SusanGal
Forer@ Senior
Sin verificar
Conseguí evitar la compra de una Gameboy hasta que ni hija tuvo 12 años. Por contra, su hermano la tuvo a los 10. Sus compañeros la tenían desde hacía tiempo pero mi hija no era de maquinitas, el mérito es suyo no mío.
Ahora tienen móviles de un valor mayor que aquella Gameboy y otras muchas cosas. Mis hijos y los niños de 13 años.
Yo era una niña pobre de solemnidad. Jamás mis padres pensaron que a mis 10 años podía poseer nada. Absolutamente nada. Sin embargo, el día de mi comunión mis tíos de Suiza me regalaron un reloj cuadradito de marco dorado y correa fina de cuero negro. Mi alegría fue máxima, por fin tenía algo de valor.
Poco dura la alegría en casa del pobre. La caja de aquel reloj se desprendió y me quedé sin él. Mi única posesión se esfumó tan rápido cómo llegó. Mi madre siempre dijo que mi tía era muy "agarrada" y claro, aquel reloj no tenía nada bueno.
Un día pasó algo inesperado. Por los cumpleaños los padres de aquellas infancias hacían un regalo. Uno. Nada de valor, porque solo éramos niños. Aquel cumpleaños de mis 13 iba a ser largarmente recordado. Era el último curso, el final de mi primera etapa educativa. Jamás pedías nada. Te tocaba lo que tus padres te compraban. Punto.
No podía creer lo que había en aquella caja. Me ha acompañado toda mi vida de estudiante. Lo llevaba con orgullo. Era mi única pertenencia de valor, para mi... Incalculable. No era un reloj. Era la certeza de que mis padres pensaban que había llegado el momento en el que me convertía en "casi" adulta, estaba preparada para cuidar de algo importante. Habían decidido que ya no era una niña.
Pocas posesiones en mi vida han tenido ni la mitad del significado que tuvo aquel reloj. Ninguna posesión de mis hijos ha tenido ese significado para ellos.
PD. Tenéis un hilo del 2017 hablando de esa marca. En aquella época el valor económico que representaba era mayor que muchos de los relojes de hoy en día. Me ha encantado algún comentario en el que dice, maquinaria Suiza, espíritu español. 😍
PD2. No tiene pila, sigue conmigo y estoy segura de que funciona. Por cierto, sigo teniendo la misma medida de muñeca de entonces. 😆
PD3. Es digital, tiene mes y día. Pocas compañeras tenían un reloj digital en aquellos años. Es el reloj que más especial me ha hecho sentir.
Ahora tienen móviles de un valor mayor que aquella Gameboy y otras muchas cosas. Mis hijos y los niños de 13 años.
Yo era una niña pobre de solemnidad. Jamás mis padres pensaron que a mis 10 años podía poseer nada. Absolutamente nada. Sin embargo, el día de mi comunión mis tíos de Suiza me regalaron un reloj cuadradito de marco dorado y correa fina de cuero negro. Mi alegría fue máxima, por fin tenía algo de valor.
Poco dura la alegría en casa del pobre. La caja de aquel reloj se desprendió y me quedé sin él. Mi única posesión se esfumó tan rápido cómo llegó. Mi madre siempre dijo que mi tía era muy "agarrada" y claro, aquel reloj no tenía nada bueno.
Un día pasó algo inesperado. Por los cumpleaños los padres de aquellas infancias hacían un regalo. Uno. Nada de valor, porque solo éramos niños. Aquel cumpleaños de mis 13 iba a ser largarmente recordado. Era el último curso, el final de mi primera etapa educativa. Jamás pedías nada. Te tocaba lo que tus padres te compraban. Punto.
No podía creer lo que había en aquella caja. Me ha acompañado toda mi vida de estudiante. Lo llevaba con orgullo. Era mi única pertenencia de valor, para mi... Incalculable. No era un reloj. Era la certeza de que mis padres pensaban que había llegado el momento en el que me convertía en "casi" adulta, estaba preparada para cuidar de algo importante. Habían decidido que ya no era una niña.
Pocas posesiones en mi vida han tenido ni la mitad del significado que tuvo aquel reloj. Ninguna posesión de mis hijos ha tenido ese significado para ellos.
PD. Tenéis un hilo del 2017 hablando de esa marca. En aquella época el valor económico que representaba era mayor que muchos de los relojes de hoy en día. Me ha encantado algún comentario en el que dice, maquinaria Suiza, espíritu español. 😍
PD2. No tiene pila, sigue conmigo y estoy segura de que funciona. Por cierto, sigo teniendo la misma medida de muñeca de entonces. 😆
PD3. Es digital, tiene mes y día. Pocas compañeras tenían un reloj digital en aquellos años. Es el reloj que más especial me ha hecho sentir.