S
sunday
Forer@ Senior
Sin verificar
En efecto estimado Wallabee, comparto plenamente esa idea que subyace en tu reflexión: Es decir, las cuestiones de política energética deben ordenarse en el sentido del bien común de la sociedad acompañando el proyecto económico del gobierno, y no, respondiendo a los intereses de los grandes capitales que circulan por la industria petrolera del mundo. Sólo el estado es capaz de actuar siguiendo estos lineamientos. Por ello, era imprescindible recuperar el control de YPF por parte del estado Argentino. Para orientar sus ganancias en beneficio de la sociedad dueña del petróleo en la Argentina. Ésta, no es una idea novedosa. Es una idea muy conocida. Sucede que el neoliberalismo que primó por estas tierras durante los '90 remató a precio vil a YPF y varias empresas estatales más. Por lo tanto, esta situación actual, era un final anunciado que, si no se llevaba adelante, conducía al suicidio energético de la Argentina y al vaciamiento de YPF.
cordialmente
sergio
No puedo menos que quedarme anonadado ante la brillantez de esta argumentación. Con mentes tan preclaras resulta más que sorprendente, incluso chocante, el estado actual de la nación argentina.
La única explicación posible es que exista una gran conspiración de los grandes capitales internacionales para mantener sojuzgado a tan distinguido pueblo, atemorizados ante la posibilidad de que llegue a realizarse el potencial de tan capaz raza y ocupe el lugar que merece entre las naciones más punteras del mundo, es decir, el primero. No es descabellado suponer que la Historia colocará a la preclara figura de Cristina Fernández de Kirchner por encima de aquel bárbaro conquistador, injustamente conocido como Alejando Magno, y hermanada con el pionero de la revolución bolivariana, el camarada comandante Hugo Chávez Frías y la luz inmarcesible del pueblo cubano, el estadista ejemplar, internacionalista infatigable, precursor de la revolución cubana Fidel Castro Ruz.
Sergio, muchísimas gracias por abrirme los ojos ante la luz que nos guía hacia un mundo nuevo.
¡Viva la revolución!