Durante la semana del 8 al 14 de Diciembre de 2008 la joyería Gómez y Molina de Málaga ha presentado los nuevos Seiko Spring Drive. El trato recibido ha sido exquisito, y al marcharnos nos regalaron unas botellas de cava con el logo «Seiko Spring Drive» y varias revistas. Mencionar que en la presentación conocí a un señor muy agradable y simpático, gran conocedor de este mundo de los relojes: es René-Pierre Vuistiner, el director de Revolution España y dueño de la revista Diez y Diez.
Como norma general, todos los Spring Drive son manufacturados por Seiko y sus calibres son exclusivos. Todos los modelos son automáticos, tienen una reserva de marcha de 72 horas, se les puede dar cuerda manual y la precisión de marcha está entre +1 y -1 segundos por día. En cuanto a las cajas; todas están inspiradas en el espacio y están realizadas en acero con doble zafiro (excepto en el Spring Drive que fue a la luna, que lleva el fondo ciego) y con una hermeticidad de 10 atm aunque no llevan corona roscada. El precio varía según versión entre los 3.300 y 3.600 € de las versiones GMT y con indicador de reserva de marcha y de unos 5.500 € para el cronógrafo.
En la muestra de relojes que había en la tienda llamaba la atención un cronógrafo de titanio de unos 50 mm con correa tipo NATO y una composición de agentes luminiscentes de altas prestaciones. El reloj era una edición limitada a 20 unidades (a unos 120.000 € la pieza) del reloj que llevó un turista espacial japonés al espacio. El modelo en cuestión se encuentra en fase de prototipo pero ya están adjudicados sus dueños.
Sin duda, la estrella de la noche fue un Spring Drive Fase Lunar referencia SNR011. A todos nos impactó por sus formas de caja poco corrientes donde predominaban los pulidos y su esfera de color negro piano con la zona de la reserva de marcha en antracita. El reloj cuenta con segundero central, fase lunar y reserva de marcha de 72 horas. Monta el calibre 5R67 con 288 componentes y 30 rubíes.
Entre las mujeres causó sensación el Spring Drive SNS003, con una esfera grabada en relieves triangulares color salmón junto con una suave y flexible correa de cocodrilo con hebilla ardillón firmada por la marca. El reloj resultó muy agradable en cualquiera de sus esferas, con un toque muy elegante. El calibre montado es el 6R65 de 276 componenetes y 30 rubíes. Lleva indicador de reserva de marcha a las 6, calendario a las 3 y segundero pequeño a las 9.
El Cronógrafo que Seiko nos presento era de unas dimensiones grandes y edición limitada a 300 unidades. La caja viene con acabado predominante cepillado y detalles pulidos, dotado de un armis de acero en acabado cepillado en su mayor parte, aunque con algunos detalles pulidos, cierre de mariposa de buena calidad: macizo y contundente. El calibre es un 5R86 con 416 componentes y 50 rubíes. El reloj muestra el calendario a las 3, aguja GMT en el centro, segundero a las 9, trotadora del cronógrafo central, indicador de reserva de marcha entre las 6 y las 7, contador de minutos entre la 1 y las 2 y contador de horas entre las 4 y las 5.
En cuanto a los GMT, encontramos versiones de diseño clásico (SNR013 y SNR015) con correas de piel de cocodrilo y numeración romana a las 12, 3, 6 y 9. También tenemos versiones de diseño más deportivo (SNR009 y SNR007) con brazalete de acero cepillado con detalles pulidos. Ambos llevan el calibre 5R66 de 296 componentes y 30 rubíes.
Como valoración personal, diré que me ha sorprendido el trabajo sobre las esferas y cajas por su buen acabado aunque hay ciertos detalles que no gustan; como que las platinas inferiores del calibre carecen de decoración. Desde luego todo el mundo coincidirá en que la aguja del segundero desprende una especie de magnetismo: simplemente no puedes dejar de mirarla. Sobre si tendrán una buena aceptación… decir que aunque los diseños son muy buenos, las cajas se salen un poco de lo común con sus formas y claro está que los compradores tampoco están acostumbrados a pagar entre 3.000 y 5.000 € por un Seiko, aunque en este caso su precio esté justificado.