
Rjmaa
Habitual
Sin verificar
Viendo la buena recepción que ha tenido el hilo “mi experiencia en watches and wonders”, me lanzo a escribir sobre el otro evento al que asistí en Ginebra este mes de abril. Prometo muchas fotos ya que son relojes, para mi interesantes y preciosos a partes iguales.
Time to Watches es un evento/feria comercial de relojería que se celebra en Ginebra. Me imagino que, tal y como ha sido este año, siempre lo intentan hacer coincidir con Watches & Wonders. Este 2025 ha contado con más de 70 empresas del sector y los precios de las piezas iban entre los 99 francos hasta los 78.000 francos.
De acuerdo con su web, es una feria enfocada en mostrar la creatividad, innovación y diseño dentro del mundo de la relojería. Está especialmente dedicada para marcas independientes o emergentes aunque también hay alguna marca más establecida.
Principales diferencias con Watches and Wonders: Tipos de marcas, cercanía, ambiente y no todo son novedades.
Tipos de marcas: Para mí lo más atractivo de la feria, ya que son marcas pequeñas que la mayoría no tienen punto de venta en España, o ni siquiera tienen tienda y solamente venden online. Esta categoría la divido en tres: Marcas independientes que ya llevan tiempo en el mercado como Reservoir, Krayon, Beaubleau… Nuevos diseñadores o startups como Denisson, De Carvalho… y por último marcas más consolidadas pero que buscan un público joven o diferente o tal vez solo quieran estar en Ginebra y no puedas permitirse irse a Watches and Wonders en esta categoría se encuentra Laco o Sinn.
Ambiente: El espacio elegido es Villa Sarasin, un palacete amarillo resuntón con un jardín apacible para comer y tomar el sol entre visita y visita. Las marcas están en las diferentes habitaciones/estancias del lugar muy bien expuestas. Es muy divertido ir atravesando sus 4 plantas y su anexo porque no sabes lo que te vas a encontrar en la siguiente habitación. Pese a que todo está bien indicado, hay personal de staff etc. lo mejor es perderse por el palacete dejándote sorprender.
Para mí lo más relevante es el cómo te presentan los relojes las marcas y la comunicación que puedes tener con ellos. Todo cercano, fácil, amable, desenfadado, resuelven todas las dudas, los puedes probar y fotografiar sin problemas, puedes hablar durante mucho tiempo con las personas sin ningún problema… no se nota prisa, no se nota el estrés, todo es amigable, desenfadado e ilusionante tanto para la gente que expone como para los visitantes.
En W&W suelen ser comerciales, directivos y trabajadores de todo tipo lo que están en el stand, en TtoW, son los dueños de la marca, los diseñadores, el CEO, el director, el responsable de ventas, el relojero artesano… Ahí está la gran diferencia, cuando les pides que te expliquen el reloj, están hablando de su creación de su hijito, no de un producto que ha decidido lanzar la dirección. Para mi el valor fundamental de este evento.
Los relojes: Hay de todo, como he comentado anteriormente algunas marcas con precios de 99 francos (como Mathey-Tissot) y otras como Breda de 58.000 francos sin impuestos. Suelen ser relojes para gente diferente, interpretan de manera menos comercial las tendencias, buscan un nicho especial y definitivamente no son para todo el mundo. En ello coincidían casi todos, el comentario que más me repetían al intentar venderme una pieza era “cuando vas por la calle ves 10 submariner, 5 omega, 2 AP y 1 Hublot, nadie se va a sorprender de esos relojes porque ya están muy vistos”. Y tienen toda la razón, en el aeropuerto de Ginebra me fijé en las muñecas de los asistentes y todo eran grandes marcas, por lo que a los que os gusten los relojes “raros” esto es el paraíso.
El precio al evento son 20€, realmente barato, si costara el doble volvería de nuevo, tienes acceso a talleres, actividades complementarias, mucho material, regalos, revistas y sobre todo poder comprar relojes sin gastos de envío ni impuestos aduaneros…
Conclusión: En Watches and Wonders disfruté muchísimo, todo es impresionante y ver las novedades en la vida real antes de verlas en digital mola mucho. Pero en Time to Watches me sentí como en una tienda de caramelos o un parque de atracciones. El poder probarte absolutamente todas las piezas y que el fundador de la marca esté 30 minutos hablando contigo es una experiencia mucho mejor.
Watches and Wonders es como ir al Museo del Prado, hay que ir, pero si eres un loco de los relojes TtoW es como ir al taller del artista a ver cómo pinta y hablar con él.
