a las 2h en el lateral de la caja. Desgraciadamente, esta última se encuentra en bastante mal estado ya que tiene una bisagra rota y le falta la contratapa interior para proteger el calibre cuando lo accionamos con la llave, así que habrá que fabricarle una. Por lo demás, el reloj funciona perfectamente y su complicación también opera sin ningún problema. Ya he apuntado al principio, que este tipo de complicación se utilizaba para cronometrar intervalos de tiempo de manera precisa, operando la segundera independiente. pensaba que esta última, empezaría a girar a muchísima más velocidad cuando el reloj agotase su cuerda, pero no es así. Al parecer el "coqueteo" la mantiene fija al piñón de la rueda de escapa y claro al pararse esta, la aguja central mantiene su carga, pero no funciona (algo bastante útil, para no crear ningún daño importante. Tras la aparición del crono, evidentemente esta complicación quedo bastante obsoleta, pero se convirtió en una bonita marca de presentación de prestigio para muchas marcas, en definitiva "un quiero y puedo".
Disculpad la mala calidad de un pequeño vídeo que he hecho para enseñar el funcionamiento de mi reloj y espero que os haya quedado claro algún concepto aquí expuesto.
Para la redacción, he utilizado estas fuentes.
www.safonagastrocrono.club
watch-movements.eu
monochrome-watches.com
Pero, como puede un reloj enseñarnos la duración de un segundo exacto? Fácil, pensarán muchos, con esto!
Perfecto, un reloj a cuarzo, equipa un motor a pasos que hace que la segundera salte cada segundo exacto, pero casi 300 años antes ya se habían inventado otras soluciones mecánicas. Se trata de la complicación "Dead Beat seconds".
Una complicación, que ya a finales del XIX se había quedado obsoleta, con la aparición de los cronógrafos, pero que en su época servía para cronometrar con precisión, intervalos cortos de tiempo. Veamos de manera muy superficial su historia...
Los segundos muertos tienen su origen en 1675.
La invención de los segundos muertos se atribuye al astrónomo británico Richard Towneley, que diseñó un escape de péndulo sin retroceso para mejorar la estimación de tiempo en estudios astronómicos que se realizaban en el Greenwich Observatory. El relojero Thomas Tompion construyó dos relojes astronómicos con este diseño. Su discípulo George Graham, el afamado relojero británico, incorporó la complicación a sus reguladores a principios del s. XVIII y se podría argumentar que popularizó esta presentación para los relojes de pared.
¿Pero cómo migró esta complicación a los relojes de bolsillo?
Cuando los únicos relojes que había eran de pared, era perfectamente factible que sus movimientos oscilaran dos veces por segundo, es decir a 0,5 Hz. Esos relojes evidentemente podían dar cabida a un péndulo de un metro de largo (de hecho, 0,994 m es la medida requerida) para obtener este ritmo. Como podréis imaginar, instalar un péndulo de estas dimensiones en un reloj de bolsillo no es factible, pero por fortuna el volante ya había sido inventado sobre 1670. Quién lo invento primero, Christiaan Huygens o Robert Hooke, ha sido objeto de mucha investigación.

Settling the 300-Year Old Dispute – Who Invented the Balance Spring? | SJX Watches
The irascible Robert Hooke and his long-lost notes.

La oscilación del volante se debe a energía almacenada en el muelle real. Esta energía, no la gravedad, es la que impulsa las oscilaciones. Éstas, a su vez, transmiten energía a través del escape para regular el ritmo del calibre. En el escape suizo más común esto ocurre dos veces por oscilación, el reconocible “tic” y el “tac” de los relojes mecánicos. Por lo general, los volantes oscilan a un ritmo mucho mayor del deseado para poder mostrar los segundos muertos. Físicamente es imposible reducir su ritmo de oscilación sin aumentar su tamaño, masa e inercia. De hecho, deberían ser más grandes que los calibres para oscilar al ritmo deseado.
El siguiente gran salto tecnológico se debe a un invento del relojero suizo Jean-Moïse Pouzait. Su movimiento incorporaba un segundo muelle real con un tren de engranajes secundario que permitiría detener y arrancar el segundero independientemente del mecanismo principal. Su reloj también incorporaba un pequeño segundero (conocido como “trotteuse” en francés) a las 6 h que latía a la misma frecuencia que el volante principal. Sin embargo, el reloj también contaba con un segundero central más grande que daba un salto cada segundo y podía detenerse utilizando una palanca para luego soltarse. De nuevo, un precursor del cronógrafo.
A partir de este momento, fabricantes como Breguet, Lepine, Leroy fueron implementando diferentes soluciones técnicas, para realizar esta complicación y adaptarla a diferentes tipos de escapes, hasta el más conocido actualmente de áncora. Permitidme un apunte, si rastreáis el mercado, veréis que hay muchos vendedores que ofertan relojes con segundero central y escape duplex (generalmente realizados para el mercado chino) que tienen la apariencia de ser un "segundos muertos", pero que realmente no llevan esta complicación, así que cuidado...
¿Pero en que consiste esta cara y ahora inútil complicación?
En este artículo, podemos ver la implementación más parecida que he encontrado y que se ajustaría perfectamente a mi reloj.

