Jesús
Gran Cruz al Mérito Forero
Sin verificar
Gran cruz
El post completo en https://nadaesgratis.es/garicano/bancos-malos-y-malos-bancos-de-nuevo-nada-es-gratis
"Conclusión
En definitiva, los dos esquemas generan graves riesgos fiscales para el estado. Por ello, en cualquiera de los dos casos es importantísima la forma en que se implementa; en este sentido creemos que las reglas que hemos expuesto en NeG desde el principio siguen operativas:
1. Con instituciones insolventes, como la CAM, es mejor no hacer ninguna de las dos cosas, y dejarla caer; el riesgo de contagio es menor, dado que el mercado ya sabe que la institución es insolvente; los beneficios, a corto (mejora de la solvencia del Estado) y a largo plazo (reducción del riesgo moral que supone el que los gestores e inversores piensan que juegan con garantía de que no van a perder) son enormes, y cuánto más pasa el tiempo más claros: si continúan los rescates del sistema financiero, los fundamentos del sistema capitalista se resquebrajan- desde pago de salarios hasta inversiones, emisiones de deuda, etc. toda el mecanismo de asignación de recursos y especialmente de capital, resulta distorsionada.
2. Con las solventes, o bien el banco malo o el Esquema de Protección de Activos pueden funcionar, con dos condiciones que nos hemos cansado de exponer hasta la saciedad
a. Si hay capital del estado, debe haber nuevos gestores. El que la hace, la paga. No pueden los gestores estar pensando en justificar decisiones pasadas o proteger sus carreras
b. La due dilligence, en cualquiera de los dos casos, es crucial. No es de recibo, y puede provocar una conmoción en el país, una verdadera revolución, que las valoraciones de los activos malos se dejen a precio de libro (las infladas tasaciones) de tal modo que terminemos socializando las pérdidas y privatizando beneficios. Hay que asegurar que todos los activos, en cualquier caso, se valoran correctamente."
"Conclusión
En definitiva, los dos esquemas generan graves riesgos fiscales para el estado. Por ello, en cualquiera de los dos casos es importantísima la forma en que se implementa; en este sentido creemos que las reglas que hemos expuesto en NeG desde el principio siguen operativas:
1. Con instituciones insolventes, como la CAM, es mejor no hacer ninguna de las dos cosas, y dejarla caer; el riesgo de contagio es menor, dado que el mercado ya sabe que la institución es insolvente; los beneficios, a corto (mejora de la solvencia del Estado) y a largo plazo (reducción del riesgo moral que supone el que los gestores e inversores piensan que juegan con garantía de que no van a perder) son enormes, y cuánto más pasa el tiempo más claros: si continúan los rescates del sistema financiero, los fundamentos del sistema capitalista se resquebrajan- desde pago de salarios hasta inversiones, emisiones de deuda, etc. toda el mecanismo de asignación de recursos y especialmente de capital, resulta distorsionada.
2. Con las solventes, o bien el banco malo o el Esquema de Protección de Activos pueden funcionar, con dos condiciones que nos hemos cansado de exponer hasta la saciedad
a. Si hay capital del estado, debe haber nuevos gestores. El que la hace, la paga. No pueden los gestores estar pensando en justificar decisiones pasadas o proteger sus carreras
b. La due dilligence, en cualquiera de los dos casos, es crucial. No es de recibo, y puede provocar una conmoción en el país, una verdadera revolución, que las valoraciones de los activos malos se dejen a precio de libro (las infladas tasaciones) de tal modo que terminemos socializando las pérdidas y privatizando beneficios. Hay que asegurar que todos los activos, en cualquier caso, se valoran correctamente."