No dudeis en pedirme más información sobre marcas, explicar algún reloj, más fotos etc.
Time to Watches es un evento/feria comercial de relojería que se celebra en Ginebra. Me imagino que, tal y como ha sido este año, siempre lo intentan hacer coincidir con Watches & Wonders. Este 2025 ha contado con más de 70 empresas del sector y los precios de las piezas iban entre los 99 francos hasta los 78.000 francos.
De acuerdo con su web, es una feria enfocada en mostrar la creatividad, innovación y diseño dentro del mundo de la relojería. Está especialmente dedicada para marcas independientes o emergentes aunque también hay alguna marca más establecida.
Principales diferencias con Watches and Wonders: Tipos de marcas, cercanía, ambiente y no todo son novedades.
Tipos de marcas: Para mí lo más atractivo de la feria, ya que son marcas pequeñas que la mayoría no tienen punto de venta en España, o ni siquiera tienen tienda y solamente venden online. Esta categoría la divido en tres: Marcas independientes que ya llevan tiempo en el mercado como Reservoir, Krayon, Beaubleau… Nuevos diseñadores o startups como Denisson, De Carvalho… y por último marcas más consolidadas pero que buscan un público joven o diferente o tal vez solo quieran estar en Ginebra y no puedas permitirse irse a Watches and Wonders en esta categoría se encuentra Laco o Sinn.
Ambiente: El espacio elegido es Villa Sarasin, un palacete amarillo resuntón con un jardín apacible para comer y tomar el sol entre visita y visita. Las marcas están en las diferentes habitaciones/estancias del lugar muy bien expuestas. Es muy divertido ir atravesando sus 4 plantas y su anexo porque no sabes lo que te vas a encontrar en la siguiente habitación. Pese a que todo está bien indicado, hay personal de staff etc. lo mejor es perderse por el palacete dejándote sorprender.
Para mí lo más relevante es el cómo te presentan los relojes las marcas y la comunicación que puedes tener con ellos. Todo cercano, fácil, amable, desenfadado, resuelven todas las dudas, los puedes probar y fotografiar sin problemas, puedes hablar durante mucho tiempo con las personas sin ningún problema… no se nota prisa, no se nota el estrés, todo es amigable, desenfadado e ilusionante tanto para la gente que expone como para los visitantes.
En W&W suelen ser comerciales, directivos y trabajadores de todo tipo lo que están en el stand, en TtoW, son los dueños de la marca, los diseñadores, el CEO, el director, el responsable de ventas, el relojero artesano… Ahí está la gran diferencia, cuando les pides que te expliquen el reloj, están hablando de su creación de su hijito, no de un producto que ha decidido lanzar la dirección. Para mi el valor fundamental de este evento.
Los relojes: Hay de todo, como he comentado anteriormente algunas marcas con precios de 99 francos (como Mathey-Tissot) y otras como Breda de 58.000 francos sin impuestos. Suelen ser relojes para gente diferente, interpretan de manera menos comercial las tendencias, buscan un nicho especial y definitivamente no son para todo el mundo. En ello coincidían casi todos, el comentario que más me repetían al intentar venderme una pieza era “cuando vas por la calle ves 10 submariner, 5 omega, 2 AP y 1 Hublot, nadie se va a sorprender de esos relojes porque ya están muy vistos”. Y tienen toda la razón, en el aeropuerto de Ginebra me fijé en las muñecas de los asistentes y todo eran grandes marcas, por lo que a los que os gusten los relojes “raros” esto es el paraíso.
El precio al evento son 20€, realmente barato, si costara el doble volvería de nuevo, tienes acceso a talleres, actividades complementarias, mucho material, regalos, revistas y sobre todo poder comprar relojes sin gastos de envío ni impuestos aduaneros…
Conclusión: En Watches and Wonders disfruté muchísimo, todo es impresionante y ver las novedades en la vida real antes de verlas en digital mola mucho. Pero en Time to Watches me sentí como en una tienda de caramelos o un parque de atracciones. El poder probarte absolutamente todas las piezas y que el fundador de la marca esté 30 minutos hablando contigo es una experiencia mucho mejor.
Watches and Wonders es como ir al Museo del Prado, hay que ir, pero si eres un loco de los relojes TtoW es como ir al taller del artista a ver cómo pinta y hablar con él.
No dudeis en pedirme más información sobre marcas, explicar algún reloj, más fotos etc.