sixoclock
Habitual
Sin verificar
A ver y sin ánimo de polemizar. Los Crepas son copias. Eso nadie lo puede negar y es que a sus responsables, de verdad que esa acusación se la trae al pairo.
Son copias de relojes que a una determinada persona (Pablo) le apasionan. Existen porque a esa persona le da la gana que existan. Son copias de relojes que hace años, décadas, ya no se fabrican (por cierto, con patentes más caducadas que el oficio de sereno). Son copias de relojes que, algunos de ellos no entraron en producción. Copias, a veces, de relojes que el 95% de los aficionados desconocen que un día existieron. Y ya desde hace muchos años, a veces son copias que, si Crepas no las hace, no las hace nadie, y cito en este caso a Ana. Esto es una verdad como un templo y es demostrable: L'Ocean, Decomaster, Megamatic y el próximo, que es absolutamente sorprendente. Otros son copias de relojes más conocidos y existen porque a Pablo le encantan, sin más explicación.
Unos Crepas han llevado más trabajo que otros. Pablo los dibuja, desconozco sobre qué soporte, entiendo que herramienta informática, trabaja los detalles, modifica lo que le viene en gana (o no) y consigue que otra persona o personas, al otro lado del mundo, transformen en algo tangible lo que a él le viene en gana comercializar. Steeldive ha llamado a esas mismas personas y les ha dicho: quiero lo mismo, con mi logo y este calibre. Una llamada de teléfono e ingreso en cuenta de una determinada cantidad de pasta. Eso es todo lo que ha hecho, lícitamente eso no lo dudo, Steeldive. Respecto a todo lo que hace Pablo yo solo siento dos cosas: envidia sana y admiración.
Luego, unos Crepas salen más agraciados, otros menos, unos sin defectos, otros con ellos, unos con mayor satisfacción para el cliente, otros con menos (en cualquiera de los aspectos posibles: el bien tangible, la atención al cliente o cualquiera otro).
La diferencia entre lo que hace Crepas y lo que ha hecho Longines con su Ultrachron, por poner un sólo ejemplo de entre cientos, es ninguna, en lo que se refiere a creatividad. Las personas al cargo se la comercialización del Ultrachron, o el Moonswatch, han hecho el mismo esfuerzo creativo que Pablo con el Megamatic. No, miento, los de Longines tenían absolutamente todo lo que pudieran necesitar y Pablo tres o cuatro fotos malas.
Y para acabar, este hilo no se puede convertir en la enésima discusión sobre Crepas. A unos nos gustan, y nuestras razones tenemos. A otros no, y tienen sus razones, igual de válidas. Y a todos nos gustan los relojes, por eso estamos aquí bien a gusto.
Son copias de relojes que a una determinada persona (Pablo) le apasionan. Existen porque a esa persona le da la gana que existan. Son copias de relojes que hace años, décadas, ya no se fabrican (por cierto, con patentes más caducadas que el oficio de sereno). Son copias de relojes que, algunos de ellos no entraron en producción. Copias, a veces, de relojes que el 95% de los aficionados desconocen que un día existieron. Y ya desde hace muchos años, a veces son copias que, si Crepas no las hace, no las hace nadie, y cito en este caso a Ana. Esto es una verdad como un templo y es demostrable: L'Ocean, Decomaster, Megamatic y el próximo, que es absolutamente sorprendente. Otros son copias de relojes más conocidos y existen porque a Pablo le encantan, sin más explicación.
Unos Crepas han llevado más trabajo que otros. Pablo los dibuja, desconozco sobre qué soporte, entiendo que herramienta informática, trabaja los detalles, modifica lo que le viene en gana (o no) y consigue que otra persona o personas, al otro lado del mundo, transformen en algo tangible lo que a él le viene en gana comercializar. Steeldive ha llamado a esas mismas personas y les ha dicho: quiero lo mismo, con mi logo y este calibre. Una llamada de teléfono e ingreso en cuenta de una determinada cantidad de pasta. Eso es todo lo que ha hecho, lícitamente eso no lo dudo, Steeldive. Respecto a todo lo que hace Pablo yo solo siento dos cosas: envidia sana y admiración.
Luego, unos Crepas salen más agraciados, otros menos, unos sin defectos, otros con ellos, unos con mayor satisfacción para el cliente, otros con menos (en cualquiera de los aspectos posibles: el bien tangible, la atención al cliente o cualquiera otro).
La diferencia entre lo que hace Crepas y lo que ha hecho Longines con su Ultrachron, por poner un sólo ejemplo de entre cientos, es ninguna, en lo que se refiere a creatividad. Las personas al cargo se la comercialización del Ultrachron, o el Moonswatch, han hecho el mismo esfuerzo creativo que Pablo con el Megamatic. No, miento, los de Longines tenían absolutamente todo lo que pudieran necesitar y Pablo tres o cuatro fotos malas.
Y para acabar, este hilo no se puede convertir en la enésima discusión sobre Crepas. A unos nos gustan, y nuestras razones tenemos. A otros no, y tienen sus razones, igual de válidas. Y a todos nos gustan los relojes, por eso estamos aquí bien a gusto.