eggman
Forer@ Senior
Sin verificar
Hola amigos,
Soy Jorge, de la Ciudad de México, tengo 29 años, soy nuevo en este foro (aunque este es mi tercer post) y quiero presentarme.
Soy un nuevo aficionado a la relojería seria, siempre me han llamado la atención los relojes, es un gusto heredado por mi padre. Tengo un par de Longines, ambos regalos por mi boda, un Lungomare (regalo de mi esposa) y un Dolce Vita (regalo de mi padre).
Hace un par de meses me entró esta extraña enfermedad por los relojes de "verdad"... y navegando en internet me topé con este gran foro, del cual estoy aprendiendo muchísimo sobre marcas, estilos, léxico, etc...
En fin, estoy en búsqueda de mi primer gran compra, para festejar mi cumpleaños número treinta 🙂:dnz: quiero regalarme un Omega Speedmaster Pro, su estilo y sobre todo los innumerables comentarios positivos me hicieron decidirme por tal modelo.
Comentando mi idea con mi padre, me contó una historia que yo ya conocía, pero que con el paso de los años había olvidado...
Cuando yo era muy pequeño, mi padre (eterno enamorado de la marca Omega) había decidido comprarse un reloj, y su elección fue el Omega Speedmaster Profesional, con fechador. Según me cuenta, tenía un par de meses con el reloj, todas las mañanas lo sacaba de su estuche para darle cuerda, se lo ponía, se lo miraba en el espejo y volvía a guardarlo con todo cuidado. Mi padre en aquella época se transportaba en camión a su trabajo, y no quería dar "tentaciones" a los amantes de lo ajeno...
Algún mal día de aquellos, mi padre siguió su rutina de todas las mañanas, y al estar a punto de salir de casa, no encontró su reloj "del diario" por lo que decidió sacar a pasear al Speedy "por un día pasa nada..." -pensó-, desafortunadamente, al subirse al camión fue asaltado y por supuesto, la víctima fue el speedy. Desde entonces mi padre no volvió a comprarse uno, decía que era la maldición de los Speedy (ya que años atrás había extraviado otro).
En fin, después de escuchar tal historia me entró la idea de obsequiar a mi padre con un Speedy como el que le fue robado. Aquello sucedió alrededor de 1980 (un par de años más o un par de años menos).
Bueno, mi pregunta es: ¿Alguno de ustedes, conocedores, podrá orientarme respecto a cómo se veía el Speedy en aquella época?, ¿Tendrán algunas fotos que pudieran compartirme?. ¿En que ha cambiado el Speedmaster Pro desde aquellos años al modelo actual?, ¿En dónde podré encontrar un modelo de aquellos años?
Saludos desde México y gracias por su apoyo.
Jorge
Soy Jorge, de la Ciudad de México, tengo 29 años, soy nuevo en este foro (aunque este es mi tercer post) y quiero presentarme.
Soy un nuevo aficionado a la relojería seria, siempre me han llamado la atención los relojes, es un gusto heredado por mi padre. Tengo un par de Longines, ambos regalos por mi boda, un Lungomare (regalo de mi esposa) y un Dolce Vita (regalo de mi padre).
Hace un par de meses me entró esta extraña enfermedad por los relojes de "verdad"... y navegando en internet me topé con este gran foro, del cual estoy aprendiendo muchísimo sobre marcas, estilos, léxico, etc...
En fin, estoy en búsqueda de mi primer gran compra, para festejar mi cumpleaños número treinta 🙂:dnz: quiero regalarme un Omega Speedmaster Pro, su estilo y sobre todo los innumerables comentarios positivos me hicieron decidirme por tal modelo.
Comentando mi idea con mi padre, me contó una historia que yo ya conocía, pero que con el paso de los años había olvidado...
Cuando yo era muy pequeño, mi padre (eterno enamorado de la marca Omega) había decidido comprarse un reloj, y su elección fue el Omega Speedmaster Profesional, con fechador. Según me cuenta, tenía un par de meses con el reloj, todas las mañanas lo sacaba de su estuche para darle cuerda, se lo ponía, se lo miraba en el espejo y volvía a guardarlo con todo cuidado. Mi padre en aquella época se transportaba en camión a su trabajo, y no quería dar "tentaciones" a los amantes de lo ajeno...
Algún mal día de aquellos, mi padre siguió su rutina de todas las mañanas, y al estar a punto de salir de casa, no encontró su reloj "del diario" por lo que decidió sacar a pasear al Speedy "por un día pasa nada..." -pensó-, desafortunadamente, al subirse al camión fue asaltado y por supuesto, la víctima fue el speedy. Desde entonces mi padre no volvió a comprarse uno, decía que era la maldición de los Speedy (ya que años atrás había extraviado otro).
En fin, después de escuchar tal historia me entró la idea de obsequiar a mi padre con un Speedy como el que le fue robado. Aquello sucedió alrededor de 1980 (un par de años más o un par de años menos).
Bueno, mi pregunta es: ¿Alguno de ustedes, conocedores, podrá orientarme respecto a cómo se veía el Speedy en aquella época?, ¿Tendrán algunas fotos que pudieran compartirme?. ¿En que ha cambiado el Speedmaster Pro desde aquellos años al modelo actual?, ¿En dónde podré encontrar un modelo de aquellos años?
Saludos desde México y gracias por su apoyo.
Jorge