Muy buena idea compañero.
Pero aclaro que, fiel a mi costumbre, no recomiendo ni libros ni plumas ni relojes ni nada. Nunca recomiendo absolutamente nada.
Creo que cada cual puede ( y debe ) hacer su experiencia.
Como soy abonada al hilo de plumas y relojes, pues también me apunto a este.
En las fotos verán un libro muy escaso e interesante.
Su autor fue un corresponsal de guerras, periodista y cronista de viajes neocelandés llamado Hector McQuarrie.
Que junto a su amigo Dick recorrió el mundo en los años treinta a bordo de un auto también inusual: el baby Austin.
El libro se llama Round the World in a Baby Austin, no sé si alguna vez se tradujo al español.
En el libro Hector y Dick nos llevan junto a ellos a bordo del pequeñísimo automóvil por su New Zealand natal ( y el libro empieza con un naufragio... poco auspicioso comienzo de aventura ); y barco mediante por Estados Unidos, luego Inglaterra ( también barco mediante ), salto a Europa, Albania, Turquía, Irán, Irak, Egipto; lo que hoy es Israel y Palestina, India, Australia y tantos otros lugares y paisajes y culturas y países.
El estilo de escritura de MacQuarrie es muy Hemingwayiano: palabras sencillas, muy pocos adjetivos, grandes descripciones, mucha claridad de expresión. Se nota también la enorme influencia que en MacQuarrie han tenido dos escritores no ingleses pero que escribían en inglés y que han revolucionado la manera de escribir en ese idioma en el siglo XX: Conrad y Hudson.
De Conrad el inquieto Hector toma la meticulosidad argumental; de Hudson la manera de relatar, bien guauchesca: que cuando uno escribe sea entendible para todos, no importa la competencia cultural del lector.
La única pluma que se me ocurre que puede acompañar un libro así es mi Cross Aventura.