Goldoff
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Para quien no conozca Massena LAB: "Fundado por William Massena, destacado coleccionista de relojes y experto en la industria, Massena LAB propone a los fabricantes ideas o conceptos diferentes que van más allá de la oferta de sus colecciones."
Estas son las colaboraciones que ha hecho:
aunque desde 2018 también va por libre, que es lo que más le gusta. Su última creación ha sido el Uni-Racer, cuyo nombre es un guiño a la nomenclatura de Universal Geneve, con su Unicompax para denominar al crono de dos contadores:
Está nominado para el próximo GPHG, por cierto. Y ya está agotado.
Esta vez se ha aliado con Angelus para revisar su extenso catálogo vintage y recuperar el "Chronographe Médical" que tanto juego le dio a la marca. Su doble escala de lectura —pulsómetro y asmómetro— lo convierte en un cronógrafo-herramienta. Angelus inicia así su colección "La Fabrique", con la que pretende recuperar modelos emblemáticos que producirá en series muy limitadas. Como el caso que nos ocupa, del que sólo se ofrecerán 99 unidades. Una parte de ellas se podrá adquirir en la red de minoristas autorizados de Angelus y el resto estará disponible directamente a través de Massena LAB. Nota: no sé si esto es un giro en la estrategia de la marca para abandonar el terreno de grandes complicaciones e intrincada artesanía, en el que coincide con su marca hermana Arnold and Son. Parecería lógico, en todo caso.
Nota técnica para los no iniciados en medicina:
La función de pulsómetro es indicar la frecuencia cardíaca de un paciente, sin necesidad de hacer ningún cálculo. En el Chronographe Médical de Angelus, la escala pulsométrica, situada entre la 1 y las 3 horas, se ha diseñado tomando como referencia 10 pulsaciones. Una vez que se activa el cronógrafo, basta con contar 10 pulsaciones e inmediatamente detener el mecanismo. Entonces la aguja del cronógrafo indicará el número de pulsaciones por minuto con respecto a la escala pulsométrica. El asmómetro muestra la frecuencia respiratoria por minuto. El Chronographe Médical se basa en 5 respiraciones. Una vez que se activa el cronógrafo, hay que contar 5 respiraciones y apretar de nuevo el pulsador. La aguja del cronógrafo señalará el número de respiraciones por minuto en la escala interior, que está graduada de 40 a 10.
Lo interesante de este reloj no está, en mi opinión, tanto en la esfera como en el concepto: dada su función diagnóstica, el calibre A5000 ha sido modificado para actuar con un solo pulsador que desempeña las tres operaciones de arranque, parada y puesta a cero de forma consecutiva. Es por esto también que se ha prescindido de cualquier contador acumulativo de minutos, y la segundera a las nueve hace de "testimonio de funcionamiento".
Otras características son su frecuencia de 3 Herzios (21.600 a/h), el embrague horizontal y la rueda de pilares.
Tercera nota: el precio me parece un despropósito por muy limitada que sea la serie, aunque no dudo que, como todo lo que sale de Massena LAB, acabe agotándose.
Estas son las colaboraciones que ha hecho:
Partnerships
Massena LAB conceives, designs, and develops unique, limited-edition timepieces with independent watchmakers from around the world.
massenalab.com
aunque desde 2018 también va por libre, que es lo que más le gusta. Su última creación ha sido el Uni-Racer, cuyo nombre es un guiño a la nomenclatura de Universal Geneve, con su Unicompax para denominar al crono de dos contadores:
BiCompax, TriCompax. No es lo que creías. Una de las dos no existe
Muchos tienen (teníamos, me incluyo) asumido que un crono con tres subesferas era un tri-compax y uno con dos un bi-compax. Y ya, porque son raros los cronos con más subesferas y los de una sola ni siquiera son cronos, porque damos por hecho que son los "segundos pequeños"... ¿Y si yo le dijera...
relojes-especiales.com
Está nominado para el próximo GPHG, por cierto. Y ya está agotado.
Esta vez se ha aliado con Angelus para revisar su extenso catálogo vintage y recuperar el "Chronographe Médical" que tanto juego le dio a la marca. Su doble escala de lectura —pulsómetro y asmómetro— lo convierte en un cronógrafo-herramienta. Angelus inicia así su colección "La Fabrique", con la que pretende recuperar modelos emblemáticos que producirá en series muy limitadas. Como el caso que nos ocupa, del que sólo se ofrecerán 99 unidades. Una parte de ellas se podrá adquirir en la red de minoristas autorizados de Angelus y el resto estará disponible directamente a través de Massena LAB. Nota: no sé si esto es un giro en la estrategia de la marca para abandonar el terreno de grandes complicaciones e intrincada artesanía, en el que coincide con su marca hermana Arnold and Son. Parecería lógico, en todo caso.
Nota técnica para los no iniciados en medicina:
La función de pulsómetro es indicar la frecuencia cardíaca de un paciente, sin necesidad de hacer ningún cálculo. En el Chronographe Médical de Angelus, la escala pulsométrica, situada entre la 1 y las 3 horas, se ha diseñado tomando como referencia 10 pulsaciones. Una vez que se activa el cronógrafo, basta con contar 10 pulsaciones e inmediatamente detener el mecanismo. Entonces la aguja del cronógrafo indicará el número de pulsaciones por minuto con respecto a la escala pulsométrica. El asmómetro muestra la frecuencia respiratoria por minuto. El Chronographe Médical se basa en 5 respiraciones. Una vez que se activa el cronógrafo, hay que contar 5 respiraciones y apretar de nuevo el pulsador. La aguja del cronógrafo señalará el número de respiraciones por minuto en la escala interior, que está graduada de 40 a 10.
Lo interesante de este reloj no está, en mi opinión, tanto en la esfera como en el concepto: dada su función diagnóstica, el calibre A5000 ha sido modificado para actuar con un solo pulsador que desempeña las tres operaciones de arranque, parada y puesta a cero de forma consecutiva. Es por esto también que se ha prescindido de cualquier contador acumulativo de minutos, y la segundera a las nueve hace de "testimonio de funcionamiento".
Otras características son su frecuencia de 3 Herzios (21.600 a/h), el embrague horizontal y la rueda de pilares.
Tercera nota: el precio me parece un despropósito por muy limitada que sea la serie, aunque no dudo que, como todo lo que sale de Massena LAB, acabe agotándose.