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Ferdinand71
Habitual
Contribuidor de RE
Sin verificar
A raíz de la publicación de las primeras fotos del nuevo Longines Spirit Pilot de 39mm, varios foreros se han interesado por una comparativa entre éste y el Tudor Ranger, ambos de 39mm.
Al principio me chocaba, porque los sitúo en espacios diferentes, con distinto estilo… pero entiendo que más de uno se sienta atraído por ambos, y se plantee la elección de uno de ellos, sobre todo ahora que ya casi es Navidad…
En primer lugar voy a tratar de ser objetivo; y después seré subjetivo, dando mi opinión en base a mis gustos y sensaciones. Y en este sentido, para mí hay un claro favorito.
Como comentaba ayer a nuestro querido Pepe (@Lone Cat), el Ranger se percibe más grande de lo que es, posiblemente por su bisel cepillado que “marca” su presencia, frente a los biseles con pulido a espejo que desaparecen de la vista en ocasiones, se hacen menos notables… Ambos dejan una esfera visible similar (aprox 1,2mm mayor la del Ranger). No obstante, el Pilot 39 se nota, se percibe su medida.
En muñeca:
El largo de asas es ligeramente mayor en el Ranger (47,7 mm frente a 47,2mm) pero su brazalete cuenta con endlink hembra, por lo que ahí concluye todo. Además, el perfil de asas desciende más que en el Spirit, se curva hacia abajo (frontalmente parece más corto de asas), y se adapta mejor a muñecas redondeadas. Las asas del Spirit son más rectas, y vuelan ligeramente en ese tipo de muñecas (como la mía). Y los endlinks macho prolongan la longitud total por encima de los 50mm… en muñecas estrechas pueden jugar una mala pasada.
De perfil, Ranger a la izquierda y Spirit a la derecha:
Vista frontal
Así se asienta el Ranger (muñeca de 18cm de diámetro):
Y así asienta el Spirit
(Se puede apreciar el vuelo del asa a la derecha)
En cuanto a acabados, la caja y brazalete del Spirit son más refinados, alternan cepillado y pulido (faldón del bisel, perfiles rematados en chaflán, eslabones finos del brazalete, y laterales del mismo), terminaciones suavizadas y acabados habituales de Longines. Los acabados del Ranger son más sencillos e incluso algo toscos: perfiles afilados en las asas y bordes de los eslabones y cierre (no les vendría mal un pulidito para suavizarlos…), aunque con un gran acabado totalmente cepillado. Su brazalete se percibe tremendamente sólido, robusto y fiable, de buena construcción. El del Spirit es como el de los modelos anteriores, más estilizado (más delgado), y se aprecia más ligero y menos herramienta. Una pega de esta nueva versión es que no dispone de liberador de brazalete para cambio rápido, (una auténtica gozada en los anteriores), con lo apetecible que se hace ponerle una correa de piel de vez en cuando.
Ambos brazaletes llevan cierre con microajuste rápido (sin herramientas), y en este sentido me ha gustado mucho lo que ha hecho Longines (y que parece estar aplicando a todos sus nuevos brazaletes). Es un cierre desplegable con botones, y un sistema muy cómodo de microajuste (presionar y desplazar) que aporta hasta 5,5 mm de margen, en 3 posiciones. Y el cierre tiene un grosor final muy reducido (creo que es el más delgado que tengo, con microajuste rápido; lo podéis ver cerrado, de perfil, en una de las fotos anteriores). El del Ranger, como todo su brazalete: se siente muy sólido, con 4 posiciones, y diría que un margen de ajuste mayor (en torno a 8mm en total). Y su sistema de cierre de seguridad con rodamientos cerámicos… muy Top.
Otra de las mejoras de este nuevo Spirit Pilot es que incorpora corona roscada, aunque se mantiene en la misma resistencia al agua que en sus modelos anteriores (100m, al igual que el Ranger), pero con mayor tranquilidad para el usuario.
El dial de uno y otro son muy diferentes: coinciden en que tienen fondo mate, y tres agujas. Indices pintados para el Ranger, y aplicados para el Spirit, con contornos dorados. En ese sentido le veo más similitud con el BB58 negro, o con un BB39, que con el Ranger… Adicionalmente, la esfera del Spirit tiene una aparente sencillez, cuando en realidad alberga detalles como el fino aro metalico entre los numerales y el carril de minutos, en un plano inferior, y los marcadores romboidales de las horas, luminova en sandwich. Logo aplicado, y texto impreso en color dorado. Es claramente una esfera más elaborada. Aunque no me cabe duda de que cada uno de los diseños obedece a un propósito: Field sencillo y muy discreto en el Ranger, y Flieger con un toque más elegante en el Spirit Pilot.
Por dentro, ambos llevan calibres con certificación COSC, aunque con sus diferencias: Spirit late a 3,5 Hz mientras que el Ranger lo hace a 4 Hz, y ambos en torno a las 70 horas de reserva de marcha.
PVP Tudor Ranger: 3.510€
PVP Longines Spirit Pilot: 2.950€
(ambos en su versión con brazalete)
Mis impresiones:
Creo recordar que un forero planteó una consulta sobre “qué reloj comprarías: Tudor Ranger o Longines Spirit” cuando todavía no existía este modelo… Mi respuesta en aquella ocasión, teniendo un Spirit 37 Azul y el Ranger, se decantaba por el Longines. Me parecía un reloj estupendo, y con muy buena relación calidad-precio, con el añadido de que estéticamente me parecía más redondo que el Ranger. Para mí día-a-día, trabajo y ocio convencional, el Spirit podía ser un reloj de 7 días de la semana (aunque no lo haga porque me gusta cambiar a diario). Para ocio desenfadado y deportivo, playa-montaña y viernes el Ranger es un Mandrakero sin rival.
Este nuevo Spirit Pilot acentúa más aún mi preferencia, no puedo ser parcial: partiendo de un ya muy atractivo diseño, las decisiones de eliminar la ventana de fecha, introducir corona roscada y microajuste rápido en el cierre, el acabado dorado de los índices sobre negro (una de mis combinaciones favoritas), un aspecto más vintage, hacen de este restyling un gran acierto, para mi gusto. Incluso retirar las 5 estrellas, que no me molestaban en absoluto anteriormente, me ha parecido una buena decisión que ha logrado una esfera muy atractiva y equilibrada.
Por otra parte, la diferencia de precio es notable (aunque Longines esté empeñado en recortarla)… En mi caso también influiría a favor de este Spirit Pilot si tuviera que escoger entre ellos, porque todo sumado todo me parece mejor compra.
Al principio me chocaba, porque los sitúo en espacios diferentes, con distinto estilo… pero entiendo que más de uno se sienta atraído por ambos, y se plantee la elección de uno de ellos, sobre todo ahora que ya casi es Navidad…
En primer lugar voy a tratar de ser objetivo; y después seré subjetivo, dando mi opinión en base a mis gustos y sensaciones. Y en este sentido, para mí hay un claro favorito.
Como comentaba ayer a nuestro querido Pepe (@Lone Cat), el Ranger se percibe más grande de lo que es, posiblemente por su bisel cepillado que “marca” su presencia, frente a los biseles con pulido a espejo que desaparecen de la vista en ocasiones, se hacen menos notables… Ambos dejan una esfera visible similar (aprox 1,2mm mayor la del Ranger). No obstante, el Pilot 39 se nota, se percibe su medida.
En muñeca:
El largo de asas es ligeramente mayor en el Ranger (47,7 mm frente a 47,2mm) pero su brazalete cuenta con endlink hembra, por lo que ahí concluye todo. Además, el perfil de asas desciende más que en el Spirit, se curva hacia abajo (frontalmente parece más corto de asas), y se adapta mejor a muñecas redondeadas. Las asas del Spirit son más rectas, y vuelan ligeramente en ese tipo de muñecas (como la mía). Y los endlinks macho prolongan la longitud total por encima de los 50mm… en muñecas estrechas pueden jugar una mala pasada.
De perfil, Ranger a la izquierda y Spirit a la derecha:
Vista frontal
Así se asienta el Ranger (muñeca de 18cm de diámetro):
Y así asienta el Spirit
(Se puede apreciar el vuelo del asa a la derecha)
En cuanto a acabados, la caja y brazalete del Spirit son más refinados, alternan cepillado y pulido (faldón del bisel, perfiles rematados en chaflán, eslabones finos del brazalete, y laterales del mismo), terminaciones suavizadas y acabados habituales de Longines. Los acabados del Ranger son más sencillos e incluso algo toscos: perfiles afilados en las asas y bordes de los eslabones y cierre (no les vendría mal un pulidito para suavizarlos…), aunque con un gran acabado totalmente cepillado. Su brazalete se percibe tremendamente sólido, robusto y fiable, de buena construcción. El del Spirit es como el de los modelos anteriores, más estilizado (más delgado), y se aprecia más ligero y menos herramienta. Una pega de esta nueva versión es que no dispone de liberador de brazalete para cambio rápido, (una auténtica gozada en los anteriores), con lo apetecible que se hace ponerle una correa de piel de vez en cuando.
Ambos brazaletes llevan cierre con microajuste rápido (sin herramientas), y en este sentido me ha gustado mucho lo que ha hecho Longines (y que parece estar aplicando a todos sus nuevos brazaletes). Es un cierre desplegable con botones, y un sistema muy cómodo de microajuste (presionar y desplazar) que aporta hasta 5,5 mm de margen, en 3 posiciones. Y el cierre tiene un grosor final muy reducido (creo que es el más delgado que tengo, con microajuste rápido; lo podéis ver cerrado, de perfil, en una de las fotos anteriores). El del Ranger, como todo su brazalete: se siente muy sólido, con 4 posiciones, y diría que un margen de ajuste mayor (en torno a 8mm en total). Y su sistema de cierre de seguridad con rodamientos cerámicos… muy Top.
Otra de las mejoras de este nuevo Spirit Pilot es que incorpora corona roscada, aunque se mantiene en la misma resistencia al agua que en sus modelos anteriores (100m, al igual que el Ranger), pero con mayor tranquilidad para el usuario.
El dial de uno y otro son muy diferentes: coinciden en que tienen fondo mate, y tres agujas. Indices pintados para el Ranger, y aplicados para el Spirit, con contornos dorados. En ese sentido le veo más similitud con el BB58 negro, o con un BB39, que con el Ranger… Adicionalmente, la esfera del Spirit tiene una aparente sencillez, cuando en realidad alberga detalles como el fino aro metalico entre los numerales y el carril de minutos, en un plano inferior, y los marcadores romboidales de las horas, luminova en sandwich. Logo aplicado, y texto impreso en color dorado. Es claramente una esfera más elaborada. Aunque no me cabe duda de que cada uno de los diseños obedece a un propósito: Field sencillo y muy discreto en el Ranger, y Flieger con un toque más elegante en el Spirit Pilot.
Por dentro, ambos llevan calibres con certificación COSC, aunque con sus diferencias: Spirit late a 3,5 Hz mientras que el Ranger lo hace a 4 Hz, y ambos en torno a las 70 horas de reserva de marcha.
PVP Tudor Ranger: 3.510€
PVP Longines Spirit Pilot: 2.950€
(ambos en su versión con brazalete)
Mis impresiones:
Creo recordar que un forero planteó una consulta sobre “qué reloj comprarías: Tudor Ranger o Longines Spirit” cuando todavía no existía este modelo… Mi respuesta en aquella ocasión, teniendo un Spirit 37 Azul y el Ranger, se decantaba por el Longines. Me parecía un reloj estupendo, y con muy buena relación calidad-precio, con el añadido de que estéticamente me parecía más redondo que el Ranger. Para mí día-a-día, trabajo y ocio convencional, el Spirit podía ser un reloj de 7 días de la semana (aunque no lo haga porque me gusta cambiar a diario). Para ocio desenfadado y deportivo, playa-montaña y viernes el Ranger es un Mandrakero sin rival.
Este nuevo Spirit Pilot acentúa más aún mi preferencia, no puedo ser parcial: partiendo de un ya muy atractivo diseño, las decisiones de eliminar la ventana de fecha, introducir corona roscada y microajuste rápido en el cierre, el acabado dorado de los índices sobre negro (una de mis combinaciones favoritas), un aspecto más vintage, hacen de este restyling un gran acierto, para mi gusto. Incluso retirar las 5 estrellas, que no me molestaban en absoluto anteriormente, me ha parecido una buena decisión que ha logrado una esfera muy atractiva y equilibrada.
Por otra parte, la diferencia de precio es notable (aunque Longines esté empeñado en recortarla)… En mi caso también influiría a favor de este Spirit Pilot si tuviera que escoger entre ellos, porque todo sumado todo me parece mejor compra.
