En alguna ocasión he mencionado mi admiración por los relojes Eterna.
Una de las marcas relojeras menos valorada y con un peso importante en la industria de la relojería.
Por este motivo, me gustaría compartir un poco de su historia, que creo, es interesante.
Fundada en 1856 en Grenchen, Suiza, Eterna se estableció rápidamente como una de las casas relojeras más innovadoras del mundo. A lo largo de su historia, Eterna se dedicó tanto a la producción de relojes terminados como al desarrollo de movimientos mecánicos. Fue precisamente esta segunda actividad la que llevó a la creación de ETA.
En sus inicios, Eterna produjo sus propios movimientos y componentes. Para fortalecer su capacidad de fabricación y atender a la creciente demanda de movimientos de calidad, en 1906 se fundó la división Eterna-Werke, que más tarde se convertiría en ETA. Esta división comenzó como un proveedor interno, pero rápidamente creció para servir a otras marcas.
Eterna es conocida por varias contribuciones clave a la relojería, que sentaron las bases de lo que sería el estándar de calidad en ETA.
1. El Rotor de Rodamiento de Bolas (1948):Este invento revolucionó los movimientos automáticos. Antes de esto, los rotores eran propensos al desgaste debido a la fricción. Al introducir un sistema de rodamiento de bolas, Eterna mejoró la durabilidad, eficiencia y suavidad del movimiento automático. Este avance no solo consolidó la reputación de Eterna, sino que también influyó en el diseño de los movimientos automáticos de ETA en los años siguientes.
2. Movimientos Base de Alta Calidad:Eterna desarrolló movimientos fiables y versátiles que luego se estandarizaron en ETA. Por ejemplo, el ETA 2824-2, uno de los calibres automáticos más icónicos y utilizados del mundo, tiene sus raíces en la ingeniería original de Eterna.
En la década de 1930, Eterna-Werke se escindió como una entidad separada para enfocarse exclusivamente en la fabricación de movimientos. Con el tiempo, ETA pasó a formar parte de Swatch Group, pero su herencia siempre estará ligada a Eterna.
ETA se convirtió en el proveedor líder de movimientos estándar y personalizados para marcas de relojes en todo el mundo, desde marcas de lujo hasta fabricantes de relojes accesibles. Los movimientos ETA son conocidos por su fiabilidad, precisión y facilidad de mantenimiento, características que fueron perfeccionadas durante la etapa inicial bajo Eterna.
Aunque ETA ahora opera de forma independiente como parte de Swatch Group, Eterna sigue produciendo relojes con sus propios movimientos y continúa destacándose como una marca que combina innovación y tradición. Su línea de relojes “1948”, que incluye modelos como el Moon Phase COSC Triple Date, rinde homenaje a su rica historia, especialmente al revolucionario sistema de rodamiento de bolas que marcó el inicio de una nueva era en la relojería.
En resumen, Eterna no solo dejó su huella en la historia con relojes de calidad, sino que también fundó ETA, una institución que ha influido profundamente en la industria relojera global. La conexión entre ambas sigue siendo un testimonio del impacto duradero de Eterna en la relojería.