Springende Sekunde Seconde Morte Dead Beat Second
In a mechanical watch, a dead beat second is a special feature, a complication.

En el círculo azul se ve el piñón de la rueda de escape . Engrana con la cuarta rueda del tren de engranajes normal, que en este caso no tiene segundero. En el óvalo azul hay un pequeño flirt , que parece un látigo. Así se ve desde un lado:
Este Flirt, puede girar en círculo hacia la derecha hasta que se enganche en el piñón de la rueda de escape . Después de exactamente un segundo, el accionamiento de la rueda de escape ha girado un diente y libera nuevamente al pequeño flirt. El flirt gira nuevamente 360° en un círculo y libera las ruedas, lo que garantiza que el segundero salte exactamente un segundo más. La siguiente imagen lo muestra nuevamente de manera esquemática:
En la siguiente imagen, podemos observar donde se aloja el pequeño coqueteo mientras se apoya contra el piñón de la rueda de escape, por lo que el segundo saltador se detiene en este momento.
El piñón del pequeño coqueteo (marcado en azul) engrana el tren de engranajes del segundero saltante en el punto marcado en azul.
¿Por qué la rueda de escape gira exactamente de manera que el pequeño coqueteo se libera exactamente cada segundo?
El volante del mecanismo tiene 18.000 pulsaciones por hora , lo que corresponde a 5 pulsaciones por segundo . Cada pulsación hace avanzar la rueda de escape medio diente . Por lo tanto, la rueda de escape gira 2,5 dientes por segundo . La rueda de escape tiene 15 dientes , su piñón , en el que engrana el pequeño coqueteo, tiene 6 dientes . La rotación de 2,5 dientes de la rueda de escape corresponde, por tanto, a la rotación de un diente de su piñón (15 / 2,5 = 6). En consecuencia, el piñón de la rueda de escape avanza un diente exactamente cada segundo.
Puede parecer bastante complicado, pero realmente es muy ingenioso, quizás si lo vemos funcionar de manera gráfica, será más sencillo de comprender. Este vídeo de Lange, con su patente para sus relojes de bolsillo y de pulsera, se basa en el mismo principio.
Pero volvamos a nuestro protagonista.
Como podemos apreciar, equipa dos muelles reales, siendo el trinquete más pequeño, para la segundera central. Su volante es bi-metálico, contrapesado y ajustado a temperatura. El áncora es bigotuda y está situada tangencialmente en referencia a la rueda de escape. El conteo de joyas debe de ser de 23 rubís y por su accionamiento por llave, podemos inferir su fabricación entre 1840/60. Desconozco quien pudo ser el fabricante de este ebauche, aunque su origen debe ser suizo.
La segundera central, que ya hemos visto que es independiente al mecanismo del reloj, se acciona o se para a voluntad mediante un botón situado a las 2h en el lateral de la caja. Desgraciadamente, esta última se encuentra en bastante mal estado ya que tiene una bisagra rota y le falta la contratapa interior para proteger el calibre cuando lo accionamos con la llave, así que habrá que fabricarle una. Por lo demás, el reloj funciona perfectamente y su complicación también opera sin ningún problema. Ya he apuntado al principio, que este tipo de complicación se utilizaba para cronometrar intervalos de tiempo de manera precisa, operando la segundera independiente. pensaba que esta última, empezaría a girar a muchísima más velocidad cuando el reloj agotase su cuerda, pero no es así. Al parecer el "coqueteo" la mantiene fija al piñón de la rueda de escapa y claro al pararse esta, la aguja central mantiene su carga, pero no funciona (algo bastante útil, para no crear ningún daño importante. Tras la aparición del crono, evidentemente esta complicación quedo bastante obsoleta, pero se convirtió en una bonita marca de presentación de prestigio para muchas marcas, en definitiva "un quiero y puedo".
Disculpad la mala calidad de un pequeño vídeo que he hecho para enseñar el funcionamiento de mi reloj y espero que os haya quedado claro algún concepto aquí expuesto.
Para la redacción, he utilizado estas fuentes.

Complicaciones: Segundos Muertos
En este artículo examinamos la complicación mecánica de los “segundos muertos”. Tiene mucha historia, estuvo en boga durante los años 50 y 60 y ahora parece estar resurgiendo.


Springende Sekunde Seconde Morte Dead Beat Second
In a mechanical watch, a dead beat second is a special feature, a complication.


Dead Second a.k.a. Seconde Morte for Deadly Precision - Monochrome Watches
Watch collectors and aficionados are used to looking at the nearly continuous sweep of a second hand around the dial to distinguish a mechanical timepiece from quartz watches. In a mechanical watch the second hands moves forward in increments of a fraction of a second depending on the frequency...

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