D
Dafervi
Forer@ Senior
Sin verificar
Os presento mi nueva Parker 61, la puesta a punto ha sido toda una aventura ya que necesitaba un alineamiento de los gavilanes pero para ello era conveniente desenroscar la boquilla y por lo que he podido leer, en la 61 la operación es más delicada que en la 51 por la diferente calidad de los plásticos, al ver que no se podía desenroscar ni con calor preferí pasar al plan conservador y alinearlos pacientemente con el poco juego que deja la boquilla carenada.
Una vez hecho esto resulta que el anterior propietario presumo que era zurdo por el desgaste de los iridios, cosa que me obligaría a escribir demasiado forzado para que no falle trazos así que tocó darle unas pasadas con la lima para hacerla a mi agarre.
Todavía me faltaba limpiar el sistema de carga, que es por lo que es conocida esta estilográfica para bien o para mal, por fortuna antes de comprarla ya había estado investigando en el foro y a falta de pera de goma tenía preparado mi propio invento.
La estilográfica me encanta, tiene todas las virtudes de la 51 y los añadidos estéticos en mi opinión suponen una buena evolución sobre el mismo concepto. Dicho esto, el sistema de carga por ingenioso que sea es un engorro, no sólo por su limpieza sino porque hay que dejarla días secando tras su limpieza antes de cargarla, sea por primera vez, sea para cambiar de tinta por lo que en la práctica uno siempre usará la misma.
En cualquier caso, una estilográfica icónica junto a sus hermanas Parker carenadas, todas de un estupendo desempeño.
Como siempre, agradecer al foro la información aquí acumulada sin la cual uno difícilmente iba a poder poner a punto estos instrumentos sin ayuda de un profesional.
Una vez hecho esto resulta que el anterior propietario presumo que era zurdo por el desgaste de los iridios, cosa que me obligaría a escribir demasiado forzado para que no falle trazos así que tocó darle unas pasadas con la lima para hacerla a mi agarre.
Todavía me faltaba limpiar el sistema de carga, que es por lo que es conocida esta estilográfica para bien o para mal, por fortuna antes de comprarla ya había estado investigando en el foro y a falta de pera de goma tenía preparado mi propio invento.
La estilográfica me encanta, tiene todas las virtudes de la 51 y los añadidos estéticos en mi opinión suponen una buena evolución sobre el mismo concepto. Dicho esto, el sistema de carga por ingenioso que sea es un engorro, no sólo por su limpieza sino porque hay que dejarla días secando tras su limpieza antes de cargarla, sea por primera vez, sea para cambiar de tinta por lo que en la práctica uno siempre usará la misma.
En cualquier caso, una estilográfica icónica junto a sus hermanas Parker carenadas, todas de un estupendo desempeño.
Como siempre, agradecer al foro la información aquí acumulada sin la cual uno difícilmente iba a poder poner a punto estos instrumentos sin ayuda de un profesional.