Castell de Vullpellac

Exploramos el calendario perpetuo de Patek Philippe en una clase magistral sobre mecánica relojera

Una de las grandes complicaciones relojeras por excelencia es el llamado calendario perpetuo, ese que “sabe” cuántos días tiene un mes incluyendo los meses de febrero con veintinueve o veintiocho según sea el año bisiesto o no. Implantado por Julio César en el año 45 a.C. y corregido en 1582 por el Papa Gregorio XIII, el calendario conocido desde entonces como Gregoriano cuenta un día más cada cuatro años… excepto en los múltiplos de 100 o años seculares.

Conocemos más aún el calendario perpetuo de Patek Philippe en el Castillo de Vullpellac

Y una de las grandes manufacturas relojeras que domina el arte de crear y producir relojes con esta complicación casi mágica es Patek Philippe, que en 1927 fue la primera en presentar un calendario perpetuo de pulsera (adaptación de uno de bolsillo de 1925) y cuya colección actual se compone de no menos de diez modelos si contamos los presentados este año en Baselworld 2017 y que incluyen el fabuloso cronógrafo ratrapante referencia 5372P.

Patek Philippe 5372P

Para poder verlos, recientemente, y gracias a Pere Quera 1887, he tenido la oportunidad de asistir a uno de los mágicos eventos que organiza Patek Philippe. Esta vez fue en lo que se viene denominando un “marco incomparable”: el Castillo de Vullpellac en la provincia de Girona, residencia particular que se abría expresamente para acoger esta presentación.

Porque “presentación” es la palabra correcta, ya que antes de pasar a tocar y probarnos los relojes que se habían traído para la ocasión asistimos a una charla dada por el director general de la marca en Iberia (Portugal, España y Andorra), John Vergotti, apoyado por los relojeros del servicio técnico de Patek Philippe en Barcelona. Y aprendimos mucho. Por ejemplo, que se habla de verdadera “programación mecánica” cuando se realizan complicados engranajes con dientes de distintas profundidades para identificar los distintos meses, o que es vital la gestión de la energía suministrada por el muelle real contenido en el barrilete porque tiene que arrastrar las indicaciones de días (de la semana y del mes), meses y años, a veces simultáneamente.

castillo Vullpellac

Después de esta clase magistral pasamos a las mesas donde estaban no sólo los relojes sino los relojeros –incluido un peso pesado que no me dejan mencionar- nos explicaron con maquetas coloreadas el funcionamiento dinámico de lo que acabábamos de escuchar. Toda una labor didáctica que abunda en el mensaje que desde hace años sale de Patek Philippe: su cometido es preservar y divulgar el arte de la Alta Relojería en todas sus facetas, desde la mecánica hasta los oficios artesanos como el grabado, el pulido y el esmalte entre otros.

Novedades Patek 2017

Explicaciones magistrales

Calendarios perpetuos Patek Philippe

Desde la esfera esmaltada del nuevo 5320G hasta la caja en forma de cojín del 5940G (que este año se presenta en oro rosa) o los acabados grabados del 5160 de indicación retrógrada, la sucesión de piezas fue de ensueño, y si las multiplicamos por “perpetuo” se podría decir que tuve en mis manos la pura eternidad.