En esta, mi segunda entrega, quiero hablar del Tudor Home Plate, el primer cronógrafo de la relojera suiza. Quienes me conocen saben de mi fervor por Tudor. Para mí su condición de marca “hermana menor” de Rolex no la desmerece en absoluto, todo lo contrario. Tudor ha compartido muchas cosas con la marca suiza por excelencia y al tiempo goza de una flexibilidad que no tiene aquella. ¡Para mí esta condición la hace muy especial!
Tudor nos ha dado algunos modelos increíbles a lo largo de su historia, muchos de ellos similares a Rolex y que hoy en día están alcanzando niveles de coleccionismo nunca antes vistos. Existen, no obstante, modelos Tudor que nunca llegaron a tener contraparte en Rolex. Uno de ellos, y quizás el más célebre, es el primer cronógrafo de Tudor, el legendario 7031 de 1970, también conocido como “Home Plate”, del que hoy quiero hablaros.
El nombre deriva del popular deporte americano del beisbol. La 4ª base o “home” que es donde se anotan las carreras del llamado “Rey de los Deportes”. Tiene una forma pentagonal y es denominado Home Plate. El Tudor Home Plate tiene unos índices con esa forma, de ahí el nombre.
Lo he dicho muchas veces. Tudor ha sido laboratorio de Rolex muchos años y quien quiera conocer a fondo esta marca, debe conocer la historia de Tudor a la perfección, si no, le falta un mundo por comprender. Esto es así.
Fue precisamente en el Home Plate de Tudor donde se ensayaron muchas de las cosas que habría de configurar el cronógrafo más buscado que hay, el Daytona de Rolex. A finales de los años 60 Tudor probaba esta caja más grande, cuyo bisel mide 39,5 mm. El Daytona manual de la época medía 37mm. También probó lo que se convertiría en santo y seña del Daytona automático, los protectores de coronas, con la salvedad de que Tudor lo hizo 19 años antes que Rolex.
El Tudor Home Plate rescata también una característica vista fugazmente en Rolex: los protectores de corona cuadrados. Estos fueron el primer tipo de protectores que incorporó el Submariner, tanto el de Rolex como el de Tudor, en los ahora legendarios Submariner 5512 y Tudor 7928 de 1959 y de los que se dice que… ¡solamente se hicieron algunas decenas!
¿Quieres leer más detalles sobre el Tudor Home Plate y las diferentes versiones de este increíble cronógrafo que se conocen? Pues como siempre, tendrás que aguardar a que publiquemos la segunda parte, y eso será el próximo miércoles. ¡Hasta entonces!
Gustavo