rodri007
Habitual
Sin verificar
Cuando tenía 8 ó 9 años, en mi casa se comía casi todos los días cocido de garbanzos, como en la mayoría de las casas. Pero no era un cocido como los de ahora, que llevan "de todo".
Comer cocido...era comer solo garbanzos con algo de caldo, y de "segundo" un poco de tocino rancio y algo de rabo u oreja de cerdo.
Así es que cuando la semana iba mediada, había que buscarse la vida: al salir de la escuela, era dejar la cartera en casa, y empezar un peregrinaje por las casas de media familia: ? Qué comeis tita Paula???....cocido!!!,
qué comeis tita Joaquina ???...
cocido!!!. Y así varias más...." y tiro porque me toca".
Hasta que llegaba a la casa de mi tía ELIXA ( En realidad ella se llamaba Felixa, por su padre, mi tio Félix, pero le gustaba que la llamasen ELIXA), y era la misma pregunta: ? Tita ...... qué vais a comer?. Pero la respuesta no era ! Cocido!!!. La respuesta era otra pregunta....??? Qué quieres comer tú???. !!!! Huevo frito con patatas y pollo frito ! decia yo.
"pues vete a jugar a La Plaza, díselo a tu madre, y a las dos en punto aquí te quiero ver".
El reloj de La Plaza dónde jugaba nos marcaba las horas, apenas circulaba algún coche por el pueblo, que era bien grande, y las puertas de las casas siempre estaban abiertas.
El manjar de aquella comida lo disfrutaba como el niño que era,
me despedía con un beso - por comprobar su olor a jazmín, que se lo hacia ella machacando las flores de un jazmín enorme que habia en su patio- y el habitual recordatorio: " ven el Domingo a verme, que te dé tu peseta". Y era
claro que a esa cita dominguera nunca se podía faltar......
Y cuando ella faltó, al cabo de los años, yo lo sentí muy muy adentro. Y eso que ya era "un hombre".
Por eso, cuando al final de este verano ví en La Bahía un precioso "liliputiense", de esfera preciosa y marca ELIXA, me dió un vuelco el corazón. No me lo podía creer. Lo gané con poca disputa, con las ganas que tenía yo de "pelear alto" por ese reloj.
Pero es que no habían pasado ni cinco días cuando sale en otro pais otro reloj ELIXA, de las mismas medidas, parecida esfera y con unas "patas" que sorprenden en ese tipo de relojes (33 mm).
Llegaron los dos casi a la vez. Los limpié con esmero y los llevé al relojero. Cambio de plexi, una correa adecuada y de paso como
se le quita el plexi por abajo, los metió en la caja de ultrasonidos ( o como se llame).
Quedaron más limpios que un San Luis y yo mas contento que un perro con dos colas...... !! Lo que es la vida !!!.
Espero que os gusten los relojes,
especialmente a las chicas....que
son pequeños. Y espero que a todos os haya gustado esta cotidiana historia. ??? O todo fue un sueño.?A que lo soñé todo??.
No importa....no hubo pesadillas, y como todos los de la infancia, este sueño fue un placer volver a vivirlo.
Un cordial abrazo para tod@s.
Bernardo.
Comer cocido...era comer solo garbanzos con algo de caldo, y de "segundo" un poco de tocino rancio y algo de rabo u oreja de cerdo.
Así es que cuando la semana iba mediada, había que buscarse la vida: al salir de la escuela, era dejar la cartera en casa, y empezar un peregrinaje por las casas de media familia: ? Qué comeis tita Paula???....cocido!!!,
qué comeis tita Joaquina ???...
cocido!!!. Y así varias más...." y tiro porque me toca".
Hasta que llegaba a la casa de mi tía ELIXA ( En realidad ella se llamaba Felixa, por su padre, mi tio Félix, pero le gustaba que la llamasen ELIXA), y era la misma pregunta: ? Tita ...... qué vais a comer?. Pero la respuesta no era ! Cocido!!!. La respuesta era otra pregunta....??? Qué quieres comer tú???. !!!! Huevo frito con patatas y pollo frito ! decia yo.
"pues vete a jugar a La Plaza, díselo a tu madre, y a las dos en punto aquí te quiero ver".
El reloj de La Plaza dónde jugaba nos marcaba las horas, apenas circulaba algún coche por el pueblo, que era bien grande, y las puertas de las casas siempre estaban abiertas.
El manjar de aquella comida lo disfrutaba como el niño que era,
me despedía con un beso - por comprobar su olor a jazmín, que se lo hacia ella machacando las flores de un jazmín enorme que habia en su patio- y el habitual recordatorio: " ven el Domingo a verme, que te dé tu peseta". Y era
claro que a esa cita dominguera nunca se podía faltar......
Y cuando ella faltó, al cabo de los años, yo lo sentí muy muy adentro. Y eso que ya era "un hombre".
Por eso, cuando al final de este verano ví en La Bahía un precioso "liliputiense", de esfera preciosa y marca ELIXA, me dió un vuelco el corazón. No me lo podía creer. Lo gané con poca disputa, con las ganas que tenía yo de "pelear alto" por ese reloj.
Pero es que no habían pasado ni cinco días cuando sale en otro pais otro reloj ELIXA, de las mismas medidas, parecida esfera y con unas "patas" que sorprenden en ese tipo de relojes (33 mm).
Llegaron los dos casi a la vez. Los limpié con esmero y los llevé al relojero. Cambio de plexi, una correa adecuada y de paso como
se le quita el plexi por abajo, los metió en la caja de ultrasonidos ( o como se llame).
Quedaron más limpios que un San Luis y yo mas contento que un perro con dos colas...... !! Lo que es la vida !!!.
Espero que os gusten los relojes,
especialmente a las chicas....que
son pequeños. Y espero que a todos os haya gustado esta cotidiana historia. ??? O todo fue un sueño.?A que lo soñé todo??.
No importa....no hubo pesadillas, y como todos los de la infancia, este sueño fue un placer volver a vivirlo.
Un cordial abrazo para tod@s.
Bernardo.
:. Yo no he conocido esos tiempos, mi suegro era agricultor en la Armuña en Salamanca, tenían tierras que al menos daban un poco más que para comer y por desgracia ese no era el caso de todo el mundo en el pueblo, había gente que pasaba hambre y dependía de la caridad de los vecinos, pero en casa de mi suegro había cocido día sí y día también por lo que muchos días se iba al campo con un mendrugo de pan por no comer los dichosos garbanzos que hoy irónicamente tienen denominación de origen y son bastante caros 
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