Goldoff
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Tripulación
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Que no estaba muerto (no-no), que estaba de parranda... Esta frase le cuadraría a Alain Silberstein si atendemos a su fulgurante reaparición en el panorama relojero después de haber quebrado la marca con su propio nombre hace como diez años, manteniendo un perfil muy bajo cuando en la primera década de este siglo lo había petado con su inconfundible estilo. Fue Louis Erard quien lo trajo de nuevo a la palestra en 2020 para personalizar uno de sus reguladores. De hecho, fueron tres modelos los que Silberstein dibujó para esa marca.
Como tres son los modelos que se ha inventado para personalizar -todavía más- el ya de por sí característico BR-03 de Bell & Ross: un sólo hora, un diver y un cronógrafo. Ya que te pones, ponte bien. Cada reloj se fabricará en series limitadas de ejemplares numerados, y los 50 primeros de cada una se venderán juntos en un exclusivo estuche.
Estos relojes, por cierto, sólo se podrán adquirir a través de la página https://grailwatch.com/ , perteneciente al conglomerado singapurés que incluye a Revolution y The Rack
las agujas dejan de ser objetos funcionales para convertirse en grandes formas geométricas de gran tamaño que evocan un sentido lúdico.
En el caso del sólo hora, un enorme círculo rojo describe las horas, una gran flecha azul indica los minutos, mientras que una forma de S en amarillo intenso indica el paso de los segundos. (Siguiendo con la no-funcionalidad, la fecha es un diminuto círculo en la esfera...) Sin perder la esencia, la minutera es puramente Bell & Ross y recuerda al indicador de los instrumentos de a bordo. Los cuatro marcadores cardinales también se han pintado de amarillo primario. Incorpora un movimiento automático con función de fecha, el calibre BR.CAL-302 (Base SW-300). Serie limitada a 200 unidades con un precio de 4.400 dólares americanos. Su nombre, BR 03-92 KLUB 22
El diver, denominado BR 03-92 MARINE 22 quiere recuperar cierta utilidad como tal y presenta el primer uso de las agujas "Maxi" de Silberstein, una manecilla con punta circular azul con una enorme trama luminosa para las horas y un indicador rojo al estilo también de los instrumentos de vuelo relleno de material luminoso para el importantísimo minutero, que proporciona una lectura del tiempo de inmersión transcurrido. El bisel cerámico tiene marcados en rojo los últimos 20 minutos. Cabe llamar la atención sobre la "minimalización" del logo de B&R, sin leyendas añadidas de ningún tipo. La fecha sigue estando ahí como un convidado de piedra. Monta igualmente un calibre BR CAL- 302 pero el precio sube hasta los 5.600 dólares mientras que la tirada se reduce a tan solo 100 ejemplares. Cosas de la exclusividad.
Finalmente, el cronógrafo BR 03-94 KRONO 22 es la máxima expresión Silbersteiniana dentro de la trilogía, ya que presenta hasta cinco de las icónicas manecillas que han hecho de sus diseños algo inconfundible. Eso sí, aquí volvemos a sacrificar funcionalidad por estética, porque cuando la horaria se sitúe sobre alguna de las dos subesferas (algo que ocurrirá sí o sí un par de veces cada hora) va a ser divertido ver la hora de, eso, un vistazo. Lo más chulo, para mí, el conjunto corona-pulsadores. Monta un calibre BR.CAL-301 (SW-500), costará 6.700 dólares y sólo va a haber -también- 100 ejemplares disponibles.
Por cierto, si a alguno no le sonaban las palabras con las que he iniciado el post:
Como tres son los modelos que se ha inventado para personalizar -todavía más- el ya de por sí característico BR-03 de Bell & Ross: un sólo hora, un diver y un cronógrafo. Ya que te pones, ponte bien. Cada reloj se fabricará en series limitadas de ejemplares numerados, y los 50 primeros de cada una se venderán juntos en un exclusivo estuche.
Estos relojes, por cierto, sólo se podrán adquirir a través de la página https://grailwatch.com/ , perteneciente al conglomerado singapurés que incluye a Revolution y The Rack
las agujas dejan de ser objetos funcionales para convertirse en grandes formas geométricas de gran tamaño que evocan un sentido lúdico.
En el caso del sólo hora, un enorme círculo rojo describe las horas, una gran flecha azul indica los minutos, mientras que una forma de S en amarillo intenso indica el paso de los segundos. (Siguiendo con la no-funcionalidad, la fecha es un diminuto círculo en la esfera...) Sin perder la esencia, la minutera es puramente Bell & Ross y recuerda al indicador de los instrumentos de a bordo. Los cuatro marcadores cardinales también se han pintado de amarillo primario. Incorpora un movimiento automático con función de fecha, el calibre BR.CAL-302 (Base SW-300). Serie limitada a 200 unidades con un precio de 4.400 dólares americanos. Su nombre, BR 03-92 KLUB 22
El diver, denominado BR 03-92 MARINE 22 quiere recuperar cierta utilidad como tal y presenta el primer uso de las agujas "Maxi" de Silberstein, una manecilla con punta circular azul con una enorme trama luminosa para las horas y un indicador rojo al estilo también de los instrumentos de vuelo relleno de material luminoso para el importantísimo minutero, que proporciona una lectura del tiempo de inmersión transcurrido. El bisel cerámico tiene marcados en rojo los últimos 20 minutos. Cabe llamar la atención sobre la "minimalización" del logo de B&R, sin leyendas añadidas de ningún tipo. La fecha sigue estando ahí como un convidado de piedra. Monta igualmente un calibre BR CAL- 302 pero el precio sube hasta los 5.600 dólares mientras que la tirada se reduce a tan solo 100 ejemplares. Cosas de la exclusividad.
Finalmente, el cronógrafo BR 03-94 KRONO 22 es la máxima expresión Silbersteiniana dentro de la trilogía, ya que presenta hasta cinco de las icónicas manecillas que han hecho de sus diseños algo inconfundible. Eso sí, aquí volvemos a sacrificar funcionalidad por estética, porque cuando la horaria se sitúe sobre alguna de las dos subesferas (algo que ocurrirá sí o sí un par de veces cada hora) va a ser divertido ver la hora de, eso, un vistazo. Lo más chulo, para mí, el conjunto corona-pulsadores. Monta un calibre BR.CAL-301 (SW-500), costará 6.700 dólares y sólo va a haber -también- 100 ejemplares disponibles.
Por cierto, si a alguno no le sonaban las palabras con las que he iniciado el post: