Javierrekp
Forer@ Senior
Sin verificar
Buenas a todos,
Hace ya algo más de un año despertó en mi esta afición de la relojería. Desde entonces mi padre encantado de ello, me mostró su deteriorada y pequeña colección de relojes, de la que ya se había olvidado y que hora la compartimos juntos. Algunos deteriorados y otros rotos, son relojes heredados, comprados o regalados, algunos de los cuales ya he mostrado en el foro.
Hoy os quería enseñar este SAVAR olvidado, el cual he restaurado y es por ello que estoy muy orgulloso. Antes de entrar en la historia de ESTE reloj, quería que conocierais un poco más de la marca SAVAR.
Savar proviene del acrónimo de los apellidos de su fundador, Santos Varela, quién comienza en los años 50 con la distribución de relojería gruesa en la ciudad de A Coruña. Poco después, su hijo Benilde Santos toma las riendas del negocio familiar en los años 60 y lo hace crecer con la venta de sus propios relojes y con la distribución de los relojes (despertadores y de sobremesa) de la marca portuguesa «Reguladora» para media España y norte de Portugal.
A finales de los años 60 la empresa comienza a montar relojes de pulsera con movimientos suizos y franceses, poniéndoles su marca. Según he leído, Savar hacía buenos contratos con los joyeros de la zona, ofreciendo unos márgenes de venta para el joyero bastante cuantiosos. Por ello, el propietario de la tienda compraba lotes de varias unidades, cuanto mayores más baratos le salían y era común ver los Savar en los escaparates ya que cada venta de uno de sus modelos era un buen negocio.
Postal de los años 90 en la que se ve el edificio en el que se ubicaban las instalaciones de Santos Varela, en la foto pertenecen al Banco Santander.
Savar se posicionó muy bien y creció. Hasta el punto de que el señor Benilde gozaba de buena posición y podría considerarse poseedor de un imperio por aquella época.
Según cuentan las historias coruñesas que recuerdan tiempos pasados, pasado un tiempo, el señor Benilde fue invitado una noche en el Gran Hotel de A Toxa en el cual había un casino. Se dice que aquella noche ganó una cuantiosa cifra y que es entonces donde comenzó lo malo. Despertó en él la ludopatía en la cual recorría casinos de la península y de la cual acabó siendo esclavo. Ese fue el fin de Savar, quizá también influiría la crisis del cuarzo, de eso ya no tengo datos. Pero lo que si que es cierto es que el señor Benilde calló en la pobreza y miseria por culpa del juego hasta que falleció.
Después de esta triste historia os presento mi reloj.
Este reloj forma parte de los regalados a mi padre, hace ya unos 35 años más o menos. El calibre es más antiguo, un Unitas 6310 de 1800A/h en la versión de 17 joyas con segundero a las 6 y remonte manual. Calibre bastante grande y bonito por cierto.
Por suerte el remontuar se encuentraba en perfecto estado.
Como se puede ver, pese a que la foto esta hecha con un movil malillo y una lupa, el calibre tiene un color rosita y es bastante simple.
Después de un buen lavado y aceitado, la rueda tercera sustituida porque el pivote estaba roto y corregida alguna desviación de la espiral (quizá en el proceso de desmonte) ahora luce una buena amplitud y un rate bastante bueno, unos -8s/d de media.
Aunque la historia de la marca haya terminado, este reloj es parte de su legado y de alguna forma es también un homenaje.
Espero que os guste.
PD: la correa es la que tenía cuando llegó a mis manos. Aunque no sea del mismo color de la caja en persona queda bien y es super cómoda.
Info de SAVAR obtenida de:
Hace ya algo más de un año despertó en mi esta afición de la relojería. Desde entonces mi padre encantado de ello, me mostró su deteriorada y pequeña colección de relojes, de la que ya se había olvidado y que hora la compartimos juntos. Algunos deteriorados y otros rotos, son relojes heredados, comprados o regalados, algunos de los cuales ya he mostrado en el foro.
Hoy os quería enseñar este SAVAR olvidado, el cual he restaurado y es por ello que estoy muy orgulloso. Antes de entrar en la historia de ESTE reloj, quería que conocierais un poco más de la marca SAVAR.
Savar proviene del acrónimo de los apellidos de su fundador, Santos Varela, quién comienza en los años 50 con la distribución de relojería gruesa en la ciudad de A Coruña. Poco después, su hijo Benilde Santos toma las riendas del negocio familiar en los años 60 y lo hace crecer con la venta de sus propios relojes y con la distribución de los relojes (despertadores y de sobremesa) de la marca portuguesa «Reguladora» para media España y norte de Portugal.
A finales de los años 60 la empresa comienza a montar relojes de pulsera con movimientos suizos y franceses, poniéndoles su marca. Según he leído, Savar hacía buenos contratos con los joyeros de la zona, ofreciendo unos márgenes de venta para el joyero bastante cuantiosos. Por ello, el propietario de la tienda compraba lotes de varias unidades, cuanto mayores más baratos le salían y era común ver los Savar en los escaparates ya que cada venta de uno de sus modelos era un buen negocio.
Postal de los años 90 en la que se ve el edificio en el que se ubicaban las instalaciones de Santos Varela, en la foto pertenecen al Banco Santander.
Savar se posicionó muy bien y creció. Hasta el punto de que el señor Benilde gozaba de buena posición y podría considerarse poseedor de un imperio por aquella época.
Según cuentan las historias coruñesas que recuerdan tiempos pasados, pasado un tiempo, el señor Benilde fue invitado una noche en el Gran Hotel de A Toxa en el cual había un casino. Se dice que aquella noche ganó una cuantiosa cifra y que es entonces donde comenzó lo malo. Despertó en él la ludopatía en la cual recorría casinos de la península y de la cual acabó siendo esclavo. Ese fue el fin de Savar, quizá también influiría la crisis del cuarzo, de eso ya no tengo datos. Pero lo que si que es cierto es que el señor Benilde calló en la pobreza y miseria por culpa del juego hasta que falleció.
Después de esta triste historia os presento mi reloj.
Este reloj forma parte de los regalados a mi padre, hace ya unos 35 años más o menos. El calibre es más antiguo, un Unitas 6310 de 1800A/h en la versión de 17 joyas con segundero a las 6 y remonte manual. Calibre bastante grande y bonito por cierto.
Por suerte el remontuar se encuentraba en perfecto estado.
Como se puede ver, pese a que la foto esta hecha con un movil malillo y una lupa, el calibre tiene un color rosita y es bastante simple.
Después de un buen lavado y aceitado, la rueda tercera sustituida porque el pivote estaba roto y corregida alguna desviación de la espiral (quizá en el proceso de desmonte) ahora luce una buena amplitud y un rate bastante bueno, unos -8s/d de media.
Aunque la historia de la marca haya terminado, este reloj es parte de su legado y de alguna forma es también un homenaje.
Espero que os guste.
PD: la correa es la que tenía cuando llegó a mis manos. Aunque no sea del mismo color de la caja en persona queda bien y es super cómoda.
Info de SAVAR obtenida de: