
Peteflay
De la casa
Sin verificar
ADVERTENCIA: vaya por delante mis disculpas anticipadas por la calidad de las fotos.
Andaba yo últimamente algo "revuelto" con la idea de comprarme un reloj, básicamente porque sí, sin ninguna justificación adicional ni motivo es pecial, simplemente me apetecía un reloj nuevo. No tenía muy claro qué estilo quería, me gustan mucho los divers pero últimamente me tiran mucho más los relojes más polivalentes, más CUCOs. Lo que sí tenía claro era que el rango de precio sería 500/800€ máximo y que no sería una compra compulsiva, si no fruto de una buena reflexión y que sobre todo el reloj me tenía que enamorar de verdad, porque ya estoy cansado de comprar relojes impusivamente y venderlos al poco tiempo por aburrimiento.
Así pues, sin prisa, me hice una pequeña lista de relojes que, en ese rango de precios, hacía tiempo que me gustaban y empecé a buscarlos en relojerías para verlos y probarlos. En estos últimos días he visitado varias relojerías y la lista se iba clarificando, algunos que los tenía como "prioritarios" pasaban a estar descartados una vez puestos en la muñeca, y viceversa, relojes que en un principio estaban al final de la lista pasaban a los primeros lugares después de pasar por la muñeca. Empezaba a tener bastante claro qué reloj iba a comprar.
Pues bien, ayer por la tarde pasé por una de mis relojerías habituales, que tiene un escaparate de Seiko enorme, y me fijé en un Presage blanco que me llamó la atención, sobre todo se intuía una esfera texturizada, pero lo que me llamó más la atención a primera vista fue el segundero azul y la posición del fechador a las 6, nada habitual en la línea Presage. Inmediatamente pensé que se trataba del llamado Baby Snowflake, o si no del Cocktail Fuyugeshiki, pero la posición del fechador no coincidía. Así que entré en la tienda y pedí que me lo enseñaran. El flechazo fue instantáneo cuando lo vi en vivo, tanto que se me olvidaron el resto de relojes de la lista. Además, el precio me encajaba, 510€ PVP, y encima me hacían un descuentillo majo. Resulta que se trata de un Presage "International Edition" (son ediciones especiales que saca Seiko de vez en cuando para todo el mundo) de la colección Japan Garden Series que salió en 2019. El blanco es el llamado Zen Garden, inspirado en los jardines zen japoneses, pero hay otros modelos con otros colores y otros diseños. No son ediciones limitadas, si no ediciones especiales de las que hacen pocas tiradas, o una sola, y lo descatalogan. De hecho, este Zen Garden está descatalogado y según el número de serie fue fabricado en mayo de 2019 y estoy casi seguro que llegó a la tienda ese mismo año, o a lo sumo al año siguiente.
En cuanto al reloj en sí, pues tiene un diámetro de 41,7mm, cristal de zafiro (poco habitual en Seikos de este precio), WR30m, anchura de brazalete de 20mm y movimiento 4R35. Pero lo mejor es que está lleno de detalles: por un lado la esfera texturizada, que aunque no llega al texturizado snowflake sí se percibe un granulado como la arena de los jardines zen japoneses; el color blanco es muy suave y discreto, para nada llamativo, me encanta; las agujas tampoco son las habituales de los Presage, y el segundero es azul, cosa que me encanta; los índices no son los habituales facetados de esta colección, si no que también tienen una cierta textura, lo cual los hace muy originales y vistosos; el fechador está enmarcado y pocisionado a las 6, cosa que me gusta mucho porque no rompe con la estética de la esfera, y además está enmarcado; la corona está firmada con la S de Seiko, como todos los Presage. Por contra, y como sí es habitual en los Presage de estos precios (y en Seiko en general), el brazalete es una birria y para nada a la altura del reloj, se nota muy endeble y tanto el cierre como los terminales son de chapa doblada. Eso sí, muy muy cómodo, aunque creo que a este reloj le van a quedar multitud de correas, así que tampoco me preocupa.
En definitiva, un reloj que me ha enamorado a primera vista, muy original, especial y diferente (que eso es algo que yo valoro bastante). Aunque con sus cosas negativas, como el brazalete, y que quizás el diámetro es un pelón excesivo, quizás 40mm hubiesen sido más que suficientes. Pero entiendo que le quisieron dar esa sensación de amplitud de los jardines zen japoneses con ese tamaño. Si bien esos puntos negativos no me impidieron adquirirlo, porque en su conjunto es precioso, y creo que la relación calidad/precio es espectacular en este caso. En fin, que es exactamente lo que estaba buscando en este momento.
