WATCH MAKER
Forer@ Senior
Sin verificar
Hola a todos:
En su día me compré un PO 2500C de 42mm y con armis...todo muy clásico. Aunque también estuve mirando el Submariner, me pareció que el acabado del Omega era superior y me pareció más actual.
Recientemente un familiar muy cercano se ha comprado un Submariner no date nuevo (particularmente es el que más me gusta), y estuve comparándo con mi PO.
Realmente el antireflejos del PO es mucho mejor (el Sub mostraba reflejs en alguna posición), ignoro si los Sub actuales siguen incorporando antireflejos sólo por una cara.
El armis del PO también tiene una sensación de mayor robustez y calidad, la de Rolex parece más "sencilla" si me permitís la expresión.
Respecto al bisel, el mío no es cerámico, mientras que en el Sub sí lo es...así que un punto para el Sub.
Respecto a la maquinaria, ya sé que mi PO no monta un calibre de manufactura, pero fue uno de los primeros series C...y se mantiene en +1s diario...no puedo pedirle más.
Ahora viene el pero, creo que la política de Omega con el Seamaster no ha sido la más acertada. Todos los Sub han mantenido una serie de rasgos que lo hacen inconfundible y a temporal, nos guste más o menos hay que reconocerlo. Tamaño de 40mm, tamaño de bisel, limpieza de ragos, esfera y textos similares...aunque no han renunciado a incoporar las últimas novedades tecnológicas. Eso hace que un Sub se pueda distinguir a distancia y que ha hecho de él un mito, al igual que ocurre con el Speedy...Omega ha conservado la esencia en este reloj, incluso en las distintas variantes, aunque en este caso doy la razón a los puristas.
En el Seamaster, sin embargo, Omega no ha seguido una línea clara...y cuando por fin presentan un PO de 42mm, con un tamaño "clásico" y que vuelve a las líneas de los Seamaster clásicos (bisel estrecho, misma imagen, etc...), entonces sacan un calibre 8.500 maravilloso pero que convierte el PO en un tocho más grande y difícil de llevar con traje...que hace que el Seamaster 300m se convierta en la mejor opción. Pero claro volvemos a lo mismo, cuando tenemos un reloj con una imagen clásica, con una imagen que se identifica a los Seamaster de antaño, cojen y cambian algo...y así no vamos bien.
Nos queda mucho que aprender de Rolex, desde luego es una opinión y Omega tiene su mercado y sus respectivos estudios realizados, pero...ya podemos tener relojes técnicamente maravillosos, preciosos, con un comportamiento sublime, bonitos, pero con sólo un reloj icónico el Speedy (manual y fondo ciego por supuesto). Y siendo un enamorado como soy de los Diver, que lástima que Omega no lo haya sabido hacer mejor...¿porqué no un 2500 de manufactura, o un 8500 en una caja de medidas y grosores clásicos?.
No nos engañemos los relojes "tochos" no son atemporales, lo elegante es atemporal y lo atemporal da imagen de calidad y marca.
Aunque me gusta más mi PO que el Sub, reconozco que Rolex con su Sub lo ha sabido hacer mejor que Omega.
Una anecdota, hace poco un amigo me vio el PO y me dijo, ¡pero si es igual al Seamaster que tenía mi padre!, ¡que bonito!...a eso me refiero.
Nada ahí dejo el tocho, a ver que opináis.
En su día me compré un PO 2500C de 42mm y con armis...todo muy clásico. Aunque también estuve mirando el Submariner, me pareció que el acabado del Omega era superior y me pareció más actual.
Recientemente un familiar muy cercano se ha comprado un Submariner no date nuevo (particularmente es el que más me gusta), y estuve comparándo con mi PO.
Realmente el antireflejos del PO es mucho mejor (el Sub mostraba reflejs en alguna posición), ignoro si los Sub actuales siguen incorporando antireflejos sólo por una cara.
El armis del PO también tiene una sensación de mayor robustez y calidad, la de Rolex parece más "sencilla" si me permitís la expresión.
Respecto al bisel, el mío no es cerámico, mientras que en el Sub sí lo es...así que un punto para el Sub.
Respecto a la maquinaria, ya sé que mi PO no monta un calibre de manufactura, pero fue uno de los primeros series C...y se mantiene en +1s diario...no puedo pedirle más.
Ahora viene el pero, creo que la política de Omega con el Seamaster no ha sido la más acertada. Todos los Sub han mantenido una serie de rasgos que lo hacen inconfundible y a temporal, nos guste más o menos hay que reconocerlo. Tamaño de 40mm, tamaño de bisel, limpieza de ragos, esfera y textos similares...aunque no han renunciado a incoporar las últimas novedades tecnológicas. Eso hace que un Sub se pueda distinguir a distancia y que ha hecho de él un mito, al igual que ocurre con el Speedy...Omega ha conservado la esencia en este reloj, incluso en las distintas variantes, aunque en este caso doy la razón a los puristas.
En el Seamaster, sin embargo, Omega no ha seguido una línea clara...y cuando por fin presentan un PO de 42mm, con un tamaño "clásico" y que vuelve a las líneas de los Seamaster clásicos (bisel estrecho, misma imagen, etc...), entonces sacan un calibre 8.500 maravilloso pero que convierte el PO en un tocho más grande y difícil de llevar con traje...que hace que el Seamaster 300m se convierta en la mejor opción. Pero claro volvemos a lo mismo, cuando tenemos un reloj con una imagen clásica, con una imagen que se identifica a los Seamaster de antaño, cojen y cambian algo...y así no vamos bien.
Nos queda mucho que aprender de Rolex, desde luego es una opinión y Omega tiene su mercado y sus respectivos estudios realizados, pero...ya podemos tener relojes técnicamente maravillosos, preciosos, con un comportamiento sublime, bonitos, pero con sólo un reloj icónico el Speedy (manual y fondo ciego por supuesto). Y siendo un enamorado como soy de los Diver, que lástima que Omega no lo haya sabido hacer mejor...¿porqué no un 2500 de manufactura, o un 8500 en una caja de medidas y grosores clásicos?.
No nos engañemos los relojes "tochos" no son atemporales, lo elegante es atemporal y lo atemporal da imagen de calidad y marca.
Aunque me gusta más mi PO que el Sub, reconozco que Rolex con su Sub lo ha sabido hacer mejor que Omega.
Una anecdota, hace poco un amigo me vio el PO y me dijo, ¡pero si es igual al Seamaster que tenía mi padre!, ¡que bonito!...a eso me refiero.
Nada ahí dejo el tocho, a ver que opináis.