EMO, no es cuestión de que se sigan vendiendo sino de como evoluciona el volumen de negocio. ¿Cuántas personas escribían con pluma hace cuarenta años y cuántas ahora? Cuando empecé a la escuela todos los niños escribíamos con pluma y tintero. Eso implicaba unas ventas muy importantes. En cualquier papelería los tinteros, plumas y plumines ocupaban un lugar destacado. Hoy en día ya no es así.
para mi, esa es la clave. Evolucionamos. No sabemos a ciencia cierta si para mejor, pero lo hacemos.
El reloj de bolsillo está más cercano de lo que parece y aunque persiste un nostálgico coleccionista que básicamente los conserva para admirarlos en su casa, y aún que quedan marcas que los fabrican, no deja de ser un consumo absolutamente residual.
Por el hecho de que me gusten los relojes mecánicos, eso no me ofusca para ver que desde los relojes de Sol, clepsidras, y resto de sistemas y artilugios para medir el tiempo, la Humanidad ha ido abandonando impasiblemente todo sistema obsoleto, incorporándose mayoritariamente a sistemas más prácticos y eficaces.
Nos guste o no, y según nuestra edad, lo suframos más, el reloj mecánico tiene los días contados como objeto de uso cotidiano para el público y como negocio de producción en grandes tiradas. Sobrevivirá hasta no se sabe cuando, como objeto exquisito, de lujo y diferenciador, como ha venido ocurriendo, por ejemplo, con los coches clásicos, estas últimos ahora eliminados finalmente de su circulación mediante leyes que impiden usarlos si tienen una antigüedad + de 20 años (en Barcelona será así creo que el próximo año) Esperemos que a ningún gobierno se le ocurra que los relojes mecánicos contaminan, o cualquier otra cosa.
El vinilo casi había desaparecido del todo, y un milagro lo salvó momentáneamente del olvido, una moda por recuperar todo lo vintage, que en realidad lo que lleva detrás es la necesidad de que existan productos más exclusivos, con más carga emocional, etc
Pero al final desaparecerá también. Es cuestión de tiempo. La música comprimida es excesivamente práctica para competir contra ella. Quedarán al principio cuatro aficionados, que con el relevo generacional, considerarán más chic y retro cualquier otra cosa, e incluso si de verdad fuese un nicho de negocio importante que le preocupase a la industria, terminarían por inventar música comprimida que suene como un vinilo. Cuestión de tiempo y necesidad, nada más.
Es más, estoy convencido de que los Grupos relojeros más importantes ya invierten desde hace tiempo en acciones de empresas que fabrican smart watches. Es una solución clásica, seguir haciendo lo tuyo e invertir en la competencia de tu sector para que llegado el caso sólo tengas que cerrar la empresa pero no arruinarte.
Tampoco podemos descartar joint ventures entre empresas relojeras y de tecnología, ni fusiones ni adquisiciones.
Si toma cuerpo y carrerilla el smart watch, seguro que nos dan alguna que otra sorpresa.
Con todo y con ello, es pronto para saber si el sustituto real del reloj mecánico, será el smart watch o qué otro dispositivo será.
Y no hay que olvidar que el reloj mecánico ya quedó agonizante con el ataque de la industria relojera japonesa de los 60 hasta bien entrados los 80. La mayoría de marcas de las que hoy disfrutamos los aficionados, como ya sabéis, quebraron en su día y fueron revividas por grupos inversores que tras comprar dichas marcas, apostaron por invertir en renacerlas.
Por supuesto, en un Foro de aficionados al reloj mecánico (en su mayoría), cuesta incluso pensar así. Te puede la emoción como es natural. Aunque todo aquel que tenga una colección que ahora mismo se ha revalorizado, quizás debería plantearse que edad tiene ahora y si está convencido que seguirá siendo una buena herencia, o colchón para la jubilación. Por supuesto, sin considerar placer personal y emociones, sólo pensando en frío y sólo el que la tenga. Cuatro relojes normales de aficionado, no cuentan en esta reflexión.