Prensa RE
Forer@ Senior
Sin verificar
El Fifty Fathoms es uno de los modelos imprescindibles de Blancpain quien ahora lo reinterpreta en una caja de oro rojo con esfera de cerámica azul. A pesar de lo complejo que resulta trabajarla y fabricarla, la apuesta de Blancpain por la cerámica tácnica se debe a la profundidad cromática que le permite obtener.
Así, el nuevo Fifty Fathoms Automatique presenta reflejos de cobalto que contrastan el "soleil" del centro de la esfera con el disco horario mate. Sus números, índices y agujas recubiertos de material luminiscente, su cristal de zafiro resistente a los arañazos y ligeramente abombado, y su bisel giratorio unidireccional de borde estriado, son detalles que nos remontan a los orígenes de este reloj.
Dotado de una caja de 45 mm de diámetro y hermético hasta 300 metros, el nuevo Fifty Fathoms Automatique late al ritmo del movimiento 1315. La larga búsqueda de la precisión y el rendimiento ha dado como resultado un diseño especialmente orientado a equipar relojes de vocación deportiva.
Blancpain lo ha provisto de una masa oscilante de oro rojo muy denso que asegura una gran eficacia de carga para proporcionar una reserva de marcha óptima de cinco días cuando el reloj esté totalmente armado. Como guiño a la historia del Fifty Fathoms, el rotor está abierto. Esta geometría, importante en la época, permitía relajar la masa oscilante para evitar que el movimiento se deteriorara en caso de golpe.
Así, el nuevo Fifty Fathoms Automatique presenta reflejos de cobalto que contrastan el "soleil" del centro de la esfera con el disco horario mate. Sus números, índices y agujas recubiertos de material luminiscente, su cristal de zafiro resistente a los arañazos y ligeramente abombado, y su bisel giratorio unidireccional de borde estriado, son detalles que nos remontan a los orígenes de este reloj.
Dotado de una caja de 45 mm de diámetro y hermético hasta 300 metros, el nuevo Fifty Fathoms Automatique late al ritmo del movimiento 1315. La larga búsqueda de la precisión y el rendimiento ha dado como resultado un diseño especialmente orientado a equipar relojes de vocación deportiva.
Blancpain lo ha provisto de una masa oscilante de oro rojo muy denso que asegura una gran eficacia de carga para proporcionar una reserva de marcha óptima de cinco días cuando el reloj esté totalmente armado. Como guiño a la historia del Fifty Fathoms, el rotor está abierto. Esta geometría, importante en la época, permitía relajar la masa oscilante para evitar que el movimiento se deteriorara en caso de golpe.