Ophion es una marca de relojes nueva. Y lo expreso así porque decir que es “una nueva marca de relojes” podría dar la sensación de más de lo mismo. Y no es el caso, porque Ophion nace de la pasión de sus dos jóvenes creadores por la Alta Relojería y su voluntad de aportar su propio y original grano de arena a un mundo, el de la relojería mecánica, que parece que ya lo haya dicho todo.
Tanto por la edad de sus fundadores –menos de treinta- como por el propio concepto de reloj y marca, Ophion es hija de internet. Huberto y Miguel adquieren el interés en sus propios entornos familiares pero es en la Red donde buscan y encuentran una información cada vez mejor estructurada pero en cualquier caso ingente. Y es en los foros y concretamente en Relojes Especiales donde empieza a consolidarse la idea -loca al principio- de fundar su propia marca. Una marca que acerque la Alta Relojería a un público si no entendido sí muy informado, todo un reto.
Pero, atención. Veamos qué entienden ellos por Alta Relojería:
“El mercado ha acabado asociando el lujo con la alta relojería, perdiéndose la referencia intrínseca de la “Haute Horlogerie”. Nosotros pensamos que son valores diferentes y separables. Así la utilización únicamente de materiales preciosos, y la búsqueda de la exclusividad basada en costosos planes de marketing, son estrategias para situar productos en el segmento del lujo, incrementando el precio de venta y limitando la producción aleatoriamente para crear una exclusividad ficticia. En Ophion queremos cambiar esta realidad para ofrecer relojes con valores de la “Haute Horlogerie”, pero desechando todos aquellos elementos superfluos y gratuitos que solo encarecen el coste final, una puerta donde el mayor número posible de aficionados puedan encontrar un acceso e este increíble mundo.
Toda una declaración de intenciones. El primer fruto de este concepto es el OPH 960, inspirado en la estética de los ’60: relojes de líneas sencillas y elegantes, con cajas ultra planas, esferas y cristales abombados, agujas Duphine, cuerda manual, legibilidad nocturna. Y funcionalidad ante todo. Mantener la esfera abombada y conseguir que el conjunto fuera lo más extraplano posible, fueron los requisitos esenciales que se fijaron inicialmente. Ello implicaba que la mayor parte de las piezas debían curvarse situándonos fuera de la norma de fabricación establecida, lo que supuso todo un reto para su realización.
En la parte técnica tenían claro que la carga debía ser manual y alejarse de la hegemonía de las maquinarias ETAsa. Buscando un calibre con interés mecánico y técnico, la elección recayó en el Technotime TT718 con reserva de marcha de 5 días, una autonomía ideal para carga manual además de ser un movimiento robusto, preciso y fiable. En la parte estética se decidieron por achaflanar los cantos para contrastaran con el cepillado lineal Colimaçon de los puentes, rayos de sol en el doble barrilete para conseguir brillos radiales durante el proceso de carga, perlado en la pletina inferior y finalmente añadieron tornillos azulados a fuego para dar contraste y color al conjunto. En cuanto a la caja –fabricada en Alemania- se le ha dado una forma y acabados que completa perfectamente el conjunto.
Y la presentación. Otra vez en palabras de sus creadores: “Ideamos un packaging en consonancia. Queríamos que el cliente recibiese el reloj como si de una herencia se tratase, recuperando la tradición de legado familiar que antiguamente tenían los objetos preciados. El conjunto debía ser artesano y rústico, desgastado por el paso del tiempo, encontrado por sorpresa en un viejo desván y que junto con los planos técnicos del reloj, constituía un tesoro perdido, redescubierto de forma inesperada para volver a la vida y cumplir su perpetua función.”
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Todo esto por un precio de 1.580 € impuestos (España) incluidos.
Esperamos expectantes su presentación en sociedad: el próximo día 9 de Mayo en la reunión anual de Relojes Especiales.
www.ophion-watches.com
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