Andaba yo últimamente algo "revuelto" con la idea de comprarme un reloj, básicamente porque sí, sin ninguna justificación adicional ni motivo es pecial, simplemente me apetecía un reloj nuevo. No tenía muy claro qué estilo quería, me gustan mucho los divers pero últimamente me tiran mucho más los relojes más polivalentes, más CUCOs. Lo que sí tenía claro era que el rango de precio sería 500/800€ máximo y que no sería una compra compulsiva, si no fruto de una buena reflexión y que sobre todo el reloj me tenía que enamorar de verdad, porque ya estoy cansado de comprar relojes impusivamente y venderlos al poco tiempo por aburrimiento.
Así pues, sin prisa, me hice una pequeña lista de relojes que, en ese rango de precios, hacía tiempo que me gustaban y empecé a buscarlos en relojerías para verlos y probarlos. En estos últimos días he visitado varias relojerías y la lista se iba clarificando, algunos que los tenía como "prioritarios" pasaban a estar descartados una vez puestos en la muñeca, y viceversa, relojes que en un principio estaban al final de la lista pasaban a los primeros lugares después de pasar por la muñeca. Empezaba a tener bastante claro qué reloj iba a comprar.
Pues bien, ayer por la tarde pasé por una de mis relojerías habituales, que tiene un escaparate de Seiko enorme, y me fijé en un Presage blanco que me llamó la atención, sobre todo se intuía una esfera texturizada, pero lo que me llamó más la atención a primera vista fue el segundero azul y la posición del fechador a las 6, nada habitual en la línea Presage. Inmediatamente pensé que se trataba del llamado Baby Snowflake, o si no del Cocktail Fuyugeshiki, pero la posición del fechador no coincidía. Así que entré en la tienda y pedí que me lo enseñaran. El flechazo fue instantáneo cuando lo vi en vivo, tanto que se me olvidaron el resto de relojes de la lista. Además, el precio me encajaba, 510€ PVP, y encima me hacían un descuentillo majo. Resulta que se trata de un Presage "International Edition" (son ediciones especiales que saca Seiko de vez en cuando para todo el mundo) de la colección Japan Garden Series que salió en 2019. El blanco es el llamado Zen Garden, inspirado en los jardines zen japoneses, pero hay otros modelos con otros colores y otros diseños. No son ediciones limitadas, si no ediciones especiales de las que hacen pocas tiradas, o una sola, y lo descatalogan. De hecho, este Zen Garden está descatalogado y según el número de serie fue fabricado en mayo de 2019 y estoy casi seguro que llegó a la tienda ese mismo año, o a lo sumo al año siguiente.
En cuanto al reloj en sí, pues tiene un diámetro de 41,7mm, cristal de zafiro (poco habitual en Seikos de este precio), WR30m, anchura de brazalete de 20mm y movimiento 4R35. Pero lo mejor es que está lleno de detalles: por un lado la esfera texturizada, que aunque no llega al texturizado snowflake sí se percibe un granulado como la arena de los jardines zen japoneses; el color blanco es muy suave y discreto, para nada llamativo, me encanta; las agujas tampoco son las habituales de los Presage, y el segundero es azul, cosa que me encanta; los índices no son los habituales facetados de esta colección, si no que también tienen una cierta textura, lo cual los hace muy originales y vistosos; el fechador está enmarcado y pocisionado a las 6, cosa que me gusta mucho porque no rompe con la estética de la esfera, y además está enmarcado; la corona está firmada con la S de Seiko, como todos los Presage. Por contra, y como sí es habitual en los Presage de estos precios (y en Seiko en general), el brazalete es una birria y para nada a la altura del reloj, se nota muy endeble y tanto el cierre como los terminales son de chapa doblada. Eso sí, muy muy cómodo, aunque creo que a este reloj le van a quedar multitud de correas, así que tampoco me preocupa.
En definitiva, un reloj que me ha enamorado a primera vista, muy original, especial y diferente (que eso es algo que yo valoro bastante). Aunque con sus cosas negativas, como el brazalete, y que quizás el diámetro es un pelón excesivo, quizás 40mm hubiesen sido más que suficientes. Pero entiendo que le quisieron dar esa sensación de amplitud de los jardines zen japoneses con ese tamaño. Si bien esos puntos negativos no me impidieron adquirirlo, porque en su conjunto es precioso, y creo que la relación calidad/precio es espectacular en este caso. En fin, que es exactamente lo que estaba buscando en este momento.