Claudio
Milpostista
Sin verificar
No supo que iba desnudo hasta que no pudo leer la hora en su "Muñeca".
Creía que atrasando su reloj viviría un poco más.
Andaba todos los días ocupado en buscar su tiempo perdido, hasta que adquirió un buen reloj.
La gran paradoja de la vida es la de que nos pasamos la mayor parte de ella intentando encontrar y atrapar todo el TIEMPO PERDIDO, sin saber muy bien qué es.
No por mucho madrugar adelantaremos los relojes.
Aquella suiza era tan pobre que no tenía nada para dar, ni siquiera la hora. Su vaca, en vez de leche, daba pena.
Muñeca es ella. Se fue.
Última edición por un moderador: