Llevo con vosotros desde 2015, sois culpables de la mayoría de mis caprichos y os leo a diario... Así que es buen momento de presentar la caja que he ido creando a lo largo de estos años.
No sabría explicar muy bien porque me gustan tanto los relojes. Creo que es una afición preciosa en la que siempre tienes algo que aprender. Son joyas que siempre podemos llevar encima. Y también veo los relojes como un pequeño legado que dejar a mis herederos (a su debido momento!).
También reconozco que, aunque suene algo feo, me gusta llevar un buen reloj como premio al merecido trabajo de cada día.
Como parte negativa decir que a veces la gente te juzga por llevar un reloj de cierto presupuesto. Pero bueno... cada uno con sus gustos y opiniones.
Os los enseño de 3 en 3.
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El primero fue regalo de mi
mujer: Casio AW-591-2AER. Cada vez me gusta más por su versatilidad y robustez. Creo que hay que tener un G-shock siempre en la caja.
Sobre el segundo no sé mucho. Lo compramos en un mercadillo en San Petersburgo hace muchos años (antes de ser forero). Ahora me arrepiento de no haber estado más atento a las posibles oportunidades.
El Seiko es el reloj que más llevaba mi padre puesto y que pasó a mi tras su muerte. Le tengo especial cariño y me parece muy bonito.
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Este Hamilton
Jazzmaster Auto Chrono fue el primero reloj "caro" que me compré. Me hizo mucha ilusión el proceso de elección, búsqueda, compra...
Ahora sale poco a pasear pero le tengo especial cariño.
El Orient Mako II fue una de esas compras "impulsadas" por el foro. Lo compré en Estados Unidos y lo recibió un amigo que vivía allí en aquella época (2016) y recorrió Las Vegas entre amigos en mi muñeca. Grandes recuerdos.
El Tissot Heritage Visodate fue otro regalo de mi mujer (elegido por mi). Ya sabe que si hay celebración con un reloj de por medio nunca falla el regalo.
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Sea-Gull 1963 otro regalo de mi mujer. Me parece un imprescindible muy recomendable.
Este Glycine Combat Classic Moonphase fue un regalo que le hice a mi padre para el día del padre. El pobre no lo pudo disfrutar muchos años pero ahora me encargaré yo de cuidarlo. Tiene algo especial.
Este Werenbach fue un capricho total. Un crowfunding en una de estas webs que te sacan la pasta con ideas bonitas 😉
¿A quién no le apetece tener un cachito de cohete ruso en la muñeca?
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Este Datejust de los años 65/70 fue el regalo que me hizo mi suegro al casarme con su hija. ¿Quién podía rechazar tal matrimonio?
😉
El Omega Speedmaster creo que es de mis favoritos. Es como tener un cachito de historia en la muñeca. Este es la versión manual, creo que del año 69. Calibre 861.
Sin duda el reloj que más me pongo de todos.
Este Tag Heuer Carrera 1887 fue amor a primera vista desde que lo vi un día en El Corte Inglés. Me decía a mi mismo que era mi reloj perfecto y que cuando tuviera esa pararía. Ay... inocente de mi... Fue el regalo de boda de mi mujer y ese día fue cuando lo estrené. Otro maravilloso reloj y otro momento único.
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Y para acabar mi última adquisición de la caja. El Primero. En honor a mi primer hijo y coincidiendo con su nacimiento (vaya excusa, ehhhh). El reloj que espero que perdure por generaciones por los especial que es para mi y por lo que significa.
AL FIN Y AL CABO NO SON RELOJES, SON LOS MOMENTOS QUE HEMOS VIVIDO JUNTO A ELLOS.
Espero que os guste. ¿Cuál será el siguiente? (SPOILER, ya lo tengo encargado para mi 40 cumpleaños). ¿Alguien adivina?
Una colección preciosa y compensada. Enhorabuena por esas piezas y por su presentación.
