Antolin
Habitual
Sin verificar
Quiero compartir una reflexión a ver que opináis al respecto. Hace tiempo que veo muchos post que hablan sobre la adecuación del tamaño de la pluma a la mano... si tal modelo es muy grande para mí o aquel otro es demasiado pequeño. Yo sin embargo, tengo la sensación contraría.
Desde que hace más de 20 años me regalaron una MB 149, cada vez que la cojo (reconozco que solo la uso en casa, pues es un poco excesiva para llevarla encima y además si la pierdo me muero), cada vez digo, es como si se produjera un toque de atención, como si exigiera una atención especial. De manera que, de un acto automático al escribir, donde uno solo piensa en lo que esta poniendo en el papel, te obligara a reparar en el instrumento y te obligara a pensar cómo lo estas escribiendo. Dicho de otro modo, para mí es escribir con una pluma como la 149 es como una ceremonia que me hace hacer hasta mejor letra. Escribo más despacio, recreándome en la caligrafía. Por eso estoy deseando comprarme un pajarraco M1000 porque creo que tiene que ser lo mismo (aunque con la racha de compras que llevo no sé me la voy a poder comprar en un tiempo).
Estoy de acuerdo que para el uso de batalla diario pueda resultar incómoda, pero para escribir tranquilamente en casa, una pluma gorda, es una gozada, e intuyo que que con un punto grueso (mi 149 es EF) aún más. Por eso creo que el tamaño sí que importa.
¿A alguno le pasa lo mismo?
Desde que hace más de 20 años me regalaron una MB 149, cada vez que la cojo (reconozco que solo la uso en casa, pues es un poco excesiva para llevarla encima y además si la pierdo me muero), cada vez digo, es como si se produjera un toque de atención, como si exigiera una atención especial. De manera que, de un acto automático al escribir, donde uno solo piensa en lo que esta poniendo en el papel, te obligara a reparar en el instrumento y te obligara a pensar cómo lo estas escribiendo. Dicho de otro modo, para mí es escribir con una pluma como la 149 es como una ceremonia que me hace hacer hasta mejor letra. Escribo más despacio, recreándome en la caligrafía. Por eso estoy deseando comprarme un pajarraco M1000 porque creo que tiene que ser lo mismo (aunque con la racha de compras que llevo no sé me la voy a poder comprar en un tiempo).
Estoy de acuerdo que para el uso de batalla diario pueda resultar incómoda, pero para escribir tranquilamente en casa, una pluma gorda, es una gozada, e intuyo que que con un punto grueso (mi 149 es EF) aún más. Por eso creo que el tamaño sí que importa.
¿A alguno le pasa lo mismo?