El símbolo del infinito se representa como el número ocho colocado en horizontal, es decir, como dos lazos que no tienen principio ni fin. Se asocia a la idea del equilibrio entre el mundo espiritual y el material, y también como símbolo de viaje de aprendizaje continuo.
Acabo de llegar a mis ocho mil mensajes y creo que ese símbolo representa mi viaje constante de aprendizaje en este foro. Cuando aterricé por aquí por pura casualidad, poco podía imaginarme que se convertiría en un lugar donde encontrar entretenimiento, camaradería y, lo más importante, un foco continuo de conocimiento. No soy nada experto en mecánica. De hecho, soy todo lo contrario a la típica persona que cuando la lavadora se estropea bucea en sus tripas para cambiarle piezas que ni conozco el nombre. Ese tipo de operaciones domésticas no van conmigo y menos el abrir la trasera de un reloj para reparar o ajustar por mi cuenta lo que sea que haya que ajustar. Cuando leo las explicaciones de muchos foreros acerca de porqué el reloj no funciona como debiera, me quedo maravillado de que esta comunidad reúna a tal cantidad de personas interesantes y capaces.
Soy muy observador e intuitivo. Mi trabajo diario como formador de inglés a todo tipo de alumnos me ha enseñado mucho porque todas las personas tienen un héroe dentro de sí mismas, un conocedor de un tema que otros desconocen, una habilidad de las que los demás carecen, una vibración que resuena en sintonía si se ajusta a la frecuencia adecuada. Me gusta escuchar a la gente, saber lo que piensan y nutrirme de nuevas ideas, perspectivas, opiniones. Aprender es fundamental y cuando alguien piense que ya lo sabe todo es que no ha aprendido nada en absoluto.
Relojes Especiales es un entretejido de hilos de múltiples calidades, longitudes y espesores sobre los que hacer funambulismo mientras trasnochamos por el insomnio. Hoy os doy las gracias a todos y cada uno de los componentes de este magnífico foro por haber creado juntos una comunidad excepcional de la mano de Antón, persona a la que respeto y admiro por la calidad con la que lidera las riendas de este lugar. La sociedad de hoy en día tiende a banalizar situaciones debido a la poca paciencia. Se lee poco, se consume todo rápido, se analiza menos y se recrea en la superficialidad. Las consecuencias de todo ello aparecerán en unos años y espero que entonces la rueda vuelva a girar y se abandonen ciertos hábitos poco saludables para el intelecto y se vuelva a la valoración del esfuerzo del aprendizaje como camino indispensable para la superación. Está por ver, pero algo tiene que cambiar porque la sociedad planteada en el libro 1984 ha llegado ya.
Lo que también queda por ver es los ocho relojes que os traigo. Los habituales del hilo diario los habéis visto en muchas ocasiones porque son los que generalmente utilizo. Es la famosa caja A, pero en este caso, tengo que añadir que hay cinco piezas más que deberían pertenecer al grupo y que añadiré al final.
Los dos primeros son los que considero de vestir, relojes que uso cuando me quito los sempiternos tejanos y me pongo la americana.
Me gustaría comenzar por el último que llegó, el Tissot Gentleman Gold Rose 18K. Lo he comprado para conmemorar el fallecimiento de mi madre el pasado noviembre y el nacimiento de mi nueva nieta el próximo mes de Mayo. No hace falta decir el valor sentimental que esta pieza tiene para mí.
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El Daniel Jeanrichard TV screen chronograph es otra de las piezas especiales en mi colección. No lo uso demasiado, eso es cierto, pero cuando lo hago me transmite muy buenas sensaciones y me gusta contemplar su esfera. Es el único cuadrado o rectangular que tengo porque no me llaman la atención, pero en este caso fue amor a primera vista.
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El Roamer Searock lleva conmigo ya más de dos años y es uno de mis preferidos. Muchos lo comparan con el Omega Aquaterra y en cierta manera se parecen. Es una pieza muy bien construida y una marca que no todos conocen, por lo que encaja muy bien dentro de mis preferencias.
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El Hamilton jazzmaster viewmatic es uno de los pocos que tengo con esfera blanca. Lo llevó mi hijo Alex en su boda antes de que el bichito de los Apple watch le lavara el cerebro. Es un reloj elegante y que queda bien con cualquier vestimenta y que se adapta a todo simplemente cambiando la correa.
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Tag Heuer Formula I GMT, un reloj que siempre me gusta llevar y que tiene buena presencia en muñeca. La marca siempre es criticada o sale desfavorecida en comparaciones con otras, pero también tengo el Aquaracer desde hace casi veinte años y jamás me ha dado un problema. Como dije, no soy un entendido en relojes y solo compro lo que me entra por los ojos.
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Mi Seiko Presage Sharp Edge GMT fue el auto regalo de mis 60 cumpleaños. Es mi otro GMT a pesar de que no es una complicación que suela usar. Me hipnotiza el profundo azul de su esfera texturizada y lo único que diría en su contra es que le sobra un poco de altura a la caja para mi gusto.
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Y vamos con dos divers. El primero es el Crepas Batiscafo, un reloj muy cómodo, con parecido al 62mas y que nunca me cansaría de llevar. Tengo una esfera de recambio de color verde degradado para cambiarle el aspecto cuando me canse de la negra. Dos en uno.
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Y el Mido Ocean Star, un reloj que no me cansaría de recomendar a cualquiera que quisiera un diver fiable, cómodo, sencillo y bonito. Muchas veces he pensado en comprarme el de color azul con brazalete, pero siempre me lo repienso porque ya tengo este y hay muchos peces en el mar. Mido es una marca muy buena y la lástima es que no tenga apenas representación en España.
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Y llegamos a los que se ubican en la otra caja que bien podrían estar en la primera.
Primero los tres divers. Armida de bronce. Seiko Sport 5 y Nivrel Ocean Rock.
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Y ahora dos piezas que sirven para casi cualquier ocasión, Certina DS Action y, cómo no, el Citizen Tsuyosa, al que hace poco le cambié el brazalete por el caucho para darle un aspecto más deportivo.
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Y no mucho más. Es un placer pertenecer a esta comunidad que me permite alimentar mi afición y además seguir aprendiendo a diario con hilos sorprendentes a veces, eruditos otras y entretenidos siempre. Gracias por soportar mis historias, mis narraciones, los comentarios, las fotos y sobre todo, por ser una comunidad tan estupenda. Un abrazo a todos y nos leemos por estas páginas.
