Comparto plenamente vuestras opiniones, en el sentido de que el oro no aporta nada práctico a un reloj. Es más blando, más pesado y menos resistente a la abrasión que el acero.
Ahora bien, las marcas que están situadas en lo más alto de la pirámide de la Alta Relojería (o que lo pretenden), lease Patek, Vacheron, Breguet, F.P. Journe, Philippe Dufour, Lange, etc... realizan la casi totalidad de su producción en metales preciosos.
Dos de ellas, que expresamente no he incluido en la lista, Audemars Piguet y Rolex tuvieron el acierto (o casualidad) de inaugurar el concepto del reloj de gama alta deportivo en acero con sus famosos Submariner y Royal Oak, hecho que les ha permitido adelantar a las mencionadas en cifra de negocio y en "popularidad".
Este fenómeno "obligó" a Patek a fabricar el Nautilus y posteriormente el Aquanaut, a Vacheron a crear el Overseas, etc..
Todas estas corrientes-fenómenos tienen diversas lecturas o interpretaciones que las hacen coherentes o no.
- Hasta mediados del siglo XX, el deporte o simplemente la vida dinámica no tenía cabida o incluso estaba mal vista entre la clase alta y la nobleza. Por tanto, es consecuente que los fabricantres de artículos de lujo de gama alta utilizaran en exclusiva metales preciosos, que otorgaban un plus de exhibicionismo a la mayor parte de sus compradores, que al igual que hoy en día buscan en estas piezas más el efecto joya que el valor mecánico.
Es la época dorada de Patek y Vacheron, símbolos reconocidos popularmente como señal de estatus social.
Impensable en esta época, que un reloj como Panerai sea (nos guste o no) referente de exclusividad.
- A partir de la segunda mitad del siglo pasado, se produce un cámbio, diría que radical en el modus vivendi de la sociedad pudiente. El deporte, el aspecto dinámico, la sensación de actividad pasan a ser de vital importancia para la imagen externa de este nucleo social.
Recordemos que nuestras bisabuelas, tomaban vinagre y se maquillaban con polvos blancos para palidecer su tez y no dejar ningun rastro de duda de que no efectuaban actividad alguna al aire libre. Hoy en día se produce el fenómeno inverso, el hecho de estar moreno (ardtificialmente o no) es símbolo de estatus social elevado.
En consecuencia, los fabricantes de prestigio, se dan cuenta de la necesidad de crear lineas de relojes que ensalcen el tan apreciado dinamismo: Triunfan los Submariner y los Royal Oak y sus fabricantes desbancan a Patek y Vacheron en reconocimiento popular, pasando estas dos últimas marcas a ser solo conocidas por los "conaisseurs" valga la rebundancia.
No olvidemos que para las personas que adquieren un producto con la principal finalidad de ser reconocidos como "pudientes", es de vital importancia que la marca que adquieren sea conocida y reconocida como cara por todos los estratos sociales, de lo contrario su finalidad no se cumple.
Las dos etapas mencionadas, bajo mi punto de vista son coherentes y consecuentes con la demanda y con el cliente. Al fin y al cabo la principal finalidad de cualquier empresa es generar beneficios.
Llegado a este punto, hoy en día nos encontramos con que aun tenemos reminiscencias del primer periodo, mezcladas con las nuevas tendencias, lo que produce un cierto desbarajuste en el sector. Aquí cada marca sigue su estrategía o en algunos casos no la sigue porque me temo que no la tiene.
Pondré algunos ejemplos y mi muy personal opinión de ellos:
- Patek Philipe, Vacheron Constantin, Cartier; creo que siguen una política de marca coherente. Se centran en un target de cliente muy definido que busca perfección y exclusividad. Los metales preciosos, nos guste o no siguen aportando un plus en este sentido y por tanto los utilizan en la mayoría de sus modelos junto con las complicaciones relojeras más complejas. En relojes de más de 30.000 €, la variable de repercusión de coste entre el acero y el oro o platino es casi despreciable.
Residualmente, ambas marcas mantienen una linea pseudo-deportiva en acero para satisfacer a sus clientes de toda la vida cuando navegan o pasean por la playa.
Fabricantes recien llegados como Lange, F.P. Journe, P. Dufour, se unen a dicha estrategia.
- Audemars Piguet y Rolex; siguiendo inicialmente la misma estrategia que las anteriores, son las abanderadas del cambio social y enfocan todos sus esfuerzos en las gamas deportivas en acero que representan la mayor parte de su facturación. Mantienen tambien residualmente una pequeña producción en oro y platino con el fin de proporcionar un "servicio completo" a sus clientes fieles.
A ellos se unen los Richard Mille, Urwerk, etc...
Los ejemplos mencionados, se centran exclusivamente en fabricantes con historia y con pedigrí.
Si bajamos en la pirámide relojera, nos encontramos con fabricantes que en mi opinión son fieles a su historia y otros muchos que realmente no se ubicarlos y me temo que ellos mismos tampoco.
- Panerai, Breitling, Omega, TAG, Seiko, etc..
Aun perteneciendo a distintas escalas de precio, se posicionan fuertemente como relojes deportivos-instrumento, todos ellos en acero o en materiales "tecnológicos" como el Titanio o el Tantalio. Al igual que los anteriores, muy residualmente mantienen una gama de relojes en metales preciosos. Bajo mi punto de vista y en la debida proporción, es una política coherente porque con ella satisfacen al "fanático" de dichas marcas que no tiene necesidad de "ponerles los cuernos" cuando desea un "reloj de vestir".
- Jaeger LeCoultre e IWC. En mi modesta opinión, aun y realizando excelentes relojes, han perdido el norte desde el punto de vista de márketing. ¿son marcas deportivas o de lujo? yo realmente no lo sé.
Fabrican en proporciones parecidas ambas gamas y con ello pierden identidad y me temo que a la larga también mercado. Podemos citar varios ejemplos:
IWC con su nuevo Ingenieur, reloj típico deportivo de hora y fecha. Visto su posicionamiento de precio supongo que pretende ganar mercado a los Aquanaut, Overseas, etc... dudo que lo consiga porque carece del estatus de marca necesario.
IWC con su Portugués, tambien reloj con fecha y hora y con una gama amplísima en oro y platino. ¿pueden competir a precios parecidos con un Malte, Calatrava, Saxonia, Simplicity, Octa, etc..? en mi opinión, a medio plazo es una batalla perdida.
JLC con sus nuevos Compressor Chronographe: por posicionamiento no va a poder competir con los Royal Oak.
Lo mismo le va a pasar con su extensa gama Master Control en oro y platino, tiene la batalla perdida con "los grandes".
Son dos marcas, que en lugar de potenciar sus puntos fuertes, tanto por história como por identidad: Reverso y Flieger, voluntariamente se han disgregado y están en tierra de nadie.
Panerai, que es a lo que íbamos antes de este inmenso rollo, siempre en mi particular opinión, mantiene un caracter propio y una estética claramente distinguible y diferencial.
Al tiempo, ofrece una característica única que lo aparta de los demás: Su producción es limitada y pública. Remarco lo de pública porque todos sabemos o suponemos las producciones limitadas en Patek, Vacheron, etc... pero alguien puede decirnos exactamente ¿cuantos Calatravas se fabrican anualmente?... pues no, sencillamente nadie lo conoce.
Pero lo más extraordinario y diferencial, es que dicha producción limitada es asequible para casi cualquier amante de la relojería dado que empieza por menos de 3.000 €.
Panerai, mantiene el 99% de su producción en acero, con vocación de instrumento avanzado (gama contemporanea) o de fidelidad a los orígenes (gama histórica).
Estoy totalemente de acuerdo con PASO, que un Panerai de oro y aun menos los limitadísimos SED, no son coherentes con la imagen de la marca, pero dada la ínfima producción de ellos, lo considero benévolamente como una licencia poética.